miércoles, 28 de diciembre de 2022

Adam Zagajewski, Dos ciudades




 Zagajewski es un autor polaco que nació en Lvov (actualmente, Leópolis, Ucrania) y que, con cuatro meses de edad, su familia tuvo que trasladarse a Gliwice, antigua población alemana que, con el movimiento de fronteras tras acabar la II Guerra Mundial, pasó a formar parte de Polonia. 

Se trata de un poeta, pero este libro no es de poesía, es prosa que recoge un conjunto de narraciones, algunas muy breves, la primera de las cuales da título a este libro. Dos ciudades relata la paradoja de su familia que, sin abandonar su país, fueron desplazados a la fuerza convirtiéndose en migrantes. De aquella experiencia vivida en una época de totalitarismos, guerra, exclusión, asesinatos en masa, nace esta narración de gran lucidez. 
«La gente del mercado de hortalizas de la calle Bytomska solo era real y contemporánea en parte, mientras que por lo demás recordaban sombras, unas sombras vivientes. Inmigrantes en su propio país, ex profesores de una universidad que ya no existía, ex oficiales de un ejército que había sido disuelto, ex consejeros y ex letrados con el deje oriental de un Oriente desaparecido, rangos pertenecientes a otra era, abrigos que habían sido vueltos del revés por enésima vez, zapatos de cuero de los de antes, sombreros desteñidos con etiquetas de tiendas ya inexistentes». 

Se nota que es poeta, escribe con una sensibilidad y una riqueza de lenguaje extraordinarias:
 «¡Cuánta paciencia se necesita para soportar el lento transcurso de la vida! Las pequeñas eternidades, donde nos bañamos como los gorriones en los charcos, nunca forman una totalidad». 
Esta es la segunda obra que leo de este autor (puedes buscarla por su etiqueta en el lateral), la anterior también es excelente: Una leve exageración. Estoy rendida ante Zagajewski, aunque de momento no me lanzo a leer su poesía.

domingo, 18 de diciembre de 2022

Javier Marías, Berta Isla




He leído varias novelas de Javier Marías, algunas me han gustado mucho y otras menos (Los enamoramientos, la que menos), pero todas tienen algo en común: lo bien escritas que están y la perfección de su estructura interna. También son muy frecuentes en sus novelas las referencias literarias textuales y la evocación de personajes histórico-literarios. 

La muerte de Javier Marías fue una sorpresa inesperada, enseguida tuve ganas de leer algo suyo y esta novela me pareció buena elección. Echaré en falta sus artículos periodísticos y su incorrección política (no siempre coincidía con él pero siempre me gustaba su manera de expresar sus opiniones). 

La novela tiene una parte del relato que corresponde a un narrador externo que parece conocer muy bien a Tom Nevinson, la pareja de Berta Isla. Hay otra parte de la novela en que la principal voz narrativa será Berta Isla, una mujer que ama a su marido pero que está abocada a la soledad y el abandono por el trabajo de Nevinson. Esta situación llena de ausencias no es la que esperaba la protagonista cuando se casó con él. Su historia, como la de Penélope, es esperar mientras su marido desaparece en una especie de viaje con escalas puntuales, como un Ulises del siglo XX. 

El Ulises del siglo XX entra en los servicios secretos ingleses en su época universitaria en Oxford, y sus misiones de infiltrado le complican la vida mientras Berta se pregunta en qué trabaja Nevistán. Poco a poco Berta va sabiendo algo, muy poco, y las ausencias de su marido van creciendo y la separación de su familia madrileña se incrementan. 

La novela me parece excelente.

jueves, 8 de diciembre de 2022

Andrea Camilleri, El ladrón de meriendas

 


Esta es la tercera novela que leo de Camilleri (si queréis saber mi opinión de las anteriores buscad su nombre en las etiquetas que están en el lateral del blog) y entre ellas han transcurrido años. Esto quiere decir que me gusta el autor y su personaje principal el comisario Salvo Montalbano, pero que no me ha entusiasmado como para seguir la serie completa y voy leyendo sobre la marcha, sin orden ni concierto.

En esta novela, Montalbano, con su característica dureza/ternura encara un caso de asesinato de un comerciante jubilado cuya joven amante tunecina desparecida es objeto de todas las sospechas. Pero como ocurre siempre, las cosas no son tan fáciles como parecen.

La resolución del crimen (de los crímenes en realidad) y de otros aspectos que irán apareciendo ligados a él, nos permite observar al comisario Montalbano, un personaje peculiar, poco ortodoxo pero a la vez respetuoso con la ley. Además de su trabajo como policía, Montalbano es un gran amante de la gastronomía siciliana que nos permite conocer sus platos favoritos y cómo los saborea.

Mantiene una relación difícil con Livia Burlando que vive en Génova (Montalbano trabaja en Vigata, en la provincia de Montelusa, dos nombres inventados). Pero en esta novela su relación parece encarrilarse puesto que Montalbano parece dispuesto, por fin, a comprometerse con su pareja y con un niño, el ladrón de meriendas, del que es mejor que no desvele nada.

lunes, 28 de noviembre de 2022

Michael Connelly, Pasaje al paraíso

 


Leí a este escritor norteamericano de «novela negra» hace unos cuantos años, tengo numerosas novelas de la serie del detective Harry Bosch. En su momento disfruté y me entretuve mucho con ellas y, quizás, su recuerdo me ha llevado, recientemente, a ver la serie de TV Bosch, inspirada en estas novelas. La serie me ha parecido bastante buena tanto por los actores y actrices que encarnan a los protagonistas de las novelas como por el desarrollo de las diferentes temporadas relacionadas con casos que van a parar a Homicidios que es donde mora el conflictivo Harry Bosch.

Buscando las novelas que me faltaban, comprobé que entre ellas no tenía la primera, este Pasaje al paraíso, que encontré en una librería de libros usados. Sorprendentemente aparece ya muy bien caracterizado el protagonista, pero también otros personajes como  Eleanor Wish, el compañero de Bosch, Jerry Edgar, el jefe Irving, etc.

El caso para resolver está relacionado con la industria del cine porno que sirve de tapadera para blanquear dinero a la mafia de Los Ángeles y de Las Vegas, escenario de las andanzas del detective. Lo que en principio parecía una investigación sencilla, se irá complicando y Bosch se verá en serios aprietos. 

Después de leer tantas novelas de M. Connelly y ver la serie me ha parecido un poco previsible, pero me ha entretenido mucho en las horas que he pasado en tren en un viaje que hice hace unos días. Una lectura perfecta en esas circunstancias.

viernes, 18 de noviembre de 2022

Jordi Amat, El hijo del chófer

 


No compré este libro porque es un tema que a priori no me interesa demasiado, pero el libro estaba en casa y, seguramente afectada por el calor, he decidido leerlo. El hijo del chófer es una narración de no ficción, un género que tiene numerosos seguidores entre escritores de relevancia como es el caso de Carrère, Cercas, Vuillard, entre otros.

Amat parte de la idea de que la no ficción literaria puede aportar algo que no siempre es claro pero que no descarto: puede tener una función social que puede concienciar a los y las conciudadanas. El autor afirma tal cosa, aunque en numerosas ocasiones, como es el caso de El hijo del chófer, escribir una historia real como la de Alfons Quintà no es nada agradable por su enfermiza personalidad y, sobre todo, por el trágico final. Si recurrimos a H. Arendt y su Eichmann en Jerusalén, se puede entender esa incomodidad a la hora de escribir sobre un personaje malvado.

Sin embargo, la biografía de Quintà, el hijo del chofer habla de algo más que de él, habla de un contexto: el final del franquismo y la Transición hasta llegar casi hasta nuestros días. Habla de Cataluña en esa coyuntura, del mito Jordi Pujol y de cómo se construyó, habla, en definitiva, del poder y de sus espacios oscuros.

Tiene que interesarnos adentrarnos en esos recovecos del poder a través de un personaje controvertido porque si no es así el libro puede hacerse pesado (es lo que me ha ocurrido a mi en ciertos momentos).  

martes, 8 de noviembre de 2022

Guillermo Martínez, Los crímenes de Oxford

 


Cuando empiezas la lectura de Los crímenes de Oxford parece que estamos ante una novela policiaca al uso. El punto de partida es la llegada de un joven matemático argentino a Oxford que se verá envuelto en el asesinato de su casera. El crimen le permite relacionarse con un matemático de prestigio, Arthur Seldom, que parece vinculado a ese primer asesinato y a los que vienen a continuación.

Realmente la policía tiene un papel secundario en la investigación cuyo protagonismo lo tienen los dos matemáticos a los que se les requiere sus conocimientos matemáticos para resolver el enigma de los asesinatos. El trasfondo de las indagaciones es el ambiente universitario inglés con sus actividades diversas y su modo de vida tan peculiar.

Sin embargo, el desenlace de la historia te sorprende por inesperado, como si se tratara de una especie de juego de magia (por cierto, hay una actuación de un mago muy peculiar) todo lo que apuntaba la trama de la novela salta por los aires y la realidad de los crímenes poco tiene que ver con lo que parecía. Una sorpresa inesperada que transforma el final de la novela y que habla muy bien de la capacidad del autor para cambiar en pocas hojas lo que parecía que iba por unos derroteros previsibles.

viernes, 28 de octubre de 2022

Rachel Cusk, Despojos. Sobre el matrimonio y la separación

 


Dice en la contraportada que, en 2009, el matrimonio de la autora llegó a su fin y su mundo se fracturó, Despojos es el relato de esa ruptura. Estamos ante una reflexión sobre la destrucción de su matrimonio y la construcción (o mejor, intento de construcción) de una nueva vida. Empieza el libro explicando cómo su vida quedó afectada por su divorcio y como quedaron solo «despojos» de su vida matrimonial. A partir de esta situación desoladora se inició la búsqueda de respuestas desde la observación de otras parejas, la relación con otros hombres, la genealogía femenina familiar, el psicoanalista, etc.

El planteamiento es interesante, sin embargo, la lectura me ha resultado pesada por su manera de escribir. Cusk escribe sin trama y sin personajes centrales, estructura su relato a través de ocho escenas (que parecen pequeños relatos) a partir de las cuales van aflorando los sentimientos y las emociones que nos permiten comprender cómo vivió Cusk   el fracaso de su matrimonio.

martes, 18 de octubre de 2022

Javier Cercas, Independencia

 


Conocí a Cercas con Soldados de Salamina, una novela basada en hechos reales mezclados con ficción, un género en el que se mueve como pez en el agua. No me llamó la atención, sin embargo, esta trilogía titulada Terra Alta, una comarca catalana cuya capital es Gandesa. Pero en casa no elijo solo yo las novelas y este libro rondaba en las estanterías de libros sin leer.

Las estanterías de libros pendientes de lectura están ordenadas por orden alfabético y voy eligiendo algún libro de cada estantería para esponjarlas y reducir su dimensión. Estos últimos días andaba por las estanterías superiores y acabe llevándome al Pirineo esta novela sin saber que formaba parte de una trilogía y que este título es la segunda novela.

El protagonista de la novela es Melchor Marín, un mosso d’esquadra (policía catalana) que en la primera novela tiene relación con los cinco terroristas que fueron abatidos tras intentar saltarse un control policial en Cambrils;tras el atentado cometido en las Ramblas de Barcelona el 17 de agosto de 2017.   

Tras estos sucesos, Melchor Marín se trasladó a la Terra Alta para mantener el anonimato. En esta novela vuelve a Barcelona para ayudar a esclarecer un chantaje a la alcaldesa de Barcelona. Tomando como tema central este chantaje, Cercas desarrolla sus planteamientos respecto a las élites políticas y económicas de la ciudad que controlan el capital y el poder desde hace mucho tiempo. Por medio se entremezcla su manera de entender el «proceso» y el papel de estas élites.

La novela está bien estructurada con personajes interesantes y con una historia que tiene muchos ángulos vinculados a la actualidad.

sábado, 8 de octubre de 2022

Theodor Kallifatides, Timandra

 

Esta novela fue un regalo de cumpleaños de una amiga, ya me habían hablado bien de ella otras amigas de cuyo criterio lector me fío. Sin embargo, el inicio de la novela no fue bueno, me aburría con la historia narrada y la lectura avanzaba lenta, desganada y olvidaba lo leído porque me despistaba con facilidad. Fue al sobrepasar las primeras cincuenta o sesenta páginas cuando empezó a despertarme cierto interés y lo que me ha permitido terminarla con cierto gusto. Para mí son mejores las novelas basadas en su biografía que esta.

Veo que esta novela es de 1994, el éxito que está alcanzando Kallifatides en nuestro país supongo que está llevando a traducir su obra sin orden cronológico. Timandra, nos cuenta en primera persona su vida (ella es una hetera) y la Atenas de su tiempo en plena guerra del Peloponeso contra Esparta. La condición de las mujeres en Atenas, recluidas en sus gineceos, era de subordinación y exclusión de la condición de ciudadanas por mucho que sus progenitores fueran ciudadanos libres. No es el caso de Timandra que hereda su condición de hetera de su madre que también lo era, pese a ello estamos ante mujeres cultas y, sobre todo, mucho más libres que el resto de las mujeres. La vemos moverse con filósofos como Sócrates, héroes militares como Alcibíades (su gran amor) y otros personajes de la época en salones, bebiendo vino como ellos y con total libertad de movimientos.

Sé que a muchas lectoras de IG les ha encantado esta novela. Por mi parte, me parece una novela de cierto interés, pero desigual, que empieza con cierta torpeza y gana con el paso de las páginas.

miércoles, 28 de septiembre de 2022

Fred Vargas, Un lugar incierto

 


Alguien me recomendó a esta autora cuyo nombre conocía, pero no había leído. Resultó que tenía un libro suyo en las interminables estanterías de libros pendientes y me puse manos a la obra. Pero no debí elegir buen momento porque no me atrajo la historia y no me cautivó su personaje principal, el comisario Adamsberg. Así que deambulé por la novela despistada hasta que su viaje a la Serbia rural logró captar mi atención. Una cuarta parte de la novela me ha gustado, un saldo corto que me deja bastante indecisa sobre leer algo más de Vargas.

Un comisario francés lento que no recuerda palabras hasta que llega a Serbia, pies cercenados que aparecen frente al cementerio londinense de Highgate, un asesino que descuartiza y machaca literalmente a sus víctimas, leyendas y miedos ancestrales, vampiros… una historia complicada y enrevesada. Una parte final interesante que no sé si es suficiente.