miércoles, 29 de junio de 2011

BÉSAME...




¿Beso? Un truco encantado para dejar de hablar
cuando las palabras se tornan superfluas.


INGRID BERGMAN




Y una rosa de mi rosal...

lunes, 27 de junio de 2011

V DE VENDETTA



Es una adaptación al cine de la novela gráfica V for Vendetta, escrita por Alan Moore e ilustrada por David Lloyd. La película fue dirigida por el australiano James McTeigue y estrenada en 2006.

Por mi edad no soy lectora de cómics, lo fui, en la infancia y preadolescencia, de tebeos, algo que suena mucho más provinciano y cutre. No abomino de mis tebeos, aprendí, disfruté y me entretuve mucho con ellos e hicieron de puente para pasar a la literatura ya en la adolescencia.

Por tanto, no conocía este cómic, publicado entre 1982-1985, y creado por su autor como respuesta al tatcherismo británico de comienzos de la década de 1980 y con el fin de mostrar un conflicto entre un estado fascista y el anarquismo. En la versión cinematográfica la historia ha sido cambiada por los hermanos Wachowski, que no mencionan, sospechosamente para nada, al anarquismo.

Como no podía ser de otro modo ha sido un adolescente de 16 años, que me conoce bastante bien, quien me ha insistido hasta la saciedad en que viera esta película que, acertadamente, pensó que me encantaría.

No haré un análisis de cinéfila, porque desgraciadamente no lo soy (eso se lo dejo, y ya les lanzo el guante, a V… de vendetta???, troyana y David) , sino de peliculera de tres al cuarto.

El origen de la trama es la conspiración de la pólvora, ocurrida en 1605 y en la que un grupo de católicos fueron detenidos y ejecutados por intentar destruir el Parlamento del Reino Unido con el objetivo de matar al rey Jacobo I y acabar así con las persecuciones religiosas. No me quedó claro este origen (como es al principio de la película debía estar despistada) y tuve que buscar qué pasó en esa fecha de referencia.

Estamos ante una DISTOPÍA, concepto que ya comenté en otra entrada, es decir, una antiutopía, o utopía perversa donde la realidad transcurre en términos opuestos a los de una sociedad ideal.

Uve, no viene de la letra sino del número 5 escrito en números romanos, por cierto, un número simbólico en la masonería y que representa al ser humano, ¿sabe esto Alan Moore?......... Cómo se dice en la película, no hay casualidades.

La máscara de Guy Fawkes que lleva V, la vi por primera vez en las manifestaciones del 15 M y luego me llevaron a Anonimus, hackers que atacan webs del Estado o del poder financiero, sindical, etc. Guy Fawkes (York, Inglaterra; 13 de abril de 1570 - Londres; 31 de enero de 1606), también conocido como Guido Fawkes, fue un conspirador católico inglés, hijo de un notario de York, que sirvió en el Ejército Español de los Países Bajos. Perteneció a un grupo del Restauracionismo Católico de Inglaterra que planeó la Conspiración de la pólvora. Arrestado el 5 de noviembre de 1605, declaró que quería volar el Parlamento para acabar con las persecuciones religiosas. Desde entonces, el 5 de noviembre, se rememora en Inglaterra la "Noche de Guy Fawkes" (o Bonfire night, La noche de las hogueras) donde se simula que se quema en la hoguera a Guy Fawkes.

No me extraña que haya manifestantes del 15 M que lleven esa careta. El trasfondo de la película es la lucha contra un poder totalitario que se ha configurado como tal por la despreocupación y el miedo de la mayoría. Pero también el despertar de un anónimo que grita a los ciudadanos comunes para rebelarse contra la manipulación, la corrupción, la falta de libertades...

En fin, me ha gustado la película...





viernes, 24 de junio de 2011

BETTY SMITH, Un árbol crece en Brooklyn.








Esta novela la compré en edición de bolsillo hace unos meses, no recuerdo los motivos, quizás leí alguna referencia (si es así, lo he olvidado) o quizás me gustó el título y la portada en la que una niña, vestida de blanco, se mira en el espejo, sentada sobre un taburete demasiado pequeño para ella… ¿está despidiéndose de su infancia?

La novela tiene 504 páginas y su título se desvela, en parte, en la primera página del libro:

“Ya entrada la tarde, el sol declinaba sobre el patio en penumbra de la casa de Francie Nolan y sus rayos calentaban la madera roída de la verja. El único árbol que había allí no era un pino, ni un abeto. Sus hojas lanceoladas se extendían por las varitas verdes que irradiaban del tronco como si fueran sombrillas abiertas. Algunos lo llamaban el árbol del cielo, pues allí donde caía su semilla crecía otro que luchaba por llegar arriba. Lo mismo florecía entre cercas que entre escombros; era el único árbol que podía brotar de las grietas del cemento. Se esparcía frondoso, pero únicamente en las barriadas populares” (p. 11).

Queda definitivamente claro en la última página:

“Habían cortado el árbol cuyas hojas como sombrillas se enroscaban por encima y por debajo de la escalera de incendios porque las mujeres se quejaban de que la ropa que colgaban a secar se enredaba en las ramas. El propietario del edificio había enviado a dos hombres para que lo derribasen a hachazos.
Pero el árbol no había muerto: subsistía aún…
Un nuevo árbol había nacido del tocón que habían dejado y su tronco se había arrastrado por el suelo hasta llegar a un lugar donde no había cuerdas para colgar ropa. Luego había crecido hacia arriba, buscando el cielo” (p. 504).
Ese árbol, como la familia de Francie Nolan que viven en Brooklyn, es pobre y sencillo y, pese a las dificultades, mira al cielo (que no a dios).





La autora, de nombre Lilian Elizabeth Wehner (1896-1972), nació en una familia humilde de emigrantes alemanes; estudió en la escuela de su barrio hasta los catorce años, poniéndose a trabajar en diversos oficios. Desde 1915 hasta 1917 estudió en la Girl´s High School. Se trasladó a Michigan, y ya madre, estudió Derecho en la Universidad de Michigan, al tiempo que tomaba clases de teatro, y comenzaba a escribir obras de teatro…; en cierta manera la historia de la protagonista de la novela.





Un árbol crece en Brooklyn (1943), fue un best-seller nada más ser publicado, se convirtió en musical unos años más tarde y el director Elia Kazan eligió su historia para su ópera prima (en España traducida como Lazos humanos). Y aunque, medio siglo después, son pocos los ecos que quedan de este éxito, escritores como Paul Auster la tienen entre sus volúmenes de cabecera.

La novela está dividida en cinco libros que en total relatan la infancia y adolescencia de una niña, Francie Nolan, hasta la edad de 17 años. La novela describe la dura vida de una familia de inmigrantes europeos en Williamsburg, suburbio de Brooklyn (Nueva York), en las dos primeras décadas del siglo XX.






Este barrio tiene gran protagonismo en la novela, en él “siempre había música, (…) en aquellos lejanos veranos se bailaba y cantaba en las calles de Brooklyn. Aunque los días podían parecer alegres había algo triste en aquellas tardes estivales, en aquellos chicos de cuerpo flaco (…), que rondaban cantando con voz monótona y taciturna” (p. 123). La novela no llega a caer nunca en el melodramatismo por dos razones, la primera por la encendida defensa que la familia Nolan hace del orgullo y la dignidad de los trabajadores que no admitían vivir de la beneficencia. Para afrontar la dureza de la vida es vital la imaginación, como decía la abuela de Francie:

“(…) la niña tiene que poseer algo muy valioso que se llama imaginación. Necesita crearse un mundo de fantasía todo suyo. Debe empezar por creer en las cosas que no son de este mundo; luego, cuando el mundo se haga demasiado duro para soportarlo, podrá refugiarse en su imaginación” (p. 93).





Por eso cuando Francie Nolan aprende a leer, su alegría no tiene límites:

“¡Sabía leer! A partir de entonces el mundo se hizo suyo a través de la lectura. Nunca más se sentiría sola, nunca más añoraría la compañía de un amigo querido. Los libros se volvieron sus únicos aliados. Había uno para cada momento: los de poesía eran compañeros tranquilos, los de aventura eran bienvenidos cuando se aburría, y las biografías cuando deseaba conocer a alguien. Ya adolescente, llegarían las historias de amor” (p. 172).

En segundo lugar, por los momentos de humor que se intercalan y que protagonizan, sobre todo las tías de Francie, Sissy y Evy. Es una novela de mujeres, ellas son las protagonistas y las que sacan adelante a sus familias, a pesar de que las mujeres Rommely (la madre de Francie, Katie, y sus dos hermanas) “no pueden dormir sin un hombre”.



A pesar de la miseria y las penurias, la novela respira optimismo:

“La gente siempre cree que la felicidad es algo que se pierde en la distancia (…), una cosa complicada y difícil de conseguir. Sin embargo, ¡qué pequeñas son las cosas que contribuyen a ella! Un lugar para refugiarse cuando llueve, una taza de café fuerte cuando una está abatida, un cigarrillo que alegre a los hombres (ejem… es que estaba mal visto que fumaran las mujeres…), un libro para leer cuando una se encuentra sola, estar con alguien a quien se ama” (p. 469).

La esperanza en la educación y en el trabajo, para salir de la pobreza, hacía de esta novela un referente del llamado sueño americano. Pero, a la vez, reflejaba a la perfección la vida de miles de inmigrantes que sobrevivían a duras penas en la Nueva York de comienzos de siglo. Las clases trabajadores se sintieron plenamente identificadas con Un árbol crece en Brooklyn y, sobre todo, con las denuncias de abuso a que eran sometidas y la pobreza en la que subsistían.

RECOMENDACIÓN: me parece una hermosa novela de las que calienta el corazón, quizás algo sentimental, y con trasfondo social. Cuenta una hermosa historia familiar basada en la solidaridad y el cariño, sin grandes muestras de afecto, por la dureza de la vida… al igual que el árbol de los pobres que pese a las dificultades… mira hacia el cielo.

jueves, 23 de junio de 2011

¡¡FELIZ SOLSTICIO DE VERANO!!


El poniente implacable en esplendores
quebró a filo de espada las distancias.
Suave como un sauzal está la noche.
Rojos chisporrotean
los remolinos de las bruscas hogueras;
leña sacrificada
que se desangra en altas llamaradas,
bandera viva y ciega travesura.
La sombra es apacible como una lejanía;
hoy las calles recuerdan
que fueron campo un día.
Toda la santa noche la soledad rezando
su rosario de estrellas desparramadas.


JORGE LUIS BORGES, La noche de san juan

La Noche de San Juan es una festividad que suele ir ligada a encender hogueras o fuegos. Hay quien vincula esta fiesta con las celebraciones en laS que se festeja la llegada del solsticio de verano en el hemisferio norte, cuyo rito principal consiste en encender una hoguera. La finalidad de este rito era dar más fuerza al sol, que a partir de esos días, iba haciéndose más débil. El fuego también tenía una función purificadora en las personas que lo contemplaban.

¡¡¡FELIZ SOLSTICIO DE VERANO!!! SED BUEN@S... Y DISFRUTAD.


miércoles, 22 de junio de 2011

NOS DESPRECIAN CON MIEDO, NOS TEMEN CON SOBERBIA, NOS LLAMAN PERROFLAUTAS…



Nos desprecian, nos temen, nos miran con soberbia y miedo.

La libertad que emerje, el pensamiento que vuela, la gente corriente que habla, que mira y escucha.
El pueblo real que harto de ser mal representado, toma la palabra en las plazas y en las calles.





El poder político que mira al otro lado por miedo.
El poder económico que vaticina el desastre de los mercados.
Los medios de comunicación que acallan a unos y vocean a pocos.





No creen en lo que ven, se ponen las gafas oscuras y a todos nos transforman en perroflautas, nos llevan al margen, nos marginalizan, nos banalizan, nos invisivilizan... Pues quizás los invisibles seamos capaces de hacer lo imposible y del margen de los inadvertidos pueda llegar el viento fresco que les obligará a quitarse las gafas y vernos como somos: diversos, variados, múltiples y con pensamiento propio (incluso hay quien toca la flauta y lleva perro).

Iba tocando mi flauta
a lo largo de la orilla;
y la orilla era un reguero
de amarillas margaritas.

Juan Ramón Jiménez


viernes, 17 de junio de 2011

IMAGINAR QUE SEGUIMOS ANDANDO PESE A QUIEN PESE…



Dije hace pocos días, cuando planteaba que las acampadas del 15-M debían levantarse para adoptar otras formas, que la plaza podía seguir siendo virtual y que se tenía que combinar con momentos puntuales de encuentro, acciones colectivas y propuestas diversas.



El domingo 19 hay convocado uno de estos encuentros puntuales, una MANIFESTACIÓN para seguir mostrando nuestra INDIGNACIÓN en contra de los recortes sociales impuestos desde Europa a través del llamado Pacto del Euro. La crisis la ha creado el poder económico y financiero, no debemos sufrirla quienes vivimos de nuestro trabajo.

Estos días se está intentando desprestigiar al movimiento del 15-M desde instancias políticas refrendadas por los grandes medios de comunicación. El domingo tenemos que salir a la calle sin miedo y pacíficamente, demostrando que tenemos un patrimonio, que no es monetario, pero que es potente y poderoso: la inteligencia, la creatividad, la reflexión, el criterio propio, la solidaridad, la valentía, la libertad de pensamiento, la imaginación… y, porqué no, la alegría y la vitalidad.

MI IMAGINACIÓN LA ALIMENTA LA LITERATURA…

DANIEL GLATTAUER, Contra el viento del norte.
La novela se la compré a R. el día de San Jordi (en realidad la quería leer yo…, hmmm… qué no se entereeee). Me sedujo el estupendo comentario que hizo Guacimara en su blog Otherside’s soulmate.

La novela tiene 260 p. y el título de la novela desvela que, a la protagonista, Emmi, no le sienta bien el viento del Norte, sobre todo cuando duerme con la ventana abierta (p. 166).



Daniel Glattauer nació en Viena en 1960. Es periodista en el periódico austriaco Der Standard y aunque es autor de varias obras, su gran éxito es esta novela y su continuación, Cada siete olas.

Se trata de una novela escrita con el formato de los correos electrónicos, eso hace que sea tremendamente ágil y rápida de leer. Los protagonistas Emmi y Leo, se conocen en el mundo virtual por un error y comienza una relación epistolar que se convierte en una historia de seducción en la que “cada uno de nosotros es la voz de la fantasía del otro” (p. 95).

No me resulta desconocido lo que ocurre en la novela, se trata de una relación virtual en la que los dos protagonistas parten “de la línea de llegada, y sólo se puede seguir en una dirección: hacia atrás. Nos dirigimos a la gran desilusión. No podemos vivir lo que escribimos. No podemos reemplazar las numerosas imágenes que nos formamos el uno del otro. Será decepcionante que no estés a la altura de la Emmi que yo conozco. Y no lo estarás. Te sentirás deprimida si yo no estoy a la altura del Leo que tú conoces. Y no lo estaré.” (p. 191)

Qué estupenda reflexión sobre las relaciones virtuales, en las que las personas con las que entramos en contacto no son, muchas veces, tangibles y reales sino fantasías, “ilusión de dicha infinita de los sentimientos, éxtasis apartado de la realidad, una utopía de amor hecha de letras” (p. 214).

Se trata de una novela que te engancha desde la primera línea, es adictiva, no puedes dejar de leerla, todo un éxito que no sé qué recorrido puede tener, su calidad literaria es de una gran frescura pero no sé si es de gran calidad, eso sí, la historia es potente y sumamente atractiva, al igual que los dos personajes.

RECOMENDACIÓN: pues sí, la recomiendo porque una novela que no puedes dejar de leer y que te abstrae del mundo exterior y te lleva a otro mundo exterior, el virtual…, no puedo dejar de considerar que es interesante.


viernes, 10 de junio de 2011

STEFAN ZWEIG, Veinticuatro horas en la vida de una mujer.



Con mi cariño para Dona invisible que va Rere la pista de Stefan Zweig

El libro, como casi siempre, está en mi mesa y está acompañado con un lápiz (¿os había dicho que me encantan los lapiceros y que tengo unos cuantos?). Este libro ha llegado a mis manos de una manera extraña. Para San Jordi, en mi centro de trabajo, se hace un intercambio de libros. Las personas que quieren participar llevan un número de libros, ya leídos, que quieren intercambiar y les dan unos vales por el mismo número de libros de otras personas que se sitúan en una mesa. Tienes derecho a coger el mismo número de libros que tú has llevado. Cuando una de mis compañeras de trabajo llevaba sus libros me dijo si quería alguno de ellos y, entre todos, me llevé este. Yo no participo en ese intercambio (aunque me parece una idea estupenda) porque no me gusta desprenderme de mis libros, sí que intercambio libros con mis amistades, pero con retorno.

La novela es muy breve, tiene 102 páginas y se lee de un tirón si se dispone de unas horas (por ejemplo un viaje en tren). El título hace referencia a la posibilidad de que una mujer, en 24 horas, pueda trastocar totalmente su vida y seguir a un hombre, al que acaba de conocer, sin saber siquiera si es digno de su amor.



Stefan Zweig (Viena, Austria, 28 de noviembre de 1881 - Petrópolis, Brasil, 22 de febrero de 1942), fue hijo de una familia judía acomodada: su padre, Moritz Zweig, fue un acaudalado fabricante textil; y su madre, Ida Brettauer Zweig, hija de una familia de banqueros italianos. Estudió en la Universidad de Viena en la que obtuvo el título de doctor en filosofía. También realizó cursos sobre historia de la literatura, que le permitieron codearse con la vanguardia cultural vienesa de la época. Tras el aumento de la influencia nacional socialista en Austria en la década de los treinta del siglo XX, Zweig se trasladó un tiempo a Londres por sus dificultades para publicar en Alemania. En 1941 se trasladó a vivir a Brasil y en Petrópolis, junto a su segunda esposa, Charlotte Elisabeth Altmann, desesperados ante el futuro de Europa y su cultura, pues creían en verdad que el nazismo se extendería a todo el planeta, un 22 de febrero de 1942, se suicidaron. Zweig había escrito:

"Creo que es mejor finalizar en un buen momento y de pie una vida en la cual la labor intelectual significó el gozo más puro y la libertad personal el bien más preciado sobre la Tierra."

Su autobiografía El mundo de ayer, con publicación póstuma hacia 1944, es un panegírico a la cultura europea que consideraba para siempre perdida. Y un libro que me encanta y he releído un par de veces.

Esta novela merece la pena leerse por su estilo literario, que une una cuidadosa construcción psicológica de sus personajes, en este caso de Mrs. C., con una brillante técnica narrativa. Zweig, en esta narración, me sedujo inmediatamente con la posibilidad de que una mujer de la sociedad acomodada pudiera trastocar totalmente su vida por un amor que se desarrolla en unas pocas horas. La novela arranca describiendo cómo Madame Henriette, “aquella discreta Madame Bovary de tercer orden”, en unas pocas horas decide, con treinta y tres años y “respetada por todos, abandonar a su esposo y a sus hijas para seguir a un elegante joven desconocido” (p. 12). Este escándalo da pie a la confesión de una anciana, Mrs. C, que vivió un caso similar que condicionó toda su vida, “por un solo día de su existencia” (p. 25).

RECOMENDACIÓN: una deliciosa novela que explica una arrebatadora historia de amor. Me ha seducido y me ha encandilado.


miércoles, 8 de junio de 2011

BELLEZA FEMENINA…, ¡QUÉ COMPLICACIÓN!





Este era el canon de belleza femenino de MORPUGO, El costume de la donne, 1536



“Tres largas: pelo, manos y piernas.
Tres cortas: dientes, orejas y senos.
Tres anchas: frente, tórax y caderas.
Tres angostas: cintura, rodillas y donde pone la naturaleza todo lo dulce.
Tres grandes (pero bien proporcionadas): altura, brazos y muslos.
Tres finas: cejas, dedos, labios.
Tres redondas: cuello, brazos y...
Tres pequeñas: boca, mentón y pies.
Tres blancas: dientes, garganta y manos.
Tres rojas: mejillas, labios y pezones.
Tres negras: cejas, ojos y lo que vosotros ya sabéis.”


He ilustrado el post con Botero y Sorren

lunes, 6 de junio de 2011

AMOR ROMÁNTICO, ENAMORAMIENTO Y OTRAS CONSTRUCCIONES CULTURALES...



CORAL HERRERA GÓMEZ, La construcción sociocultural del amor romántico.

Este estudio sobre la pasión amorosa lo encargué por Internet. No recuerdo dónde encontré la referencia. Hace tiempo que pienso que tengo que anotar dónde encuentro la referencia de los libros que compro o quién me los recomienda, pero sigo confiando en la memoria y, a veces, me falla.

El estudio tiene 410 páginas y su título está relacionado con el contenido principal de este trabajo de investigación: analizar cómo se construye socioculturalmente el amor y cómo esta construcción influye significativamente en las estructuras económicas y políticas de la sociedad occidental.

Aunque buscaba un estudio más histórico que me ayudara a entender el amor de una pareja, del siglo XIX, que estoy investigando y, en ese sentido, no me ha servido demasiado, el estudio es muy interesante e innovador porque se centra en la dimensión cultural de las emociones humanas; en concreto, la del amor de pareja.
Sobre la autora, nada mejor que visitar su blog donde tiene un breve perfil y sus publicaciones.

El libro está dividido en tres bloques: La construcción social del amor, la construcción cultural del amor y el amor como utopía emocional de la posmodernidad.
No tengo la intención de hacer un resumen sobre la obra, que sería muy complicado por su extensión, sino introducir fragmentos sobre algunos aspectos que permitan hacerse una idea del contenido del libro.



Amor romántico:

“El amor romántico es, en realidad, un juego de estrategias, unas luchas de poder en las que se entienden las relaciones en términos de triunfo y derrota. También es una idealización en torno a las relaciones eróticas y afectivas, por eso quizás provoca tantas ilusiones, frustraciones y sufrimiento” (p. 79).

Enamoramiento:

“… es un estado emocional de carácter romántico o pasional que vivimos y por el que todo nuestro organismo, nuestra mente y nuestro cuerpo se ve arrasado por una tormenta química basada en el deseo, el miedo, la atracción, el erotismo y los sentimientos intensos hacia otra (s) persona (s). En esta fase es cuando experimentamos la magia que caracteriza al amor: es el momento en que sentimos una pérdida de la voluntad, del libre albedrío, de la racionalidad y la capacidad para distinguir realidad y anhelos individuales” (p. 80).



Representaciones amorosas.

“… son construcciones culturales, y todas ellas están insertas en procesos narrativos en forma de mitos, leyendas, fábulas, cuentos, refranes, etc”.
“…el análisis de la estructura de estas historias que conforman el entorno en que vivimos, y por medio de las cuales se desarrolla gran parte de nuestra vida social, es una de las formas en que podemos denunciar las falsas verdades dadas por supuesto en el orden patriarcal” (p. 307).

Mito de la superwoman:

“… configura un modelo de mujeres que han asumido valores de la revolución feminista, que han estudiado y han logrado insertarse en el mercado de trabajo y en las instituciones públicas. Son mujeres altamente cualificadas y sobradamente preparadas que alcanzan un estatus socioeconómico importante; hablan idiomas, han viajado, han tenido relaciones sexuales y sentimentales previas al matrimonio, y se han sentido autónomas e independientes. Después, paradójicamente, se han casado y han adoptado dos estilos de vida contradictorios entre sí: el estilo individualista posmoderno, por el cual su vida gira en torno al trabajo y su ascensión en la jerarquía empresarial, y por otro lado el estilo burgués de familia feliz, de tipo nuclear.



Las superwoman se divorcian, pero vuelven a casarse y siempre mantienen la estructura familiar, en el que los hombres se alternan y los hijos tienen hermanos que se alternan. La mujer super, en cualquier caso, es la cabeza de familia, porque se encarga de las tareas domésticas (…), la organización y administración de recursos, la psicología y las emociones de sus hijos e hijas. (…)



El gran problema de la superwoman es el cansancio, y la falta de tiempo para desarrollar su carrera laboral y brillar en ella, para ser buena cocinera, buena planchadora, buena ama de casa, psicóloga, enfermera, mediadora (…). El mito de la superwoman incluye otros mitos: el de la madre perfecta, la esposa perfecta, la amiga, hija y nieta perfecta. La superwoman ha de estar bella, luchar contra los estragos de la edad, demostrar su competencia profesional y dedicar gran parte de su tiempo a sus hijos e hijas; pero le resulta imposible. Otra profunda contradicción que anida en su ser tiene que ver con su propia independencia. Si bien es cierto que la mujer posmoderna es independiente económicamente, a nivel emocional aún no ha acabado por liberarse del todo de la admiración hacia el poder masculino” (pp. 254-356).

En CONCLUSIÓN, como se señala en la contraportada, las emociones están mediadas culturalmente y predeterminadas por los mitos, los relatos, los estereotipos y tabúes que las han devaluado durante siglos a la categoría de sentimientos irracionales no susceptibles de ser investigados con rigor académico. La autora busca desvelar la mitificación del romanticismo patriarcal, las utopías emocionales de la posmodernidad, y la existencia de ciertas ideas etiquetadas como normales o naturales, concebidas por nuestra cultura para perpetuar las estructuras sentimentales tradicionales y legitimar la organización económica y política de la sociedad occidental.
Un estudio interesante y muy recomendable.

viernes, 3 de junio de 2011

JOHAN THEORIN, La hora de las sombras.



El libro es mío, lo tenía en la “sala de espera” (o sea entre las lecturas pendientes) y el comentario de Golem, en su blog Memorias de lectura , me hizo recordar que tenía un libro de este autor. Os pongo también el enlace con el comentario que hizo Golem de La hora de las sombras. La novela tiene 403 páginas y su título lo explica el propio autor:

“La hora de las sombras es el localismo con el que antiguamente se referían al crepúsculo en Öland y Smaland. “Sentarse a la hora de las sombras” significa sentarse a contar historias al caer la noche” (p. 413).
En la edición del Círculo de Lectores existe La hora de las sombras en imágenes con comentarios de Johan Theorin (pp. 407-413).






Johan Theorin nació en Gotemburgo en 1963, compagina su trabajo como periodista, en diversos medios de Suecia, con su actividad como novelista.
Theorin pasaba los veranos en Öland, un islote del Báltico del que procede su familia y cuyo folclore y leyendas conoce muy bien, y quiso ambientar allí El cuarteto de Öland, la tetralogía iniciada en 2007 con la novela que es objeto de comentario en esta entrada. Con esta novela ganó el premio a la Mejor Novela Negra que anualmente concede la Asociación de Escritores Suecos de Novela Negra.

La novela se inicia con la desaparición del pequeño Jens Davidsson un día de niebla en la isla de Öland. Su abuelo Gerlof, muchos años después, empieza a investigar su desaparición y se lo dice a su hija Julia, madre del pequeño Jens, que atormentada por la desaparición de su hijo no había hecho sino hundirse en la depresión y el alcohol. Julia viaja a Öland y, a partir de este punto inicial, arranca toda la trama.

No es una novela policiaca porque no hay investigación policial, aunque hay un policía. Quien realiza la investigación es el viejo Gerlof , capitán de barco retirado, que vive en una residencia de ancianos por su precaria salud. Sí que estamos ante una novela negra de calidad, hay intriga en torno a la desaparición de Jens y hay un transfondo social que relata las formas de vida, y su evolución, en una pequeña isla sueca entre los años cuarenta y setenta del siglo XX. El inicio de la novela es lento, se van desgranando numerosas pistas y datos que, conforme avanza la novela, van encajando e incrementando la tensión y la intriga.

La novela describe el paisaje de la isla de Öland y hay constantes referencias al lapiaz, extensas praderas de hierba alta en las que es muy fácil desorientarse y perderse, o esconderse. No he encontrado ninguna imagen del lapiaz ölandes y mi imaginación me dice que se parece a esta imagen de un lapiaz irlandés.


RECOMENDACIÓN: un autor y una novela recomendable, es diferente a la mayoría de las novelas negras nórdicas que he leído y, por tanto, en cuanto tenga ocasión leeré la siguiente, La tormenta de nieve.

La fotografía del autor y del lapiaz están tomadas de google.

jueves, 2 de junio de 2011

HADAS...



SÍLFIDES, hadas de los vientos.

La sílfide es una criatura mitológica fabulosa de la tradición occidental. Este término tiene su origen en la obra de Paracelso, quien las describía como seres invisibles del aire, sus elementales del aire.

Según la cultura popular las sílfides son seres gigantescos que se montan en las nubes y las mueven con el batir de sus alas, según la misma mitología estos seres despiden una luz de color rojo o naranja desde sus alas y esta es la razón por la que los cielos se enrojecen al atardecer después de un día lluvioso.




También se dice que, al reunirse más de 100 sílfides en el mar, el batir de sus alas crea remolinos que al final terminan convirtiéndose en grandes huracanes, y no se pueden separar de ese grupo hasta que toquen tierra o pasen una o dos semanas.

Debido a su asociación con el ballet La Sílfide, donde las sílfides son identificadas con hadas y leyendas medievales sobre el país de éstas, así como a una confusión con otros espíritus del aire (por ejemplo, en El sueño de una noche de verano de Shakespeare), el término sílfide puede usarse para aludir a una muchacha esbelta y bella.

Con tal vehemencia el viento
viene del mar, que sus sones
elementales contagian
el silencio de la noche.


LUIS CERNUDA, El viento y el alma (fragmento).

Ilustraciones encontradas en google

miércoles, 1 de junio de 2011

UN AÑO MÁS...



Poco importa
poco amor o poca vida
no es tan malo.

Lo que cuenta
es observar las paredes.
Yo nací para eso.
Nací para robar rosas de las avenidas de la muerte.

CHARLES BUKOWSKY



A veces, la vida se me hace una carga pesada y el viaje a "Itaca", una travesía en el desierto. En esos momentos sé que debo refugiarme en pequeñas e insignificantes emociones...
Pues nada, que hoy hago una año más...