sábado, 10 de julio de 2010

Alma sin fronteras...

Como siempre y especialmente hoy, desde Cataluña, proclamo a los mundos virtuales que yo soy una de aquellas, un alma sin fronteras.
Que las patrias, las banderas, las fronteras, solo dividen, enfrentan y provocan guerras donde mueren millones de personas... Como dijo el poeta, cuando alguien mata a una persona es un asesino, cuando mata a millones, es un patriota.

“Las patrias te llamaron con todas sus banderas” y yo no responderé a ninguna porqué todas defiende por igual los mismos ritos, símbolos y valores excluyentes. Todas se reafirman unas a otras a costa de las de más allá y cuando la coyuntura les favorece producen guerras como la guerra civil española, todavía por superar; la locura nacionalista-nazi, y tantas otras que han sembrado de sangre el mundo.
Por eso soy U-Topía... porqué confío en valores universales de justicia y libertad. Por eso sigo leyendo poemas como el de Miguel Hernandez que me sirven de entrada a esta reflexión.
¿Qué pensaban los que aplaudían el jueves a Serrat en el Teatre Grec cuando cantaba este poema y hoy salen tras la bandera de la patria a la que nos llama el poder político y mediático con todas... sus banderas?
¿Cómo no ha existido esa unanimidad para defender la educación, que por decisión del poder político, que enarbola las banderas hoy, es solo del 3,3 del PIB, cuando en el resto de España es del 4,4, y en la UE del 5?
¿Cómo no ha existido esa unanimidad para llamar a la “nación” a manifestarse en contra del paro, de la reducción de salarios, de pensiones...?
¿Cómo no nos llaman a manifestarnos para exigir que paguen más las 1.440 personas que controlan el 80% del PIB español o que se den medios a los inspectores fiscales para rescatar los 100.000 millones de euros de fraude fiscal que podrían recuperar en cuatro años?

Por eso no desfilaré detrás de ninguna bandera... porque soy una de aquellas personas que tiene un alma sin fronteras... y que no ve clara la razón para ponerme detrás de una bandera.

9 comentarios:

  1. Tienes toda la razón, Laura, y el valor necesario para escribirlo desde donde escribes.
    Por desgracia, estas "banderas" no son más que un símbolo económico. Ya no esconden ninguna reclamación cultural, ni exigen mejoras, ni libertades.
    Jamás me gustaron los nacionalismos, ni de un lado ni de otro. Ser diferentes no nos hace mejores ni peores, sino diferentes. Y lo que debería enriquecer sólo sirve para enfrentarnos.
    Una lástima.

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  2. De acuerdo contigo, creo que como historiadores conocemos el origen del catalanismo. Un invento burgués y bastante moderado por cierto. A finales del siglo XIX todo era muy claro... luego todo se ha enmarañado y la izquierda ha asumido este planteamiento tan conservador (al fin y al cabo viene del nacionalismo germánico ultra conservador y esencialista).

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  3. Los nacionalismos son en esencia burgueses, al menos casi todos los nacidos en el XIX. En España tenemos los casos del catalán y el vasco (al gallego le veo más cultural... los pobres no tenían una burguesía tan pudiente), nacidos en el seno de un fortalecimiento económico y la defensa de sus intereses.
    Es curioso -y preocupante- ver cómo la izquierda (que es mi tendencia política) ha ido asimilando esta postura. Parece que ser de izquierdas ya te obliga, en regiones donde existe un fuerte nacionalismo, a ser nacionalista sí o sí. Y pecan de ingenuos quienes, desde la izquierda, se convierten en el ala más radical del nacionalismo sin saber que le están haciendo el juego a la burguesía.
    Lo que me asombra más es que no haya historiadores capaces de incidir en estos asuntos, como si se tratara de un tema tabú.
    (Y ojo, que ésta no es mi especialidad y lo mismo derrapo bastante).

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  4. Tampoco es mi especialidad aunque sí mi época (me muevo entre la 2ª mitad del XIX y los años veinte del XX). El poder político y universitario aquí favorece la tendencia complaciente con el nacionalismo a través de las ayudas, becas y otras prebendas económicas. Además de que es un tabú salirse del camino marcado... enseguida te llaman españolista (o como me dijo un compañero de trabajo "criptoespañolista").El ámbito del poder hoy es nacionalista (otra cosa es el ámbito popular) y la izquierda (que también es mi tendencia política) entregada a esta ideología que confunde las cosas bajo la denominación común de nación. El origen de este hecho procede del franquismo cuando la oposición asumió la defensa de los estatuos de autonomía como un elemento del antifranquismo. Luego la izquierda, como en tantos otros aspectos, no ha sabido generar ideas y visiones propias y ha practicado seguidismo de aquello que consideraba que le podía proporcionar votos. Creoooo ehhh..., es lo que yo observo.
    Cuando nace el catalanismo en Cataluña es tan conservador que hizo de lado la propuesta republicana y de base social de Valentí Almirall (republicana y federal) por considerarla demasiado radical. Pero el movimiento obrero, mayoritariamente anarcosindicalista, siempre apreció y despreció esta corriente por burguesa. Cierto que el primer partido catalanista, la LLiga Regionalista, pronto se dio cuenta de la necesidad de apoyo popular y como no funcionaba la creación de un frente interclasista por su negativa a hacer concesiones sociales, buscó otro camino. Esta vía fue la de generar un universo ideológico de contenido sentimental presentado como esencialmente tradicional, y a ello se dedicó Prat de la Riba en su obra "La nacionalitat catalana" (1906). En fin... lo que hoy está tan generalizado y es tan casposo: la nación es una comunidad NATURAL definida a partir de una concepción tradicional y esencial identificada con el orden social imperante... un ESPÍRITU COLECTIVO (el som com som (somos como somos?????) de la mani) que ha creado una idiosincracia (?) definida por la lengua, cultura, arte, derecho, etc comunes y perseguidos... etc etc...
    Seguimos...

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  5. Jajaja... encima de largo me había sacado el comentario por triplicado... cachissss

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  6. Amén a todo lo dicho (de parte de alguien a quien llamarían "criptoespañolista").

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  7. Todo aquel que no les encaja en sus moldes estrechos... es españolista o criptoespañolista... así que ahí estamos multitud.

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  8. Yo soy uno de aquéllos, y hoy quiero
    decir que estoy dispuesto a perder
    identificación para ganar
    identidad, mejor: identidades.

    Un abrazo de un hijo de la Máter
    Terra, Tierra, y Gaia y Gea...

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  9. Enric, muy adecuado tu comentario en el día de hoy... pues que seamos dos... que pases buen día.
    Petons

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