Las
motivaciones para leer esta novela
Estambul. Esa ciudad que me tiene cautivada y que
tanto deseo visitar. Así que no pierdo la oportunidad de leer literatura
relacionada con esta ciudad como ya hice con Pamuk. Me encanta conocer la
ciudad, su trasiego constante, sus vendedores de productos de alimentación, sus
calles, sus viviendas, su cocina, su relación con la religión, etc.
Ahora que Europa ha pagado a Turquía para
convertirla en el destino de miles de refugiados para ser “seleccionados” como
si fueran ganado, ahora que Turquía no es un lugar seguro para refugiados y
turcos, mi atracción por la ciudad no disminuye.
La
autora
Aunque Elif Shafak nació en Francia en 1971, sus
padres son de origen turco y volvió a Turquía siendo adolescente. Estudió
Relaciones Internacionales en Medio Oriente en la Universidad de Ankara. Su
primera novela la publicó en 1994.
Por las referencias que hace en La bastarda de Estambul al genocidio armenio, fue acusada de
“insultar al pueblo turco” según el artículo 301 del Código criminal turco. El
caso fue desestimado en 2006.
¿Best
Seller es sinónimo de poca calidad literaria?
No necesariamente, pero reconozco que me hace
vacilar cuando veo que una novela ha sido un superventas. ¿Lo es en este caso?
No. Shafak logra construir una novela muy interesante, entremezcla varias
historias con habilidad, denuncia el genocidio armenio y aboga por la reconciliación de ambas comunidades (para que
la reconciliación sea posible, Turquía debería reconocer la persecución a la
que sometió a los armenios en 1915). Además logra introducirnos en Estambul y
en las viviendas estambulíes con destreza y cuidando de no hacer ruido para no
molestar a sus habitantes.
En la novela hay varios núcleos de interés a través
de los que se articula la historia. Uno de ellos es la familia turca formada
por las hermanas Banu, Cevriye, Feride y, la más rebelde, Zeliha, madre soltera
de Asya (por tanto, la bastarda que da título a la novela). Otro núcleo de
interés es la familia armenia Tchajmajchian que vive en EUA, una familia muy
amplia que guarda las costumbres y el recuerdo del genocidio por el que
tuvieron que salir de Turquía. En esta familia Armanoush es hija de padre
armenio y de madre estadounidense, matrimonio fracasado que se separa. Rose, la
madre de Armanoush, se casa con el turco Mustafá para vengarse de su exmarido y
toda su familia armenia.
El afán de Armanoush por conocer el pasado de su
familia armenia la conducirá a viajar a Estambul. La historia tomará diversos
giros sorprendentes que unirán a una familia y la otra para reflexionar sobre
el pasado, colectivo e individual, y la dificultad para huir de dicho pasado.
Es una lectura que habla de cómo condiciona la familia la vida de sus miembros
hasta convertirse en un peso insoportable del que se desea huir.
Estambul, las casas, las calles, los olores, la
comida como punto de reunión de las familias, la religión, los nacionalismos,
las disputas familiares, la rebeldía de las mujeres, la amistad, el amor…
Su familia había dado con la forma de tratar la locura: confundirla con la falta de credibilidad (37).
Hay muchos temas que emergen aquí y allí para pintar
un fresco nítido de la vida y de las preocupaciones de una sociedad como la
turca que se debate entre Oriente y Occidente, entre la religión y el laicismo
y entre lo femenino y lo masculino.
Los cafés siempre son lugar de reunión y aparecen en
la novela: el café Kundera de Estambul resulta ser un lugar especial, un café
en el que una vez entrabas, quedabas
atado a él hasta que el lugar te escupía (97). Un café donde se refugia
Asya. Y después hay otro café, el Constantinópolis, pero este café es virtual y
es otra historia, pero ahí se refugia otra joven: Armanoush.
¿Estamos
ante la típica saga familiar llena de mil historias?
En parte sí. Es la típica novela en la que te
encuentras con “todos” los temas. Sin embargo Shafak nos muestra unas familias
especiales, el tiempo y el lugar apenas
las han deteriorado, son como un rincón del pasado en el presente.
Algo
que me ha cautivado
La novela está dividida en dieciocho capítulos, cada
uno de ellos con un producto de alimentación con el que hacer alguno de los
deliciosos platos que se preparan en la novela o que nos transporta al sabor,
el olor o el tacto de la canela,
garbanzos, azúcar, avellanas, vainilla, pistachos, trigo, piñones, y así
hasta llegar al último que esconde uno de los secretos familiares mejor
guardados: cianuro potásico.
Un
buen fragmento
Aunque todos los libros eran potencialmente dañinos, los peores eran las novelas. El camino de la ficción podía engañarte con facilidad y arrastrarte a un universo de historias donde todo es fluido, quijotesco y tan abierto a las sorpresas como una noche sin luna en el desierto. Antes de darte cuenta podías dejarte llevar hasta perder el contacto con la realidad, esa rigurosa e implacable verdad de la que ninguna minoría debería alejarse demasiado para no acabar desprotegida cuando cambiaran los vientos y llegaran los malos tiempos. Era absurdo pensar con ingenuidad que las cosas no pueden torcerse, porque siempre se tuercen. La imaginación es una magia peligrosa y cautivadora para aquellos forzados a ser realistas, y las palabras pueden ser venenosas para los que están destinados a ser silenciados (111).
Y
otro…
Paseaban por calles sinuosas, y cada barrio parecía tan distinto que Armanoush comenzó a pensar que Estambul era un laberinto urbano, ciudades dentro de una ciudad (198).
Y
una recomendación
Leed esta novela, os envolverá como un remolino y no
dejaréis de leer hasta conocer todos los secretos escondidos.
Una gran casualidad, hoy día 2 de junio el parlamento alemán ha aprobado por practica unanimidad una resolución que reconoce como genocidio las masacres de los armenios cometidas hace más de un siglo por el Imperio otomano. Este libro, desde la ficción, explica dicho genocidio y su autora ha padecido las consecuencias de escribir esta novela.
ResponderEliminarOs deseo un buen viernes y un mejor fin de semana.
Abrazos!!
Gracias Laura por recordar esto (algo que Turquìa se niega tercamente a reconocer) y por tu excelente consejo de lectura. Coincido contigo en tus reflexiones, la ciudad de Estambul me fascina también a mì (siempre he cultivado el deseo de hacer en tren Venecia-Estambul y quién sabe...) y el tema que trata me interesa sobremanera. Del genocidio armeno leì la novela biogràfica de Antonia Arslan que en italiano se llama "La masseria delle allodole" no sé en castellano. Me atrae muchìsimo el libro de Elif Shafak por el tema y esos motivos de aromas y sabores que me cautivan.
EliminarUn abrazo grande U-topìa,
chusa
La interpretación de Turquía es ultrajante puesto que insiste en ignorar lo ocurrido o a lo sumo afirmar que también murieron turcos, equiparando a víctimas con victimarios algo que en España se obstina en hacer, por ejemplo, ETA y sus seguidores, o remontándonos más lejos, vencedores y vencidos de la guerra civil.
EliminarNo podemos aceptar que los que matan se apropien de la narración de lo sucedido.
Tu gusto por la cocina te hará disfrutar de ese aspecto que está muy presente en esta novela.
Un gran abrazo!!
Hola
ResponderEliminarMe pones en una aprieto, porque superar, hablando de Turquia, “El libro negro” “ y “Me llamo rojo” de Pamuk, libros a los que tengo mucho más que apreció, me parece difícil pero qué menos que aceptar un consejo tuyo y así echar un vistazo a este libro. Pero, ;) , no puedo irme sin hablar de un libro de un escritor turco de origen kurdo, que tiene muchos libros famosos, pero al que quiero referirme y recomendarte, con mucho más que pasión, es una serie de cuentos titulada “Calor amarillo” de Yasar Kemal, que es brutalmente bella. Es otra parte y otro tiempo de Turquía, pero que debiera conocerse.
Cuídate
gracias por la reseña
No puedo decirte si esta bastarda supera a esas dos novelas de Pamuk porque no las he leído (y ya están apuntadas), solo he leído Estambul que me encantó. Por supuesto apunto también el de Kemal.
EliminarMe interesa mucho el mundo intercultural del Imperio Otómano donde podían convivir muchas culturas con cierta tolerancia. El nacionalismo turco rompió esa tolerancia y el rersultado lo tenemos en la actualidad.
Gracias a ti por tus recomendaciones.
Hola Laura. Gracias por llevarnos a otras de tus travesías.
ResponderEliminarGracias por los sutítulos: si tu prosa ya de suyo se lee fácil y con agrado, los subtítulos le agregan una gracia... periodística, diría.
Tu reseña me ha recordado a esa peli "La sal de la vida", que hablaba de tantas cosas: de las tensiones entre griegos y turcos en la ciudad milenaria, los recuerdos de la infancia, los aromas de las especias... Una versión que se ha comparado al Cinema Paradiso, de Tornatore, por lo evocador de su trama, porque hay niño que crece de la mano de su abuelo, que le va abriendo los ojos al mundo.
Y Estambul, o mejor, la cultura milenaria de esa ciudad-encrucijada, es algo a lo que deberíamos prestarle (yo debería) más atención. La globalización nos ha acercado al mundo árabe, y en la ex ciudad de Constantino es donde esa fusión, o ese equilibrio mejor se aprecian -dicen-. Esas tensiones que tú mencionas: tradición y modernidad, laicismo y fanatismo, occidente y oriente.
Te agradezco el largo párrafo que has copiado. Porque al fin y al cabo es una novela, y si el tema es interesante pero la prosa, el estilo, no lo es, no hay caso. Para ello están los documentales (a falta de viajes, digo).
Muchas gracias.
Tienes razón, esa película, que no recordaba, resulta muy al hilo de lo que comentamos. En occidente siempre ha habido una admiración romántica por oriente que, a veces, deriva en paternalismo. En esta novela aparecen esos debates entre occidentales-orientales puesto que Estambul está a medio camino entre un mundo y el otro. También Pamuk en su Estambul hablaba mucho de este tema en el mundo intelectual estambulí.
EliminarDe momento la situación no es buena para viajar a Estambul, así que nos conformaremos con lecturas y documentales, pero vamos, he oído que en EUA se recomienda no viajar a Europa por riesgo de atentados este verano...
Un abrazo!!
Si te ha gustado "La bastarda", te recomiendo "El fruto de honor" de Shafak. Es una pena que sólo se hayan publicado 3 novelas suyas en español. Un abrazo
ResponderEliminarLo tengo apuntado para comprarlo, esperaba a ver si me gustaba este. Sí, es una pena que la traduzcan tan poco.
EliminarUn abrazo!!
Pues no conocía esta novela. Una temática actual estos días, curiosa coincidencia. Y parece que bien tratada, así que me llevo bien apuntado el título... Y las recomendaciones de Wineruda, la película de Josebla, el libro de Agnieszka... Y me voy ya, que me van a faltar hojas en el cuaderno para apuntar.
ResponderEliminarBesotes!!!
Me gusta que este espacio sea, entre otras cosas, una oleada de propuestas. Por fortuna cuento con grandes comentaristas que contribuyen a ello.
EliminarUn fuerte abrazo!!
ResponderEliminarYa sabes de mi encantamiento por esta ciudad que tuve el gran placer de visitar hace algunos años.
Tengo este libro en espera pero después de leer tu reseña, acaba de adelantar unos cuantos puestos en la lista... ;)
Que disfrutes mucho tú también de este viernes y este fin de semana!!
Besos, petons, muxus y un fuerte y cálido abrazo!!!!
:)
PD: Preciosa esa rosa de Marraketch.
Síiii, me da una gran envidia, todos los que habéis ido y habéis vuelto encantados/as de Estambul. Pero no desisto, quién sabe.
EliminarLa puse yo misma para celebrar con ella mi cumpleaños :))
Una ráfaga de besos y abrazos. A disfrutar!!
EliminarYo no desisto de regresar algún día. Quién sabe, sí... ;)
Pero lo más importante es que ojalá pronto mejore la vida para sus habitantes, los que la respiran cada día.
Fue tu cumple!!!! :O
Felicidades y besos y achuchón enormes!!!!
Que lo/s disfrutes (el día, los años, la vida) como y con quien más tú desees y quieras!!!!
:)
Por supuesto, lo importante es que mejoren las condiciones de vida de sus habitantes, vivir en el terror de los atentados, algo que conocemos muy bien aquí por ETA, es insufrible.
EliminarSíiii el "number one" ;) Muchas gracias querida X!!!
No conozco esa novela. Tomo nota. Tampoco he leído mucho sobre Turquía: apenas un libro de Pamuk ("Nieve"), otro de Kemal ("El halcón") y otro de Kenizé Mourad ("De parte de la princesa muerta"). Hay mucha diferencia en el modo de narrar. Mourad es una escritora al modo occidental, aunque de procedencia turca; los otros son turcos y su narración es morosa, detallista, bella, pero desde luego no suceden cosas a la velocidad del rayo.
ResponderEliminarEstuve en Estambul hace seis años. Merece la pena. No se parece a nada. Desde luego, la recomiendo vivamente, por su historia que se palpa en la calle, por su olor, una mezcla de mar y especias, porque parece detenida en el tiempo.
Me ocurrió una cosa curiosa en un café a los pies de la torre Galata. Entramos un grupo de amigos a tomar algo (se puede beber alcohol con toda normalidad) y el dueño nos oyó hablar castelllano. Vino hacia nosotros y nos preguntó... ¡por la poesía española actual! Yo le di los nombres de Luis García Montero y de Benjamín Prado. Añadió que en Estambul solo encontraba libros de Machado y de García Lorca, pero que le gustaría saber qué se escribía ahora. Añadió que los jóvenes deberían leer poesía. Todo esto en un español impecable. Me quedé anonadado. Le pregunté por autores turcos y me dio el nombre de Yasar Kemal sin dudarlo, hizo un gesto raro cuando le pregunté por Pamuk y dijo que sí, que en Europa gusta mucho.
Estambul es una de esas ciudades en las que te quedas para siempre.
He leído también esa novela de Mourad, sin embargo la había olvidado (en mi defensa decir que hace bastante tiempo que la leí).
EliminarMuy interesantes esos inesperados encuentros que, por fortuna, proporcionan los viajes. Por lo que leí en Estambul, la poesía ha sido muy valorada en Turquía (en realidad en el Imperio turco). Es cierto que Pamuk es bastante occidental, él mismo lo dice en el libro que acabo de mencionar.
Ayyy, no sé si podré visitarla, confío en que sí, pero ya veremos. De momento me tengo que conformar con ensoñarla a través de las lecturas.
Oh lo del cianuro potásico...
ResponderEliminarMe has convencido.
Eso de los dieciocho capítulos y su ingrediente correspondiente me atrae mucho.
Yo tampoco he ido a Estambul y me encantaría.
Mientras la iré leyendo...
; )
Besos y buen finde!
La comida tiene un gran protagonismo en la novela, al igual que las tradiciones que se concretan en las celebraciones. Unos personajes las llevan a rajatabla y otros las abandonan como forma de liberarse de las ataduras que muchas veces acompañan a dichas tradiciones.
EliminarBesos y buena semana!!
Gracias por descubrirme a esta escritora y su libro. Ya, de entrada, denunciar el genocidio que el Imperio Otomano perpetró sobre los armenios, nos sitúa ante una autora que, presuponemos, escribe sin concesiones a la galería (entiéndase la “galería” por la sociedad turca), y eso lo tengo muy en cuenta.
ResponderEliminarLa vieja polémica best seller en cuanto a calidad literaria hace mucho que dejó de entusiasmarme… Demasiado tiempo debatiendo sobre algo que nunca queda del todo claro, ni siquiera el gran U. Eco en el excelente ensayo “Apocalípticos e integrados” resulta determinante en ese sentido, autor, por lo demás, de un magnífico best seller, “El nombre de la rosa”, luego vendría mucha copia mediocre de dicho título.
Precisamente de esa misma colección; “Best seller, editorial Debolsillo” a la que pertenece el libro que nos traes, yo he leído una estupenda autobiografía de Stephen King, “Mientras escribo” (lo primero que he leído de él), en cuanto a sus avatares como escritor.
Tampoco soy inmune al influjo que tiene una ciudad como Estambul (no la he visitado) en tantos viajeros, y el lustre que tal escenario otorga a toda historia bien contada, convierte al libro en algo que se percibe nítidamente por los sentidos… oler, palpar, admirar, y cuando entre las páginas de un libro te llega el aroma de especias… ¡qué te voy a contar!
Muy interesante tu reseña, Laura, así como las recomendaciones de tus comentaristas.
Ah, genial la anécdota de Atticus referente al admirador de la poesía española.
Buen finde!
Estoy de acuerdo contigo en que ese debate respecto a si un libro muy vendido es sinónimo de poca calidad, o al contrario, carece de interés. De todas formas me parece que una cosa son las novelas que nacen con voluntad de superventas y que las editoriales las lanzan como tales, y otra cosa diferente son novelas que no nacen de esta manera y van creciendo y creciendo hasta ser superventas. De las primeras no me fío ni un pelo.
EliminarLa admiración y mitificación romántica sobre Oriente ha impregnado la literatura, el arte y los viajes desde el siglo XIX. Es difícil ser inmune a esa mitificación, resulta curioso que hay muchos escritores turcos, entre otros Pamuk, que se sienten más occidentales que orientales (así lo recoge en su Estambul, quizás por eso la anécdota de Atticus.
Los olores es algo que siempre me ha cautivado, creo que tengo el olfato muy fino (a diferencia del oído por ejemplo) y para mi resulta siempre muy importante. Las pocas ciudades con zoco que he visitado (Marrakech, Sarajevo, Mostar), he disfrutado mucho.
Buena semana!!
Debes estar disfrutando con la Feria del libro de Madrid ¿no?
EliminarLaura, no suelo ir a la Feria del Libro de Madrid.
EliminarAlguna vez estando en el centro de la capital, y por motivos ajenos a lo literario, me he topado de lleno con la Feria, entonces claro que ojeo por aquí y por allá, tomo alguna foto y me llevo algún libro, pero ex profeso al evento nunca voy, tampoco a las casetas del Parque del Retiro, no tengo nada en contra, simplemente no va con mi ánimo.
Caso contrario es la Feria del Libro Antiguo y de Ocasión, sita en el Paseo de Colón, ahí sí se me puede encontrar buscando algún libro olvidado por viejo, curioseando en las rarezas, voy casi todos los años, aunque alguno ha quedado en blanco, según me levante ese día…
Abrazo!!
Entiendo que debe ser algo agobiante y muy comercial ¿no?
EliminarHe estado en alguna ocasión en la del Libro Antiguo y de Ocasión (también en Barcelona).
Un abrazo!!
No lo conocía, pero parece interesante. No es una lectura que me apetezca ahora especialmente aunque es probable que le eche un vistazo más adelante.
ResponderEliminarAbrazo!
Bueno, todo tiene su momento, quizás en el futuro...
EliminarUn abrazo!!
Me parece una propuesta de lectura muy interesante, me gusta los temas que aborda en el contenido y la forma; tampoco suelo leer bestsellers, aunque no digo que todos sean malos. Supongo que por costumbre y porque ya sabemos como funciona el mundo de los "fenómenos literarios".
ResponderEliminarCreo que me la apuntaré para este verano. Durante una época estuve bastante interesado sobre el tema de los genocidios, especialmente la Shoah, pero también el armenio y el cometido en Ruanda en los 90. En este sentido la película "Ararat", que seguro te suena, me impactó. Aunque no la recuerdo con detalle, creo que comparte bastantes cosas con esta novela.
Un abrazo.
Gerardo, es una novela muy entretenida, cuenta unas historias familiares entretejidas con bastante habilidad y además está el trasfondo del genocidio armenio, el auge del nacionalismo turco y otras cuestiones. Es una novela en la que la mayoría de los personajes son femeninos y eso plantea también el papel de la mujer en Turquía (y como ha retrocedido en cuanto a derechos y libertades).
EliminarNo he visto la película que mencionas, la he buscado y parece interesante. A ver si la encuentro.
Un abrazo!!
Escucho Estambul con los ojos cerrados
ResponderEliminarEscucho Estambul con los ojos cerrados
Al principio corre una apacible brisa;
Y las hojas de los árboles,
se mueven suavemente;
lejos, muy lejos
Suenan los interminables campanilleos de los aguadores
Escucho Estambul con los ojos cerrados.
Escucho Estambul con los ojos cerrados;
De repente bandadas de pájaros vuelan,
en las alturas piando
Se están recogiendo las redes en el muelle
Tocan el agua los pies de una mujer
Escucho Estambul con los ojos cerrados.
Escucho Estambul con los ojos cerrados;
El gran Bazar está sereno y fresco
Hay bullicio en Mahmutpaşa
Patios poblados de palomas
Vientos de primavera traen olores de sudor;
Escucho Estambul con los ojos cerrados.
Escucho Estambul con los ojos cerrados;
Todavía con resaca por las bacanales del pasado
Un yalı con embarcadero vacio;
Relajado, después del zumbido de los vientos del sur
Escucho Estambul con los ojos cerrados.
Escucho Estambul con los ojos cerrados;
Una coqueta muchacha pasa por la acera;
Palabrotas, silbidos, canciones, piropos,
cae algo de su mano;
presiento que es una rosa;
Escucho Estambul con los ojos cerrados.
Escucho Estambul con los ojos cerrados;
Un pájaro aletea alrededor de tu falda
¿No sé si tu frente esta caliente o no?,
¿o tus labios están húmedos?
Detrás de los pinos asoma la luna blanca,
puedo sentirlo en los latidos de tu corazón
Escucho Estambul.
Orhan Veli
Escucho Estambul con los ojos cerrados...
Eliminar¿Y quién no lo haría con un poema tan bello y sugerente?
Gracias Adriana, es una maravilla que me permita escuchar y soñar con Estambul.
Un fuerte abrazo!!
Tu reseña es tan envolvente como parece que es la propia novela o la propia ciudad con la que sueñas...
ResponderEliminarMuy bello tu trabajo, amiga
Un abrazo
Envolvente es una palabra que califica muy bien la novela, las historias que ahí se cuentan te van envolviendo y atrapando e incluso te hacen sentir los gustos y olores de las comidas turcas, de sus calles, del mar...
EliminarGracias, Ildefonso. Un abrazo!!
Comparto enteramente tu introducción. Solo le haría una matización. El término bastarda se lo pondría a Europa... y a todos aquellos que por acción u omisión hacen que Europa sea sí, así como no nos gusta que sea.
Por la reseña de la novela, si algún día fuese a Estambul, debería leerla, para meterme en ambiente.
Buen trabajo, una vez más.
Un abrazo
· LMA · & · CR ·
Nuevo atentado en Estambul, creo que el zoco o en sus alrededores, he oído que hay 11 muertos. Una situación muy dura en toda esta zona del mediterráneo oriental.
EliminarEstoy de acuerdo en que la posición de Europa es vergonzosa en grado máximo, muestra una frialdad y un egoísmo sumo.
Gracias (la verdad es que describe muy bien el ambiente de la ciudad hace unos años, ahora ha empeorado en muchos aspectos, por ejemplo en la consideración de las mujeres). Un fuerte abrazo.
Un millón y medio de armenios asesinados por el gobierno de Kemal Ataturk, el gran padre de Turquía moderna y modelo patriótico y ejemplar para muchos patriotas europeos. De los kurdos que decir, han matado a cientos de miles y siguen resistiendo con coraje y sin miedo a defender ideas democráticas, igualitarias y libertarias en pleno volcán sangriento.
ResponderEliminarLa complicidad, la estulticia, la falta de principios, la sobredosis de intereses han hecho de ese gobierno de genocidas el perro guardián de Occidente.
Estambul, la legendaria Estambul, es solo un faro que se apaga en el estampido que produce el archigastado choque de civilizaciones.
Un abrazo
El nacionalismo turco acabó con toda la convivencia entre culturas que hubo durante el Imperio Otómano. El proceso de homogeneización fue brutal, pero no olvidemos las carnicerías que ha provocado el nacionalismo europeo para intentar esa homogeneidad que tanto valoran ahora en la Europa postcomunista.
EliminarPamuk insistía mucho en su Estambul sobre la decadencia dela país y de la ciudad, el crecimiento de la religión y otros aspectos que, ahora, se complican con el papel de cortafuegos de los refugiados/as y el consiguiente terrorismo. Una situación muy compleja.
He leído algunos artículos muy interesantes sobre la forma en que se organizan los kurdos, lastima que siempre ande por medio la guerra que todo lo pervierte.
Un abrazo!!
Lo pintas fascinante, chica. También huyo de los best-sellers. Suelo darme unos diez años para ir a ellos, si aguantan el tirón. Pero miraré en la biblioteca a ver si lo tienen.
ResponderEliminar¡Tantos lugares esperando!
Besos de verano.
Yo contaba con la recomendación de una blogera de la que me fío bastante, así que no he esperado tanto para darle crédito a la obra. Pero entiendo la desconfianza hacia los superventas porque yo también la tengo.
EliminarPues sí, el calor ha llegado con lo poco que me gusta...
Un beso de verano!!
Soy de las que tenía más a Pamuk en el punto de mira, pero es que tus ruegos son órdenes para mí. Fíjate que lo que más me ha gustado es lo de los múltiples debates de la sociedad turca... y los cafés... :)
ResponderEliminarUn abrazo
¡¡¡Qué rico es el café turco!!! Y que magnífica esa costumbre de dejar pasar el tiempo en los cafés del norte de África y el mediterráneo oriental (lástima que sea sobre todo una costumbre masculina).
EliminarGracias por tus generosas palabras, Ana.
Abrazos!!
me encanta como describes lo que lees
ResponderEliminarGracias!!
EliminarVisité Estámbul hace unos años y la recomiendo encarecidamente. Una ciudad mágica y llena de contrastes: oriente y occidente, culturas diversas, colonia de judíos sefardíes, el pasado y el presente con todo lo que conllevan parecen estrecharse la mano. Quizás ahora no sea el mejor momento...
ResponderEliminarTengo que felicitarte una vez más, estimada U-topia, por la capacidad que tienes de persuasión para fomentar el deseo de aproximarse a las obras que reseñas de manera tan magistral. Gracias, una vez más, por esta divulgación tan exitosa que haces de los libros que leer y comentas..
Abrazos
Me da que ahora es un momento regular... una pena.
EliminarGracias querido Luis Antonio, me das una gran alegría si despierto los deseos de leer en una persona tan leída como tú, pero a la vez es una gran responsabilidad. Espero no defraudar tus expectativas cuando leas alguno de los libros aquí reseñados.
Abrazos!!
No se que decirte, salvo que por una parte las sagas familiares con mil ramas me dan un poco de yuyu...pero por otra parte, cuentas cosas que la hacen atractivas y mucho. No me preocupa que sea un superventas. La curiosodad acabará venciendo por una razón fundamental...el retablo de esa ciudad que se debate entre Oriente y Occidente....ahí me has ganado. Un abrazo
ResponderEliminarMe parece perfecto que te dejes tentar por la ciudad, pero diré que los personajes de estas familias ayudan mucho a entender ese complejo espacio llamado Estambul.
Eliminar[¿Por qué envías los mensajes por partida doble? jajajaja]
Un abrazo!!
Me alegro de leer tu recomendación, porque yo veo un libro con esa portada y esa portada tan orientalista y huyo como de la peste. El título tampoco le salva de ese aire de bestseller ramplón... pero si me dices que no es así y que merece la pena, te hago caso. Ya sabes que siempre ando a la búsqueda de otras voces y otras literaturas.
ResponderEliminarun abrazo.
Tú eres un gran conocedor de la literatura oriental (no sé si este término es correcto), así que igual no te convence. Tienes razón en que todo actúa en su contra: portada, título, etiqueta de bestseller... Yo me dejé guiar por una gran lectora.
EliminarUn abrazo!!
La tengo esperando hace un tiempo, U-to. La apunté de las líneas de Agnieszka y las tuyas sólo refuerzan mi interés. Si bien no he visitado Estambul -aunque sí la obra de Pamuk- y comparto contigo un cierto prurito a la hora de leer un best seller, éste parece brindar la oportunidad de conocer más acerca de esa ciudad y de sus gentes.
ResponderEliminarEn otro orden, aquí la comunidad armenia bate el parche todos los meses de abril debido al genocidio de 1915 que el gobierno turco no quiere reconocer. La historia parece sugerente. Lo subiré unos lugares en mi lista de libros a leer.
Gracias por recordárnoslo!
Un abrazo.
Hacia América fueron muchos armenios/as, pensaba que habían ido sobre todo hacia EUA, pero veo que también fueron hacia el sur y muy al sur.
EliminarEs una novela bien narrada con una buena historia y además....... sobre Estambul. Ya tengo en casa las dos de Pamuk que ha recomendado Wineruda y estoy leyendo el de Kemal.
Un abrazo!!