miércoles, 10 de septiembre de 2014

LIBROS VACIOS

DAVID JIMÉNEZ


Llevo meses pensando en algo extraño.

Los libros forman parte de mi vida de una forma íntima y gozosa. Prefiero leer a casi cualquier otra actividad, necesito estar arropada de libros y estimulada por palabras. Los libros son para mí una fuente de placer, pero también son un reto, un esfuerzo por desentrañarlos, una incitación a la reflexión y a la resolución de dudas e interrogantes.

Leer me ayuda a pensar, a esclarecer, a meditar. A veces leer es llorar y sonreír, pérdida y encuentro, viaje y parálisis. No puedo conformarme con la lectura pasiva, siempre me involucro, doblo páginas, señalo (siempre con lápiz), exclamo, vuelvo atrás, releo ese fragmento que me indujo a pensar algo diferente a lo que, páginas después,  parece decir...

Y cuando acabo la lectura, pongo mi nombre, el mes y el año en que lo he leído. Después anoto en mi libreta impresiones sucintas.

Ahora que compro bastantes libros en librerías de segunda mano y de ocasión, me da por pensar, con extrañeza, el poco valor que tendrán mis libros si acaban vendidos por quienes los hereden. De hecho, casi nadie considera que los libros sean una herencia a tener en cuenta, casi siempre son una molestia que no se sabe como resolver para dejar espacio a otros objetos. Casi todos los libros que compro en esas librerías de segunda mano están nuevos, sin puntitas de hojas dobladas, sin marcas de lápiz, sin la firma de su dueño, vacíos. Libros de alguien que no imprimió ni una pequeña señal de su lectura y que permiten poner a las librerías la máxima puntuación porque están “nuevos”, “sin marca”, “sin mácula”.


Quizás por mi entrega a la lectura, ésta me ha proporcionado una alegría más: mi búsqueda de Finnegans Wake ha finalizado. Estaba en el Mercat de S. Antoni, un mercadillo de libros viejos y de ocasión, comics, revistas, postales y videojuegos que se celebra los domingos en Barcelona. Un amigo lo ha encontrado para mi.

45 comentarios:

  1. He empezado a poner post-it en los libros, en las páginas que me gustan a la altura de la frase. Antes subrayaba, doblar esquinas nunca. No tengo una razón lógica al cambio, son cosas que cambian. Si me regalan un libro me gusta que me escriban algo dentro. En un diccionario me pusieron palabras, el significado y el porqué esa palabra, para mi eso lo hace especial. Eso sí, como leo en el lector, ahí me encanta subrayar, al igual que me encanta un libro "usado", encontrar que alguien subrayó, dobló, etc. Aunque yo cada vez sea más comedida. Hoy precisamente pensaba en qué sería de mis libros mañana, le he dado un manotazo a la idea, supongo que porque no me gustaba la respuesta que me daba. Feliz encuentro ;-)
    Un beso

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    1. Cada persona tenemos nuestras "manias", antes subrayaba mucho, ahora solo lo hago en los ensayos y demás, en las novelas solo pongo marcas leves.

      Lo mejor es darle un manotazo a la idea del futuro de nuestras bibliotecas, en todo caso no es lo peor acabar en librerías de segunda mano, es darle una nueva vida al libro.

      No tengo lector, ahora estoy leyendo El jilguero y lo estoy meditando, ese volumen es inhumano.

      Besos!!

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  2. Curioso, yo siempre escribo la fecha y el lugar en los que compro el libro, siempre a lápiz, por eso de dejarlos inmaculados para la posteridad. Pienso mucho qué será de ellos algún día, es algo que he comentado con blogueros amigos, también me gustan los libros de segunda mano que traen a mara de quien los poseyó con anterioridad, ayuda a pensar a dos. Tengo cajas y cajas y más cajas de cuadernos de lectura, siempre una libreta común de una raya con escritura descuidada, apresurada, anotaciones flash para no interrumpirme por demasiado tiempo mientras leo. ¿Sabes que siempre entro a tu blog con una ilusión especial? Un beso :)

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    1. Cómo me gusta eso que me dices, la ilusión es algo hermoso.

      Poniendo la fecha en la que acabo de leerlo tengo fácil encontrar en la libreta el comentario que le he dedicado.

      Ostras!! Yo tengo pocas libretas y eso que llevo muchos años haciendo esos comentarios. Soy muy escueta, es cierto. Ahora con las reseñas para el blog es cuando más escribo. Qué interesante leer esas libretas, ahí está una parte de tu vida.

      Un beso!!

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  3. Ante ciertos libros, uno se pregunta: ¿quién los leerá?
    Y ante ciertas personas uno se pregunta: ¿qué leerán?
    Y al fin, libros y personas se encuentran.

    André Gide


    Me alegro que hayas encontrado a Finnegans Wake, y con toda seguridad no fué por casualidad...

    Fué por causalidad, una manifestación externa, una serie de acontecimientos que se van dando de forma simultánea y nos llevan a contactarnos con lo que estábamos pensando o buscando, siendo en muchos casos una manifestación externa del inconsciente colectivo, a veces materializada a través de símbolos. Jung creía que las “coincidencias” no solo estaban gobernadas por el azar —siendo que su probabilidad de suceder eran muy pocas, sino por una dinámica más profunda. Coincide en esto con el texto gnóstico del Kybalion, que dice: “Azar no es más que el nombre que se da a una ley desconocida; hay muchos planos de causación”... (Causa y Efecto). Y para ampliar la madeja de posibles conexiones, recordemos que Don Juan le dice a Carlos Castaneda, como si fuera un experto jugador de póquer de realidades alternas, que la suerte es una forma de poder.

    Abrazos Laura.

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    1. Me encantó tu afirmación de que no hay casualidades sino causalidades y la vengo utilizando por su acierto. Ahora me explicas más extensamente esa manera de entenderlo y no puedo estar más de acuerdo.

      Qué felices encuentros entre libros y lectores/as, que sorprendentes muchas veces. ¿Cómo iba yo a imaginar que acabaría prendada de Joyce y buscándolo por Dublín cuando empezó el 2014? Otro acontecimiento que me encanta es cómo de un libro enlazas con otro y éste con el siguiente porque hay alguna circunstancia que te guía.

      Agradecida siempre con tus comentarios llenos de sabiduría.

      Abrazos!!

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  4. Me alegro mucho por ti, porque has encontrado lo que buscabas! Estuve a punto de comprarlo - a precio exorbitante-, pero Esther Tusquets señala -como tu misma me lo has apuntado- que no es una traducción completa -que, dicho sea de paso, no existe en lengua castellana (aun)-. No tengo otro remedio que mejorar mi inglés y leerlo en lengua original... cuando ello ocurra!
    En otro orden, son escasos los volúmenes los que he comprado en librerías de usados, aunque los hay. Particularmente, son aquellos poco menos que imposibles, muy agotados.
    Espero tus comentarios sobre Finnegan's cuando lo concluyas!
    Recibe un beso grande y mis felicitaciones desde este Big Sur.

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    1. Marcelo, hay una broma que dicen los traductores de FW al castellano, dicen que para poder traducirla al castellano primero habría que traducirla al inglés :))
      Así que ánimos si te decides a intentarlo.

      La reseña saldrá, incluso si no entiendo ni una línea.

      Besos (con un calor de esos que tanto te gustan... jejeje)

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  5. Qué bonita entrada, Laura, una reflexión muy profunda. Es interesante eso de poner fechas a los libros, nunca lo he hecho, pero sí acostumbro anotar algunas cosas en libretas respecto a lo que el libro me hizo sentir y, en algunos otros que me han marcado de forma especial, confieso que he tomado el lápiz también y subrayado algunos párrafos. Los libros usados tienen un encanto muy particular, tengo en la memoria unas palabras de Virginia Woolf que no puedo recordar en este momento...

    Me alegra mucho que encontraras al fin Finnegans Wake, ha debido de ser un momento muy especial para ti, espero que lo disfrutes.

    Besos.

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    1. Como decía antes, cada lector tiene sus maneras de acercarse al libro, de tratarlo y de relacionarse con él. Conocer esa relación tan íntima es un gran regalo, el que me estáis haciendo con vuestros comentarios.

      He buscado porque yo también recuerdo que Woolf dijo algo al respecto, pero no lo he encontrado.

      Fue una alegría. El que me lo encontró me observó después en la distancia y me explicaba que me había visto varias veces sacarlo del bolso y ojearlo :))

      Besos!!

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  6. Yo solía escribir "leído" y la fecha en que terminaba el libro. Ahora lo pongo en una excell en la que tengo una lista de los libros que tengo. ¿Qué será de los libros? Espero que mis sobrinos lo hereden con la misma alegría que heredarán el apartamento o el coche. Son buenos lectores y espero que sepan apreciar si no todos los libros que se queden, sí los que son imprescindibles.
    Siempre me ha producido curiosidad los libros de segunda mano, agradezco que estén inmaculados, pero me sorprende que haya pasado por otras manos y no hayan dejado huella. Sobre todo si es un buen libro me pregunto cómo alguien se ha podido desprender de él.
    Me alegro que tu búsqueda haya finalizado de una forma inmejorable: con el detalle de un amigo que seguro cuando lo vío supo al instante la alegría que te iba a dar.

    Abrazo!

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    1. Los motivos para desprenderse de los libros son infinitos, yo separaría en todo caso en dos grupos, los que son grandes lectores y por algún motivo han de desprenderse de ellos y los que no lo son y es como si tiraran un residuo a la basura.

      Me consolaría que mis hijos se los quedaran pero no son grandes lectores por ahora.

      Será siempre para mi un libro especial.

      Abrazos!!

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  7. Me alegro que hayas encontrado Finnegan´s Wake. Espero que no te defraude. Leí una entrevista con el traductor del libro al polaco. Dedicó 10 años de su vida a la traducción de Finnegan´s y una vez publicado el libro afirmó que había sido un esfuerzo sin sentido, que este libro es una broma del escritor. Lo mismo decía el cuñado de Joyce, si bien recuerdo.
    A mí tambien me encantan los libros de segunda mano. Tengo muchos, comprados en diferentes lugares del mundo, cada uno con su historia que no sabe contar, desafortunadamente.
    Saludos!

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    1. Voy preparada para todo, especialmente para que sea tan opaco que no entienda apenas nada. Veremos.
      ¿Dieciséis años escribiendo una broma? No me encaja. Lo cierto es que intentó llevar a cabo la crítica más feroz sobre la codificación cultural a través de la palabra. Dice Pozanco, su traductor, que Joyce pretendió amasar en un solo ladrillo lo que Picasso fue modelando en miles de obras. La deconstrucción de la cultura lingüística. ¿Quizás fracasó? No sé.

      Qué maravilla esa biblioteca llena de historias mudas.

      Salud!

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  8. Es curioso,pienso mucho en eso que dices del destino que tendrán mis libros cuando yo no esté por estos barrios y me duele que sean un estorbo, sobretodo ahora que se reducen los espacios y se puede tener una biblioteca virtual sin que entorpezca la vivienda.
    Me pongo triste.

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    1. Mi vivienda no está entorpecida por los libros y te aseguro que tengo muchos, incluso en los pasillos. De momento no me he pasado a lo virtual, no lo necesito (excepto cuando leo volúmenes de 1.000 páginas en la cama). Pero comprendo ese punto de vista.

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  9. Hay halos de misterio en ciertos libros que conseguimos. A mí, ahora, en esta época donde nada escapa a nada, me da por buscar a los ex dueños de mis libros usados en facebook, pura curiosidad, pero los libros, esa fascinación... Un abrazo.

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  10. Me gusta tu cavilación LAUR ;) casi todas las tuyas me gustan. Creo que el lugar que con el tiempo ocuparán los objetos que nos rodean depende sobre todo del valor intrínseco que tengan y el que le hayamos imprimido nosotros aun no teniéndolo en sí mismo. Tu amas los libros, por eso los llenas de señales de la vida que has compartido con ellos. Las personas que te rodean saben de este amor y por ello ni tu, ni cuando tu faltes nadie que te quiera permitirá que tus libros rueden anónimos por estanterías de librerías de recompra... son parte de ti, los has antropomorfizado ... serás con los faraones jaja te acompañarán, se irán contigo o alguien los cuidará por y para ti cuando faltes. Su inmenso valor se lo has dado al vivirlos. ..son parte de ti. Pocos libros tiene la suerte que tiene los tuyos. Pocos tan vividos.


    Un placer leerte como siempre.
    Muchos besos LAURA.

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    1. No sé que añadir porque tienes razón en todo lo que dices excepto en que no me importaría que tuvieran una segunda vida en las librerías de segunda mano.

      Tus comentarios siempre son interesantes, gracias María.

      Muchos Besos!!

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  11. En ese mercado de San Antonio, así se llamaba hace algo más de 40 años, me aficioné a la filatelia.

    En cuanto al destino de mis libros, lo tengo claro, algunos ya han ido a la biblioteca de un instituto, el resto aún los tengo en el garaje esperando que alguien se los lleve y no me quiera cobrar por llevárselos.

    Un abrazo, como vez por aquí estoy algo cansado y con algunos dolores en espalda, cosas de la vejez.

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    1. Uyyy!! No coincido en nada con lo que dices, pero cada cual es cada cual. No concibo una casa sin libros.

      Bueno, nada de vejez, eso se recupera con unos días de descanso.

      Abrazos!!

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  12. Tan vacíos o tan llenos... depende...
    Palabras y silencios... mundos, paisajes, historias, sueños, emociones... mil vidas... para perderse en ellas y (re)encontrarse con un@ mism@...

    No siempre, ni en todos los casos... pero suelo subrayar/anotar con lápiz para luego poder borrar si regalo/dono el libro y también suelo doblar un poco alguna que otra página o escribir en trocitos de papel o libretas/cuadernos pequeños reciclados...

    En el e-reader existen también estas posibilidades, salvo la de doblar las esquinas...
    Y así voy combinando libros en celulosa y lecturas en bits.

    Hasta hace algunos años firmaba y ponía la fecha de adquisición y/o lectura que solían coincidir, pero luego dejé de hacerlo... sin más.

    Tengo libros heredados, alguna que otra joyita, porque lo son en sí o por la carga sentimental que tienen para mí.
    De algunos seré incapaz nunca de desprenderme, pero con otros voy haciendo una selección en la medida que los leo y luego los dono a la biblioteca pública del pueblo donde vivo que, además, funciona en red: Si no tienen el libro que les regalas en alguna de las bibliotecas municipales, se lo quedan y si no es así, cuentan con una mesa donde se depositan y cualquiera que sienta interés por él, se lo puede quedar... una versión bibliotecaria del 'BookCrossing'.

    Enhorabuena!!!!
    La verdad es que no tenía duda de que lo conseguirías... y afortunada por esas amistades... ;)

    Ahora... ¡¡¡¡a disfrutar de la aventura!!!!

    Besos, petons, muxus y un cálido y fuerte abrazo!!

    :)

    PD: 'A mi padre'... flor y fragmento... ;))

    PD2: Leo por ahí arriba en los comentarios que estás con 'El Jilguero'... si te refieres al de 'Donna Tartt', lo tengo en espera...
    Alguien especial me habló de él... veremos...

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    1. Sí, totalmente absorbida por El jilguero. Leerlo y transportarlo me ha hecho añorar esas máquinas de leer tan ligeras.
      Mi padre fue alguien especial.

      Besos y buen fin de semana!!

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  13. Se me hace extraño que un lector diga que le gusta subrayar los libros y doblar sus páginas. A mí, que soy incapaz hasta de escribir en una libreta si sus tapas son un poco bonitas, aún más me cuesta "manchar" un libro con tinta o grafito, y doblar sus páginas... De todas formas, tal como lo explicas, comprendo en cierto modo tu punto de vista; cada cual tiene sus costumbres.
    ¡Qué bien que por fin la búsqueda haya dado resultados!
    Besos.

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    1. Sí, cada cual tiene sus costumbres. A mi me deja helada esa reverencia al libro físico y mira que amo los libros.

      Síiiiiii, una gozada encontrarlo.

      Besos!!

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  14. Si eres de las que manoseas los libros, los subrayas, doblas las esquinas..., en una palabra: los usas, entonces eres de las mías; o yo soy de los tuyos.
    Abrazos

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  15. Espero que no hagas lo mismo con los libros prestados de la biblioteca aunque imagino que preferirás comprarlos todos. Yo como he estado involucrado en la cuestión libresca te puede comentar hasta que punto es poco importante nuestra obsesión emocional por coleccionar de libros, casi siempre de bolsillo. Cuando te encuentras con un fondo importante donado por un particular y tienes que procesarlo, muchos de esos libros, aparte de su tremendo deterioro por formar parte de colecciones en rústica con encuardernaciones espantosas, son desechados porque están repetidos en todas partes y los tiene todo el mundo en sus estanterías.
    Hay un tabú con los libros parecido al que tenían nuestros padres cuando no nos dejaban tirar el pan porque era pecado. La edición electrónica va acabar con todo eso y los libros como los discos serán coleccionados como el que colecciona sellos u otros objetos materiales.
    Yo sé que ésto es muy duro y cuesta lo suyo pero al mismo tiempo me alegro de leer casi todo en formato electrónico, menos los comics y los libros ilustrados, y abandonar progresivamente el fetichismo del papel.
    Besos

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    1. No lo hago, ni con los de bibliotecas ni con los que me pasan las amistades. Si tuvieras las biblios que yo tengo aquí, no te quedaría otra que comprarlos. Ahora voy a hacer otra cosa, en lugar de buscar los libros que quiero, he empezado por la última letra y voy a ver que encuentro.

      ¿Fondo importante? Eso me es indiferente, mis libros son importantes para mi, no espero que lo sean para los demás, nunca he pensado que acaben en una biblioteca y ya he dicho que no me parece más que acaben en librerías de segunda mano.

      No me gusta nada ese futuro que auguras. Prefiero el papel, sobre la música... no me es tan vital y me da igual el formato aunque aún conservo discos.

      Y no capto lo del fetichismo, tabú... prejuzgas una relación que es exclusivamente emocional y de placer.

      Besos!!

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  16. No se si tengo manías, pero una de ellas es la de tengo que leer este y este otro, pero todavía estoy con este...y me han recomendado dos más......es decir....los que nunca leeré. Me lo tomo con calma y luego me mosqueo conmigo mismo de lo poco que leo....muy poco...que no paso de un par de ellos al mes, y en ocasiones uno solo.....es lo que hay....un abrazo

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    1. Esa manía me está volviendo loca, pero mis lecturas se han enriquecido mucho desde que tengo en cuenta recomendaciones de bloggers.

      Un abrazo!!

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  17. Yo lo que quisiera es tener más tiempo para leer. entre el trabajo, la casa los hijos, los problemas, el medio ambiente y las fiestas a veces necesito días de mas 24 horas. Es tambien mi pasión, tanto como escribir.

    Abrazos
    carlos

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    1. Carlos Alberto, comparto todas esas ocupaciones y hay momentos en que tengo poco tiempo para leer, pero en vacaciones aprovecho :))

      Abrazos!!

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  18. Te dije que ese libro te esperaba en algún lugar!
    Me alegro de que ya esté en tus manos.
    ; )

    Yo doblo alguna hoja que me ha llamado la atención por algún motivo.
    Y sí pongo la fecha y el nombre.
    Los cuido muchísimo,para mí son un tesoro.
    Ahora leo mucho en ipad.

    Buen finde y besos!

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    1. Síiii, es verdad que lo dijiste. Qué subidón cuando lo tuve entre las manos, jajajaja

      Para mi son también un tesoro, les tengo en mucha estima, la verdad. De momento no tengo ipad, ya veremos.

      Buena semana y abrazos!!

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  19. Una princesa besa un sapo y este se transforma en príncipe, príncipe que llega a ser sapo por los poderes de la magia de alguna bruja. Magia de la literatura y del arte que nos redime en su constante y perpetua posibilidad de metamorfosis. Sin duda este ejercicio en el ritmo y fluir de sucesivas catarsis será el que edificará las coordenadas lúdicas que llenarán hasta derramar de sentido y de infinito los bordes y totalidad de nuestra razón. Si la magia está en la simiente de estas sucesivas transformaciones válido es que el instrumento como objeto (el libro) que contiene al genio no salga indemne en nuestros rituales de evolución y de cuenta en sus marcas profundas de esa batalla por abandonar alguna crisálida, después de todo luego del amor es imposible que cualquier cama quede intacta y bien tendida.

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    1. Y yo me pregunto:

      ¿Cómo es posible que escribas de una forma tan poetizada aquello de que los libros como objetos siempre serán para los lectores objetos de emociones y amor?

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  20. La magia de la literatura mas sin embargo en lugar de incentivarnos a cerrar anillos más bien nos exhorta a abrirlos no sin antes haberlos repasado una y otra vez, total el círculo del príncipe y del sapo invita a otras ocurrencias como por ejemplo que sea la princesa una rana, y en lugar de bruja haya un brujo, las combinaciones pueden ser muchas hasta llegar a imaginar lo que puede pasar si una rana besa a un príncipe y este tenga la feliz oportunidad de convertirse en sapo. Son estos magníficos y maravillosos recursos con los que cuenta todo artista para dotarlo de la gracia del creador que modela dramas, sueños... y con ello modela nuestro sustrato humano de ser igualmente un creador tal cual como el mismo artista.

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    1. Y la magia de la literatura puede llevar a una lectora gobernada por la luna la siguiente pregunta:

      ¿Ese príncipe deseará pasar a ser rana (mejor que sapo) para acompañar a la rana amada? ¿Renunciará a su condición principesca para bajar a la charca con ella?

      :))

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  21. James Joyce fue como buen literato todo un maestro de la transformación y de la metamorfosis, recuerdo ese pasaje en la obra que ya estarás leyendo de las lavanderas lavando (purificando mediante la transformación) las ropas y el espíritu de la Sra ALP y del Sr. HCE, transformación de las huellas dejadas en las ropas de su vida cotidiana que las dos lavanderas van contando a medida que van limpiando las ropas en las corrientes del río Liffey a la altura de una región donde Wagner sitúa una escena de Tristán e Isolda, una vez borradas las acciones diarias de los dos protagonistas empieza a caer la noche, dimensión donde de verdad lo cotidiano llega a una de sus máximas metamorfosis, ¿a donde vamos cuando dormimos? la respuesta para las lavanderas no es precisamente la cama, una será un árbol, la otra será una piedra allí mismo en la orilla del río gracias a la magia de la noche. ¿Entonces en que nos transformamos cuando llega la noche? ¿Será ese el salto hacia nuestro próximo círculo o anillo que la posibilidad del destino nos puede deparar? o ¿regresaremos sin posibilidad alguna a nuestro eterno retorno de lo cotidiano? ¿Dejar la cama destendida, será un acto más de nuestra anodina cotidianidad que la limpieza borrará sin contemplaciones en la lengua de algunas lavanderas?................................
    Besos mi querida Luna.

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    1. No he comenzado a leerlo porque tengo dos pendientes de terminar y quiero entrar en él sin distracciones de ningún tipo. No falta mucho para empezarlo.

      Prometo cavilar sobre esas preguntas: la noche, dormir, la cama, el agua del río, lavar.............

      Besos mi querido Aristos!!

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  22. Yo soy muy feliz pensando en lo que va a ser de mis libros. Tengo dos bibliotecas diferentes: una, la relacionada con mi trabajo. Soy sociologa y politologa y todos mis libros de trabajo, que son muchos los que compro todos los años pasarán a mi hijo mayor que estudia Sociología. la segunda, biblioteca es la que más conocéis los blogueros, la de ficción, por así decirlo, y mi segundo hijo es aún más adicto que yo a los libros, así que mis libros son ya suyos además de los que yo misma he heredado.
    Tengo que reconocer que en su día lo que comentas me preocupaba, mis libros, mis cuadernos, mis notas... pero el tiempo ha ido aclarando para bien esa preocupación, jajaja

    Bs.

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    1. Qué suerte, tienes la solución que tranquiliza a cualquier persona que ama los libros.
      Sin embargo a mi no me genera preocupación, una vez que no esté en este mundo mis libros tendrán el destino que el azar resuelva, ya no estará en mis manos. Mis pensamientos iban sobre si debía dejar mi huella en ellos o no..... y la verdad es que he decidido seguir haciendo lo mismo que hasta ahora.

      Un abrazo!!

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  23. El aroma del viejo papel, algunas veces con marcas o incluso filiaciones completas, una tarjeta postal. Una receta y una chuleta de examen. Y las miradas si, las de antiguos ojos cansados de recorrer tantos senderos de ideas y sentimientos construidos con letras apiñadas. Esas son las cosas importantes que encuentro a veces en los libros de segunda mano. Testimonios de algún lector que cien años después sigue aún vivo en mi imaginación. Un beso.

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