Desgraciadamente los buenos deseos de paz y felicidad navideños duran poco y, con “infinita tristeza”, como canta Manu Chao, tenemos que hablar de sangre derramada de los débiles en Siria (y otros muchos lugares del mundo).
Una de las transformaciones que se puso en marcha en el concluido 2011 afecta a los países árabes. La llamada primavera árabe provocó una cadena de convulsiones que no ha terminado todavía y que se enfrenta a graves dificultades políticas y socioeconómicas.
La pasión y convicción con que miles de personas luchan por su dignidad y por cambios políticos hacia sistemas más participativos, que puedan resolver las duras condiciones de miseria en que vive la mayoría de la población, permiten pensar en que pueden producirse transformaciones favorables para la mayoría.
Nada será fácil, las dificultades vienen por la resistencia de los viejos sistemas dictatoriales que han provocado, incluso, guerras civiles (Libia), pero también por las dificultades de construir sistemas democráticos alternativos que no estén amenazados por los militares (Egipto) o por nuevas dictaduras de corte religioso y de clanes.
Ahora está de plena actualidad la situación de Siria. Las protestas comenzaron en marzo en una pequeña ciudad (Daraa) y se fueron extendiendo hasta causar 5.000 muertos según la ONU. El régimen de Bachar el Asad es fuerte y la oposición, fragmentada, no parece tener empuje suficiente como para acabar con el dictador, sin contar con que el problema religioso puede estar presente de forma significativa.
El régimen, teóricamente laico, se apoya en la práctica en una élite militar y burocrática perteneciente a la minoría alauí, una secta chiita. La revuelta está protagonizada mayoritariamente por suníes y ya se han cometido asesinatos sectarios entre suníes y chiíes.
La violencia se enseñorea del país como pasó en Libia, el dictador no permite la entrada de prensa extranjera en el país y la sangre de los débiles continua corriendo a día de hoy (escribo el 31 de diciembre)…….
Sangre: no sangres más.
¡Como decirte que no sangres, sangre!
¿Nunca ha cesado de correr la sangre?
Contemplad el pasado
__esos graffiti obscenos:
la huella de una mano ensangrentada
en el muro sombrío de la Historia.
Y el presente:
más sangre,
otra vez sangre.
(…)
Para que deje de correr sangre
¿hará falta más sangre?
Tiempo largo, sangriento:
derrama
la última gota de tu sangre, pronto.
No hay tiempo que llorar.
Cuando no sangre más así la sangre,
ese día, por fin, será el futuro.
ÁNGEL GONZÁLEZ, Otra vez.
Las ilustraciones están tomadas de google. El poema de Ángel González estaba dedicado al Chile de Salvador Allende, es la parte que he cortado.
Espero que la valentía que muestran estas mujeres y hombres saliendo a la calle a manifestarse, pese a que les responden con armas, tenga una recompensa y la dictadura caiga. Espero que logren un sistema de mayor dignidad individual y social, más justicia social y libertad.... ¿Ya estoy soñando? Espero que no.
ResponderEliminarUn abrazo y siento aguaros el espíritu navideño.
Ojalá no sea un sueño, pero difícil va a ser, pero aún así debemos seguir luchando cada uno desde su campo.
ResponderEliminarEl poema es desgarrador ¿Llegará ese futuro sin sangre?
Un abrazo, comprometida y erudita mujer.
Mercedes.
Los cambios se hacen así, desgraciadamente... y tiene que haber sangre para que las cosas se empiecen a transformar...
ResponderEliminarBesicos
Yo también espero Laura, que la situación cambie definitivamente; espero que esas muertes que se han producido sirvan al menos para algo, aunque es triste que tenga que morir gente para conseguir dignidad.
ResponderEliminarUn beso
Laura, buena entrada, buen poema, y una gran canción de un paria de la música en España. Soy muy pesimista, después de lo que se ve, que estos movimientos del pueblo tengan éxito, el poder, sobre todo el económico no lo permite.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo.
Ojalá esas muertes, al menos sirvan para que se alcance, la paz y la libertad se consigan y sin mas sangre derramada, ya es demasiada. Es triste que haya que perder vidas para ganar derechos, qué triste.
ResponderEliminarOjalá tus deseos se hagan realidad, hay que luchar por ellos Laura, sino nada tendrá sentido.
Un abrazo solidario
Hay que ser un dictador repugnante para asesinar a tu propio pueblo.
ResponderEliminarOjalá pague por todo el mal causado.
Besos.
Ay!!! pero ay de los ayes Lura Uve hablarle de sangre a un latinoamericano que ha leído su historia tratando de ser lo más imparcial posible...pero la sombra y la huella de la cruz, de la biblia y de la espada imposible apartarla de Africa y de toda América...
ResponderEliminarPrecisamente esto es lo que me hace antimperialista y no crea ni un ápice de buenas a primeras en revoluciones apoyadas por buques de guerra usamericanos mandados por las élites neocons y republicanas del PENTAGONO y seguidas y respaldadas por la aviación y mercenarios y paramilitares de la OTAN que en menos de 8 meses son capaces de matar y masacrar a sangre fría y a plena luz del día más de 100 mil personas y desplazar a más de un millón de sus terras, aduciendo lo que ahora mismo alegan, libertad y derechos humanos cuando lo que de verdad quieren es petróleo, negocio de armas y narcóticos, posicionamiento militar geoestratégico y saqueo de todos los recursos naturales al menor costo. Tampoco creo un ápice de las matrices de desinformación de su maquinaria de prensa convertida claramente en propaganda de guerra y de mentiras.
Con esto no niego ni justifico lo de los dictadores y que todos los pueblos del mundo merecen elevar su bienestar de vida y de libertades, pero los menos indicados para regir y dirimir estos conflictos son precisamente quienes han hecho y hacen escuela de dictadores y son campeones en violar los derechos humanos y las libertades ciudadanas donde se les antoje y les convenga.
Conmigo no cuenten para sellar una nueva masacre y otro holocausto más.
Esto es triste, pero si H. Clinton es capaz de soltar una sonora carcajada luego de ver la masacre y linchamiento de Gadafi y Obama premio Nobel de la Paz con todo cinismo dice que NO se extasíen con las imágenes de ese linchamiento (NO se imaginen un elefante blanco) porqué yo no voy a seguir mi fiesta, no alegrándome por el asesinato de nadie, sino alegrándome en la lucha para que acciones de tanto asco ojalá algún día sean solo historia.
Mi fiesta sigue...
Un abrazo Laura Uve!!!
Estas revoluciones tienen difícil final feliz. Tengo una amiga en Marruecos que me dice que ahora en Egipto están mucho peor que antes de la revolución. África es un país muy complejo además de por la pobreza por las radicales tendencias religiosas de parte de sus habitantes y todo ello es difícil de cambiar y lograr algo mejor. Ojalá tus deseos sean algo más que deseos. Ya sabes que en estos casos yo siempre soy pesimista. Un abrazo, Laura.
ResponderEliminarSiempre me conmueve mi admirado y por desgracia desaparecido Angel González.
ResponderEliminarEl acceso a las libertades y a la dignidad cuesta y seguirá costando mucha sangre. Además, las revoluciones se complican en cuanto entran a formar parte de ellas elementos religiosos.
ResponderEliminarYo también soy pesimista pero no hay que dejar de soñar y "empujar para que pueda ser", como decía nuestro querido J.A. Labordeta.
Bssss
Ojalá consigan algo!!
ResponderEliminarMe ha encantado la relación que has hecho con el poema de Ángel González; no lo conocía.
Abrazo!
Duele mucho leer estas noticias que parecen pan de cada día, Laura. Por un lado siento una pena infinita pero también un orgullo tremendo por el coraje que están mostrando estas personas tan valiosas al salir y decir "Ya no más"; espero que pronto puedan encontrar la recompensa que merecen.
ResponderEliminarUn abrazo.
Tanta valentía y sacrificios deberían poder servir para un ahora de dignidad, pero... Quiero y necesito seguir creyendo que es posible, el precio está siendo muy alto.
ResponderEliminarÁngel González, siempre.
Besitos
La historia se repite... :(
ResponderEliminarSólo esperemos que se consiga algo.
Cuando la gente se arriesga a perder más rápidamente la vida que ya tenía perdida... es por eso, porque ya no pueden perder nada más... Pero, tal vez sí, sacrificarse y pelear, cual "David contra Goliat", para que sus hijos puedan un día disfrutar de mayores y mejores posibilidades, libertades... ¡Ojalá estas muertes y ese sufrimiento no sean en vano!
Un abrazo solidario.
Adecuado el poema y adecuada la canción... :)
Te leo "Utopi".
Es cierto: ellos sí que se juegan mucho para que la sangre no sangre más. Me ha gustado mucho el poema que has compartido: "Para que deje de correr sangre
ResponderEliminar¿hará falta más sangre?"
Me llama la atención el contenido religioso de muchos de estos conflictos: en nombre de Dios se cometen tantos crímenes.
Nuestro apoyo para el pueblo sirio!
Petonssssss
Caerán, de eso no hay duda. Los tiempos están maduros en muchos sentidos, no sólo político. El problema son todas esas almas que lo harán posible, pero que ya no podrán verlo... Besos.
ResponderEliminarEmilio Manuel, adoro a Manu Chao desde hace años....... desde Mano Negra. El nombre es toda una declaración de principios: la Mano Negra era una presunta organización anarquista secreta que actuó en Andalucía a finales del siglo XIX a la que se le atribuyeron asesinatos, incendios de cosechas y edificios....
ResponderEliminarLo más pesimista es la mansedumbre, han despertado y luchan..... sólo eso es positivo.
Un abrazo!!
Ningún dictador tendría por qué decidir el destino de un pueblo.Hay que soñar,pero también luchar por lo soñamos.
ResponderEliminarHermoso poema y qué grande siempre Manu Chau!!!!!!
bsts
perdón.....quise decir Manu Chao,que no sé cúantas lenguas mezcla en sus canciones!!!!
ResponderEliminarMe parece siempre bueno preocuparse por mejorar el mundo de alguna forma, si se puede ayudar bienvenido sea, y quien lo haga me parece elogiable. Incluso las ideas apoyan. Esperemos que esos países en conflicto liberándose de la distadura puedan salir adelante y no terminen engullidos por otros países o aplastados por la falta de orden o las carencias económicas, sino que de verdad se puedan volver independientes, libres y solventes. Manu Chao no me gusta mucho pero la canción está simpática. Besos.
ResponderEliminarNo más sangre, no más!
ResponderEliminarQuerida Laura gracias por ser y estar, por tu amistad y cercanía, quise enviarte un correo, pero no encontré tu dirección.
Todo lo mejor para éste 2012 y que nos encuentre unidos en éste compartir sentires.
Mil besos.
Soy bastante pesimista con esta primavera. Siria merece otro desenlace, sin lugar a dudas.
ResponderEliminarAl tiempo.
Besos, Laura.
Espero que esa lucha de frutos. Y si, debemos de pararnos mas a pensar en estos desastres a pesar y en vez de la inconsciencia navideña. Un abrazo.
ResponderEliminarJa ja ja Laura Uve te dejo este enlace perteneciente a uno de los programas en un canal de televisión chileno que acostumbro a ver con regularidad, es humorístico y a veces entre bromas tocan el tema político, creo que este puede aportar a la discusión a nivel panorámico en la situación del medio oriente, donde lamentablemente las posiciones geoestratégicas de las potencias militares y económicas del mundo por el interés del petróleo comprimen los derechos de muchos pueblos y países de la región: SALFATE .
ResponderEliminarEsta es una opinión más sobre el tema que vale considerar.
Y es que este dichoso mundo, sigue sangrando...
ResponderEliminarSaludos y un abrazo.
¡¡La libertad cuesta sangre de los pobres, de los que prefieren morir de pie a...!! Espero que la ONU sirva para algo más que para llenar buches de politicos de tres al cuarto... Me gustó la poesía por el desgarro que conlleva... Bss amiga... Muchos...
ResponderEliminarTiene que caer. Cuando alguien tiene razón y se juega su vida, sabiendo que posiblemente la perderá, la historia tiene que acabar bien. Lo que passa en este país es vergonzoso. Me ha gustado tu post-denúncia. Un beso.
ResponderEliminarYa no tienen miedo de expresar sus ideas, han comprendido que unidos pueden conseguir que sus vidas cambien y no están dispuestos a volver atrás, aunque saben que se juegan la vida cada vez que salen a reclamar sus derechos.
ResponderEliminarPor eso me cuesta entender que aquí y ahora, que sabemos que nadie nos va a disparar, seamos tan conformistas y pasivos y nos limitemos a hacer una manifestación de vez en cuando, para que no se diga, mientras nos van recortando los derechos que tanto nos costó conseguir y nos tratan como a párvulos.
Espero y deseo que tanto sirios como egipcios consigan más libertad, justicia y que se respeten los derechos humanos, y también que nos contagien su valentía y dignidad.
Un beso, Laura.
la primavera árabe nos demuestra que ellos también quieren lo que queremos todos, comer, trabajar, derechos y libertades.
ResponderEliminarpero no les dejan, ni tiranos, sátrapas, militares o líderes religiosos.
y a Occidente siempre le viene bien un buen enemigo.
un poco intenso el primer comentario que te dejo, Saludos.
Mercedes, Belén, Nuria y Emilio Manuel...
ResponderEliminarParece que compartimos la admiración por estas personas que salen a la calle a luchar con las manos vacías, el pesimismo por las dificultades que entrañan los cambios y, pese a ello, los buenos deseos de que ese cambio sea posible.
Un abrazo grande!!
Rose, este poema está inspirado en la sangre derramada por otro dictador, Pinochet, en Chile... Qué poco cambia la actitud de los dictadores para evitar la libertad...
ResponderEliminarToro Salvaje, ¿no crees que la idiosincrasia de las dictaduras es esa?
David Amoros, es verdad, complejidad, influencia religiosa, pobreza....... mucha adversidad para ser optimista. Pese a ello siempre soy optimista en las posibilidades de la rebelión.
Un abrazo grande!!
Aristos, estoy de acuerdo contigo. No creo ni confío en las intervenciones norteamericanas ni europeas (OTAN) en los países que luchan para librarse de las dictaduras. Nunca es una ayuda gratuita.
ResponderEliminarNo confío en la información de medios de comunicación que adulteran y manipulan la realidad en benefició de quienes los sostienen (fuerzas económicas y políticas poderosas).
Solo confío en la lucha colectiva e individual de las personas. Las dificultades para que logren algo positivo son muy grandes pero es la única garantía de autenticidad en esa lucha. Rechazo totalmente que quiten la autonomía y la capacidad de decisión de los pueblos.
No conocía al tal Salfate, un enlace interesante. Me hace gracia la pasión con la que interviene.
Gracias por tu aportación. Un abrazo!!
Tracy, Zamarat, es uno de mis poetas favoritos, lo leo y releo con pasión.
ResponderEliminargtb, así es, como se complica todo con los aspectos religiosos... pese a ello confío en la revuelta que se ha extendido por estos países... a ver...
Aglaia, ese sentido de empatia con los que sufren y luchan... el viejo internacionalismo o cosmopolitismo hay que recuperarlo. En definitiva la fraternidad.
Un abrazo grande a las cuatro!!
Elysa, la sangre de inocentes siempre es un precio demasiado alto (aunque no para los dictadores)... me parece que el poeta lo recoge a la perfección.
ResponderEliminarX, así es... cuando no tienes el pan y la dignidad... no tienes más que la vida por perder, que no es poco. Cuando se deciden a luchar, han dado el gran paso......... por eso mi admiración.
Dona Invisible, el tema religioso es para mi un obstáculo en el camino..., pero... como bien sabemos no es fácil liberarse de los condicionantes religiosos...
Salomé, también pienso que caerán, mis dudas vienen en relación al futuro. ¿Lograran un sistema mejor, más justo, más digno, más libre...?
Ojalá.
Un abrazo y mi cariño para las cuatro.
Troyana, la lucha dignifica (no sé quién lo dijo).
ResponderEliminarAdoro a Manu Chao... su compromiso y coherencia.
Mario, confiemos pues en que hay alguna posibilidad de cambio a mejor a través de la lucha.
Manu Chao es muy peculiar.
Adriana, muchas gracias y te deseo lo mismo, voy a ver si soy capaz de encontrar el tuyo y te envío el mío.
La Zarzamora, no lo tienen nada fácil, desde luego. Nunca es fácil enfrentarse a una dictadura (la nuestra duró 40 años y el dictador murió de viejo en la cama).
Un gran abrazo para l@s cuatro!!
JL, no debemos olvidarlos e intentar no apoyar iniciativas intervencionistas negativas. Poco más podemos hacer.
ResponderEliminarLa sonrisa de Hiperión, una pena pero así es.
MariCari, ¡¡qué cara es la libertad!! No confío ya en la ONU, más que nada no confío en el Consejo de Seguridad de la ONU...
jordicine, pienso como tú, no puede mantenerse tanta injusticia y oprobio ahora que están decididos a luchar. Gracias. Compré el libro que recomendaste...
Un inmenso abrazo para los cuatro!!
Tesa,
ResponderEliminarSu valentía es admirable, los disuelven con armas... tremendo.
Pensaba el otro día como tú... jajaja... pensaba, si aquí fuera así, no saldría ni el gato.
Me uno a tus deseos tanto allí como aquí.
Un abrazo grande!!
senses and nosenses, bienvenido y bien hallado a esta mi casa...
ResponderEliminarEn este espacio se aprecia la intensidad, así que espero que te sientas cómodo y podamos intercambiar muchos comentarios.
Un abrazo!!