jueves, 30 de septiembre de 2010

KARIN FOSSUM, El ojo de Eva.



La novela la compré porque HLO hizo una entrada sobre otra novela de esta autora, “No mires atrás”, y me pareció interesante lo que dijo de ella (luego “El ojo de Eva” no le gustó tanto). La ranita coronada, que le echa la patita a la portada de la novela, es un sujeta notas (no sé si es correcta esta denominación) a la que le tengo especial cariño por su sonrisa afable.

La novela tiene 247 páginas con una letra diminuta, en la edición de bolsillo que compré, que me ha amargado su lectura (pero compré cuatro libros y consideré que tenía que reducir la cuenta). El título de la novela creo que hace referencia a lo que ve el ojo de Eva por una rendija y que es la clave, aparente, de la resolución de los dos casos de asesinato.

El argumento se centra en Eva Magnus, una mujer noruega insegura y con grandes dificultades para mantenerse a si misma y a su hija tras divorciarse. Es pintora y esa dedicación dificulta mucho su supervivencia cotidiana, pero ahí si se muestra segura, ya que confía plenamente en su valía como artista. Dos asesinatos la envolverán en una espiral que parece demostrar que cualquier persona puede acabar robando o asesinando según las circunstancias con las que se encuentre en la vida. El inspector Sejer, que investiga los casos de asesinato, no acaba de resultar atractivo, tiene una personalidad oscura que no destaca en exceso. La trama se mantiene bien pero nunca atrapa del todo.

FRAGMENTOS:

Eva le dice a su padre: “Cuando sea mayor quiero casarme contigo (…) estaba cansada y tenía sueño. Cerro los ojos y supo que ella también se quedaría dormida en el sofá con la cabeza apoyada en el respaldo. No podía resistirse. En el salón de su padre se sentía segura, como cuando era pequeña y él la protegía. Ya no podía hacerlo, pero, de todos modos, era una sensación agradable” (p. 65).

Maja, la amiga de Eva habla sobre la prostitución: “No entrego nada en absoluto, lo vendo. Además hay que separar el trabajo de la vida privada; a mi no me cuesta ningún esfuerzo” (p. 113).
“Nunca deja de asombrarme el instinto masculino; lo fuerte que es y lo exageradamente importante que les resulta a los hombres satisfacerlo. Tal vez piensan que es el mejor sexo de todos (…). Esa cosa cruda y rápida, sin preludios ni tonterías. Nada de rodeos. Suelen tardar diez minutos y ya está. Ni siquiera da tiempo a pensar. De hecho hago todo lo posible por no pensar” (p. 120).

RECOMENDACIÓN: Se deja leer y provoca un cierto interés en la resolución de los casos pero nunca late la tensión que tanto emociona en una buena novela negra. Es una autora que merece otra oportunidad (yo se la daré leyendo “No mires atrás”).

martes, 28 de septiembre de 2010

Miguel Hernández



Miguel Hernández (1910-1942).
Nació en octubre de 1910 en el seno de una familia de Orihuela dedicada a la crianza de ganado. Pastor de cabras desde muy temprana edad, Miguel fue escolarizado a partir de 1915, estudiando primaria y bachillerato. Su padre rechazó la posibilidad de que estudiara con una beca en la Universidad. En 1925 abandonó los estudios por orden paterna para dedicarse en exclusiva al pastoreo, aunque poco tiempo después cursó estudios de derecho y literatura. Mientras cuidaba el rebaño, Miguel leía con avidez (San Juan de la Cruz, Gabriel Miró, Paul Verlaine y Virgilio entre otros) y empezó a escribir sus primeros poemas.



Miguel Hernández formó un improvisado grupo literario, junto a otros jóvenes de Orihuela, entre los que se encontraba su amigo José Marín Gutiérrez, futuro abogado y ensayista que posteriormente adoptaría el seudónimo de «Ramón Sijé» y a quien Hernández dedicará su célebre Elegía. A partir de este momento, los libros fueron su principal fuente de educación y los grandes autores del Siglo de Oro: Miguel de Cervantes, Lope de Vega, Pedro Calderón de la Barca, Garcilaso de la Vega y, sobre todo, Luis de Góngora, se convirtieron en sus principales maestros.
Tras este prometedor comienzo marchó a Madrid para trabajar y colaboró con asiduidad en Revista de Occidente. Mantuvo una tórrida relación con la pintora Maruja Mallo, que le inspiró parte de los sonetos de El rayo que no cesa.
Su poesía se fue haciendo más social y manifestó a las claras un compromiso político con los más pobres y desheredados. Al estallar la Guerra Civil, Miguel Hernández se alistó en el bando republicano. En plena guerra, logró escapar brevemente a Orihuela para casarse el 9 de marzo de 1937 con Josefina Manresa. A los pocos días tuvo que marchar al frente de Jaén.



En diciembre de 1937 nació su primer hijo, Manuel Ramón, que murió a los pocos meses y a quien dedicó el poema Hijo de la luz y de la sombra y otros recogidos en el Cancionero y romancero de ausencias. En enero de 1939 nace el segundo, Manuel Miguel, a quien dedicó las famosas Nanas de la cebolla.
En abril de 1939, concluida la guerra, se había terminado de imprimir en Valencia El hombre acecha. Aún sin encuadernar, una comisión depuradora franquista, presidida por el filólogo Joaquín de Entrambasaguas, ordenó la destrucción completa de la edición. Sin embargo, dos ejemplares que se salvaron permitieron reeditar el libro en 1981.
Intentó huir de la dictadura cruzando la frontera de Portugal por Huelva, pero la policía de Salazar lo entregó a la Guardia Civil. Gracias a las gestiones que realizó Pablo Neruda ante un cardenal, salió en libertad inesperadamente, sin ser procesado, en septiembre de 1939. Vuelto a Orihuela, fue delatado y detenido y ya en la prisión de la plaza del Conde de Toreno en Madrid, fue juzgado y condenado a muerte en marzo de 1940. En la cárcel enfermó, padeció primero bronquitis y luego tifus, que se le complicó con tuberculosis. Falleció en la enfermería de la prisión alicantina a las 5:32 de la mañana del 28 de marzo de 1942, con tan sólo 31 años de edad. Se cuenta que no pudieron cerrarle los ojos, hecho sobre el que su amigo Vicente Aleixandre compuso un poema. Fue enterrado en el nicho número mil nueve del cementerio de Nuestra Señora del Remedio de Alicante, el 30 de marzo.
La primera vez que oí hablar de Hernández fue en el instituto de bachiller, un centro de nueva creación muy activo desde el punto de vista político (tanto el profesorado como el alumnado). Enseguida admiré, porque compartía con él, su origen humilde y las dificultades para estudiar. Mi padre era obrero metalúrgico y mi madre modista que cosía en casa hora y horas para poder vivir más dignamente. Algunos de mis abuelos (más bien ellas) eran analfabetas, mis padres no concluyeron la enseñanza primaria porque tuvieron que empezar a trabajar. Yo fui la primera de toda mi familia que fui a la Universidad, para orgullo de mi padre y de mi madre que, por su mentalidad de izquierdas, valoraban, por encima de todo, los estudios y el trabajo bien hecho.
Admiré de Hernández su compromiso social y político con los trabajadores. De compromiso y lucha, sí que era rica mi familia, sobre todo la paterna. Era muy pequeña pero no olvidaré nunca, quizás por las precauciones de mi padre, cómo se oía en mi piso de 50 m2, de un barrio obrero de Zaragoza, Radio Pirenaica.
Leí con avidez sus poemas más sociales y fue entonces cuando ese: “PERO HAY UN RAYO DE SOL EN LUCHA QUE SIEMPRE DEJA LA SOMBRA VENCIDA”… empezó a acompañarme hasta hoy. Yo misma escribí poemas hasta los 24 años (los conservo y son malísimos… jajaja) influida por la lectura de mi admirado poeta (no fue al único al que admiré, pero hoy solo hablaré de él).



Luego descubrí la ternura de sus poemas de amor, me acompañaron en mis amores juveniles, los poemas dedicados a sus hijos, me acompañaron cuando fui madre. Y hoy sigo encontrando consuelo en ellos cuando necesito compañía en soledad, llorar la marcha de seres queridos o reír mi alegría por lo afortunada que me siento a veces.
Por todo esto y mucho más, Miguel Hernández ha formado parte de mi vida, ha sido una referencia para mi y no puedo ser objetiva con él, por eso le escribo una hagiografía sin pretensiones de objetividad.

domingo, 26 de septiembre de 2010

THE INDIAN RUNNER



Cuando Dona Invisible comentó la película The Indian Runner en su blog, me provocó curiosidad e interés verla por diversos motivos. En primer lugar porque me gusta mucho como actor, el director de esta película, Sean Penn. Además de por su trabajo como actor, he visto a Sean Penn comprometerse con los más débiles en bastantes ocasiones (el caso de Haití por poner un ejemplo) y esa posición también ha despertado mi interés por él.



También me atrajo la intervención en la película de Vigo Mortensen, otro actor que admiro y que encuentro atractivo en la misma línea que Sean Penn.
Lo que explicaba Dona invisible sobre el argumento me pareció que tenía recorrido, o calado que se dica ahora, y me dediqué a buscar la película hasta que ayer la pude ver.



Por si faltaba algo resultó que el tema de la película estaba inspirado, según consta al inicio de la película, en la canción Highway Patrolman (algo así como patrullero de carretera) de Bruce Springsteen.


BRUCE SPRINGSTEEN, Highway Patrolman

El boss es uno de mis cantantes favoritos desde hace “milenios”, creo que es otro hombre comprometido desde el punto de vista social y que tiene ese atractivo especial de los dos anteriores.

La película me encantó por el tema (me parece estupenda la entrada de Dona invisible y a ella os he remitido, no me quiero repetir), por la música, por algunas escenas impactantes y por algunos diálogos interesantes, como cuando uno de los hermanos dice al otro que solo hay dos tipos de hombres, los que son héroes y los que son proscritos. El hermano le contesta que hay hombres fuertes y débiles a la hora de asumir responsabilidades y afrontarlas.... ummm.......da para cavilar y mucho.

Estupenda película, os la recomiendo.

viernes, 24 de septiembre de 2010

Elena y Saramago...

A ELENA le gustaba mucho Saramago, creo que es la persona que conozco que más le ha leído. A finales de agosto me envió un sms con una frase de este autor (La Frase de mi semana), preguntándome cómo la interpretaba yo. Consciente de la importancia que tenía esta pregunta, le dí muchas vueltas y le envié por correo electrónico (para que su marido se la hicera llegar) mi interpretación. Desgraciadamente ya no pudimos comentarla.
Hoy he pensado que la voy a trasladar a mi casa inexistente para ver, si leyendo otras miradas, puedo entender los motivos por los que le pareció importante saber mi manera de verla yo.

NO CAMBIAREMOS DE VIDA SI NO CAMBIAMOS LA VIDA.
José Saramago

jueves, 23 de septiembre de 2010

LOPE



Título original: Lope
Dirección: Andrucha Waddington
País: España, Brasil
Año: 2010
Duración: 126 min.
Reparto: Leonor Watling, Sonia Braga, Luis Tosar, Pilar López de Ayala, Alberto Ammann, Selton Mello, Antonio de la Torre, Miguel Ángel Muñoz, Antonio Dechent, Juan Diego
Guión: Ignacio del Moral, Jordi Gasull


Este fin de semana vi esta película por recomendación de una amiga, profesora de literatura, que suele ir poco al cine. Su consejo me decidió a ir a verla.

La película relata un periodo de la juventud de Lope de Vega, desde su vuelta a la Corte, tras su participación en la guerra de Portugal, hasta su obligada expatriación por un tribunal de justicia por el delito de difamación. La película es bastante fiel a la realidad salvo que parece ser que la expatriación se produce antes que la huida con Isabel de Urbina.
Lope era un mujeriego, pendenciero, altruista y amante de la libertad y de la honradez. En esta etapa de juventud, dos mujeres acabaron enamoradas de él y él de ellas, pero solo una, Isabel de Urbina, estuvo dispuesta a romper con todas las normas sociales y morales de la época (siglo XVI) para marcharse con él, un pobre escritor de comedias. Lope tuvo 17 hijos e hijas de diversas mujeres, los dos primeros de Isabel. Al final parece que empezó a pensar, y tal vez a arrepentirse de sus pecados, buscando en la Iglesia el perdón.



La búsqueda de la libertad, de la independencia y de la individualidad, han sido, y son, universales, y se ha dado en todas las épocas de la historia. El castigo por ello también trasciende el tiempo.

Especial mérito tiene la actuación de los tres protagonistas (Alberto Ammann, Leonor Watling y Pilar López de Ayala) y de Juan Diego, inmenso en el papel de padre del personaje encarnado por Pilar López de Ayala.

Muy recomendable.

martes, 21 de septiembre de 2010

ULTIMAS REFLEXIONES ALREDEDOR DE "El poder del perro".



Y LO PROMETIDO ES DEUDA...
Los tres factores que aparecen en “El poder del perro” como causas de la violencia en México son:
-- Primero, la larga frontera entre México y Estados Unidos que resulta imposible controlar. La vecindad de México con Estados Unidos le permite acceder a uno de los mayores mercados en el mundo. Esto le resulta atractivo no sólo a los comerciantes, sino también a las organizaciones criminales. La firma del Tratado de Libre Comercio de América del Norte trajo un aumento en el intercambio entre estos países, pero no una reducción en los controles en la frontera entre México y Estados Unidos. Estos controles se acrecentaron aún más después de los ataques terroristas del 11 de septiembre de 2001. En la década de los 90, el gobierno de Estados Unidos modificó sustancialmente la estructura de la lucha contra la distribución de drogas, basada principalmente en una interdicción en zonas de tránsito para la protección de la frontera con México. Esta estrategia ha dado lugar a un traslado en la disputa por la distribución de drogas a territorio mexicano. Los cárteles sudamericanos, quienes antes lograban transportar sus mercancías directamente a territorio estadounidense, se vieron en la necesidad de hacer conexiones con sus pares mexicanos en la búsqueda de nuevas rutas de distribución hacia Estados Unidos. La cerrazón de la frontera americana volvió más poderosos a los cárteles mexicanos quienes antes únicamente se centraban en un limitado mercado doméstico basado en drogas naturales (principalmente marihuana) y donde explotan su condición de locales. El papel de la frontera tiene un protagonismo clave en la novela, también el control de los puestos de control por parte del narcotráfico.

-- Segundo, en “El poder del perro” se percibe un cambio en los patrones de consumo en el mercado de drogas en Estados Unidos. Los norteamericanos han cambiado a drogas sintéticas (que incluyen las anfetaminas, metanfetaminas y éxtasis) que son suministradas principalmente por laboratorios industriales en el sureste de Asia (particularmente en Mekong), donde además se producen grandes cantidades de tabletas de metanfetaminas y otras sustancias como la ketamina. Esto ha provocado una disminución del mercado para la cocaína y la heroína proveniente de América del Sur, principalmente. Lo anterior ha obligado a los productores de drogas a buscar nuevos mercados y a extender el consumo de estas drogas en el territorio mexicano. Las nuevas condiciones no sólo han convertido a México en un nuevo mercado, sino también en territorio que sirve como punto de conexión para la distribución hacia el resto del mundo, principalmente Norteamérica y Europa. Literalmente, los cárteles están peleando por el control de las zonas de distribución en un mercado a la baja.



-- Tercero, los cambios en el mercado y la cerrazón de la frontera han obligado a los cárteles a buscar nuevos negocios que les permitan extraordinarias ganancias. El tipo de organización para el tráfico de drogas les ha permitido hacerse con dos actividades ilícitas más, el rapto y la piratería. Los cárteles se manejan ahora como grandes corporaciones multiproducto. Ahora cuentan con brazos armados que se dedican al secuestro y la extorsión, mientras otros se dedican a la producción y distribución de material ilícito. En conjunto, las tres actividades no sólo han resultado sumamente lucrativas, sino que también les permiten el control de grandes regiones del territorio mexicano. Estas actividades resultan críticas para controlar también el tráfico de armas, los prostíbulos, las máquinas tragaperras, además de negocios legales como gasolineras y tiendas de comestibles que les sirven para el lavado de dinero y el control de la población. Toda esta diversificación del negocio de los narcotraficantes ocupa un papel importante en la novela. Nora Hayden, una hermosísima prostituta de alto standing adiestrada para enloquecer a los hombres, nos adentra en el negocio de la prostitución y su relación con el narcotráfico.

En conclusión, narcovaqueros, mafia al puro estilo siciliano, policías, jueces y políticos corruptos, soplones, santos milagreros, prostitutas, irlandeses violentos de los bajos fondos de las ciudades norteamericanas, etc., dibujan un panorama desolador que no está lejos de la realidad y que, a veces, supera a la ficción.

Este fin de semana he sabido, por una entrevista en la prensa dominical, que DON WINSLOW ha publicado una nueva novela, se trata de “El invierno de Frankie Machine”, escrita en el año 2006. Es la historia de Frank, un hombre tranquilo, de sesenta y dos años que vive en la costa de San Diego, donde regenta una tienda y se comporta como un auténtico caballero. Él y su novia Donna, tienen sus costumbres y ambos son unos apasionados de la ópera, esas noches suelen acabar en un buen restaurante, donde Frank no escatima para hacer pasar una gran velada a Donna. Mientras, su hija Jill estudia medicina en UCLA con un futuro más que prometedor. Y así transcurre la tranquila vida de Frank, intentado ayudar a todo el mundo. Pero todo esto es demasiado bonito para ser verdad, y además no tendríamos novela…
Y es que, cuando su hija cae en manos de la mafia, todo cambia. Sale a la luz entonces el oscuro pasado de Frank, al que conocen en la propia mafia como Frankie Machine, o sea, Frankie el Máquina, toda una leyenda. Un antiguo mafioso retirado que intentaba descansar pero que, cuando tocan a la familia, mejor no haberle conocido nunca.

lunes, 20 de septiembre de 2010

J.A. LABORDETA . La Albada

Quizás, la canción que me emociona más...
Gracias a la amiga que me la ha enviado.

domingo, 19 de septiembre de 2010

JOSÉ ANTONIO LABORDETA



Hoy quisiera
-quieres tantas cosas-
cerrar de una vez esta ventana
y descansar del ruido de allá afuera.
Pero entran el mar,
el ruido y el regusto brutal
de toda esta tierra.
Somos de ahí,
de enfrente, justo al lado
donde se ama y crea.
JOSÉ ANTONIO LABORDETA, Hoy quisiera (fragmento)


Mi recuerdo de Labordeta se remonta a los años setenta, fue cuando empecé a ir a sus recitales y, además, en 1974 lo tuve como profesor de historia.
Asistí voluntariamente, y por puro placer de quinceañera, a un seminario que Labordeta daba por las tardes en el primer Instituto de Bachillerato Mixto que hubo en Zaragoza, el Ramón Pignatelli. Para aquellos alumnos/as, entre los que me encontraba, asistir a sus clases, y a las de otros muchos profesores de dicho Instituto, era acudir a escuchar a quienes podían explicarnos, sin mentiras ni manipulaciones, nuestra historia o nuestra literatura.
Labordeta nos dijo en que librería podíamos comprar libros del historiador Manuel Tuñón de Lara sobre la IIª República y la Guerra Civil. Libros de historia semiclandestinos de un historiador que vivía exiliado en Francia y celebraba unos Coloquios, en la Universidad de Pau, donde se debatía sobre historia de España y en español. Coloquios, por cierto, a los que asistí pocos años después como estudiante universitaria de historia contemporánea.
No puedo afirmar que estudié historia por Labordeta, no fue así. Desde que tengo memoria me ha gustado la historia y, cuando empecé bachillerato, sabía que era lo que quería estudiar en el futuro. Encontrarme con Labordeta, me reafirmó en mi deseo.

Sobre los recitales de Labordeta, puedo hablar de la emoción y el sentimiento a raudales que emanaban. Se producía una comunión entre el cantante y el público que no suele ser frecuente. Su defensa de Aragón y su poesía hecha canción, lo convirtieron en un referente y en una seña de identidad. Con el paso del tiempo opto, políticamente, por el nacionalismo aragonesista, pero a pesar de ello siempre he conservado el cariño, la simpatía y una cierta devoción por “el abuelo”, como mucha gente lo llamaba en Zaragoza.

jueves, 16 de septiembre de 2010

Nadando con un rayo de sol.



Puesta de sol en Cerler

Quienes me conocen saben cómo me gusta nadar. Empecé por un problema de salud (mis constantes dolores de espalda) y ahora forma parte de mi rutina semanal.
El centro de deportes municipal en el que nado tiene unos grandes ventanales a considerable altura de la piscina. A través de ellos miro si continua haciendo sol o llueve o está nublado. Pero, últimamente, tengo la inmensa suerte de que un rayo de sol entra en diagonal por uno de los ventanales y va a instalarse justo en el inicio de la calle cuatro. En cuanto entro a la piscina miro cómo está la calle cuatro, no quiero perderme esa cita que cada mañana, hacia las 8,15 h, tengo con ese rayo.
Es imposible que mi rayo pueda transmitir calor, pero yo disfruto entreteniéndome un segundo a su calor, entrecierro los ojos e inicio la calle. Mi encuentro con ese rayo sólo dura un par de metros, así que nado rápido para volver de nuevo al inicio y disfrutar de nuestro contacto.
Ya sufro pensando que un día no vendrá a la cita, no tenéis ni idea de lo bien que se inicia al día acunada por un rayo de sol y rodeada de agua.
Confío que pase inadvertido ésto que se cuece entre un rayo y yo.

miércoles, 15 de septiembre de 2010

Y MÁS REFLEXIONES SOBRE “El poder del perro”…



La lectura de la novela de Don Winslow, “El poder del perro”, me ha hecho detenerme, con más atención, en las noticias sobre la violencia y el narcotráfico procedentes de México. Ligando noticias, relativamente recientes, me he quedado impresionada por las similitudes que existen entre la realidad y la ficción.

La novela es una explosión de sangre y violencia que la realidad deja pequeña. En el mes de enero de este año, aparecía en la prensa la noticia de que la violencia asociada al crimen organizado y al narcotráfico en México se había cobrado la vida de al menos 283 personas, frente a los 138 registrados en los primeros días del año anterior en el que, en total, se contabilizaron más de 7.000 homicidios.
En la novela hay un trasfondo en el que se observa el intento de constituir una “Federación” entre los cárteles de droga (Golfo, Tijuana, Sinaloa, Milenio, Oaxaca, Colima, Juárez) por parte de uno de los protagonistas de la novela, Tío y su sucesor Adán Barrera. Estos intentos de unirse eran muy precarios y cualquier motivo generaba auténticos baños de sangre entre los diferentes capos de cada cártel. El control del territorio mexicano por los capos reales se saldó en un solo día (de enero de 2010) con 69 asesinatos en nueve estados del país, el mayor número de víctimas mortales registradas en un solo día desde el pasado 17 de agosto de 2009, cuando se contabilizaron 57 muertes violentas. Ciudad Juárez, ubicada en el estado norteño de Chihuahua, sigue siendo una de las ciudades más peligrosas de todo México. En esta ciudad se registraron alrededor de 2.635 homicidios del total registrado en 2009. En los últimos tres años se han contabilizado más de 15.500 homicidios violentos ligados al crimen organizado y al narcotráfico.




La novela refiere que los narcotraficantes controlaban las instituciones del Estado hasta el máximo nivel y que fueron capaces de hacer ganar y perder elecciones. La ONG Transparencia Internacional aseguró en diciembre de 2009 que México está "abatido por la criminalidad" en su conjunto, debido al elevado grado de infiltración del narcotráfico en las instituciones del Estado y que México ha sido uno de los países "sacudido" por un mayor número de escándalos de corrupción.
En “El poder del perro” se percibe con claridad que el aumento de la violencia está estrechamente relacionado con la también ascendente actividad criminal en el país. La inoperancia del Estado y la falta de una estrategia de combate a los cárteles aparecen, en la novela, como elementos importantes para comprender su proliferación. Aunque la novela plantea el papel de la conflictiva relación entre la iglesia católica y el Estado, es el aspecto que me resulta más difícil de ubicar. En la novela, además, se insiste en tres factores como causas de la violencia en México que, leyendo artículos y noticias de prensa, parecen bastante acertados y reales y que explicaré en otra entrada.