PRIMERA LEY FUNDAMENTAL
"La primera Ley Fundamental de la estupidez humana afirma sin ambigüedad que:
Siempre e inevitablemente cada uno de nosotros subestima el número
de individuos estúpidos que circulan por el mundo.
A primera vista la afirmación puede parecer trivial, o más bien obvia, o poco generosa, o quizá las tres cosas a la vez. Sin embargo, un examen más atento revela de lleno la auténtica veracidad de esta afirmación. Considérese lo que sigue. Por muy alta que sea la estimación cuantitativa que uno haga de la estupidez humana, siempre quedan estúpidos, de un modo repetido y recurrente, debido a que:
a) personas que uno ha considerado racionales e inteligentes en el pasado se revelan después, de repente, inequívoca e irremediablemente estúpidas;
b) día a día, con una monotonía incesante, vemos cómo entorpecen y obstaculizan nuestra actividad individuos obstinadamente estúpidos, que parecen de improviso e inesperadamente en los lugares y en los momentos menos oportunos.
La Primera Ley Fundamental impide la atribución de un valor numérico a la fracción de personas estúpidas respecto del total de la población: cualquier estimación numérica resultaría ser una subestimación".
Carlo M. CIPOLLA
Las leyes fundamentales de la estupidez humana
Qué razón tiene CIPOLLA y qué grandes verdades encierran sus Leyes Fundamentales.
ResponderEliminarEvidentemente existen muchos seres humanos que no son estúpidos, pero, en ocasiones observando cómo nos comportamos los humanos casi se podría decir que los individuos no estúpidos son una especie en peligro de estinción.
Besosssssssssss
Vaya, que cierto. Nunca lo había pensado pero sí sufrido. Un libro muy interesante. ¿Es lo que lees ahora Laura?
ResponderEliminarBesos
Lo peor no es lo tontos que son sino lo bien situados que están a veces.
ResponderEliminar¡Mira que no ocurírseme ninguna gracieta con Cipolla!
Un abrazo
Laura, sabes!??, estaba preparando una entrada sobre lo mismo, qué casualidad. Las Leyes y reflexiones de Cipolla, verdades verdaderas, y la frase final la tenía también para mi entrada. Sinceramente como bien dice Nuria, hay mucha gente que no es estúpida, pero sí es cierto que el número de estúpidos aunque no muy numerosos, es mucho mas peligroso que de los considerados malos, al fin con un mal@ siempre se puede hablar y razonar, con un estúpid@ es imposible. Me ha encantado tu entrada, de verdad. CAda vez que percibo un estúpid@ cerca de mí huyo lo mas lejos posible y eso que por desgracia algun@s me tocan tan de cerca que no puedo evitar tener que pasar algún rato que otro con ell@s y reconozco que lo paso francamente mal, y eso sí, procuro estar en silencio, cosa muy rara en mi persona.
ResponderEliminarMe ha gustado mucho esta reflexión, y como dice Uno muchas veces lo peligroso es lo bien situados que están. Ainsss Señor, qué pena.
Por cierto al compañero UNo, la rima con Cipolla es bien fácil, Cipolla no come cebolla, porque no encuentra la olla.jejejejejjeejej
Muchos besos a tod@s
Qué interesante, y qué cierto, lo que no deja de ser un poco triste, y risible a la vez, confieso, porque de tanto darme de bruces con la estupidez humana, he optado por ver lo gracioso, porque o es eso, o me pondría a llorar, la verdad. Sin embargo, a veces pequeños actos estúpidos cometidos por personas que no merecen el poder que ostentan, son de terror.
ResponderEliminarUn beso.
Según el diccionario: ESTÚPIDO; Necio, falto de inteligencia.
ResponderEliminar---
Siempre había pensado que los considerados estúpidos eran gente con limitaciones psíquicas y/o económicas, y por tanto, sin oportunidad para ampliar conocimientos, y que también se les llamaba estúpidos porque hacen verdaderos esfuerzos intentando mejorar su intelecto y se meten en "jardines" que les vienen grandes.
Tanto en un caso como en otro, seran dignos de lástima ¿Noo?
Una entrada muy interesante, como siempre. Besos.
Tristemente cierto, Laura, te veo hoy un poco pesimista... A veces todos somos un poco estúpidos, todo hay que decirlo.
ResponderEliminarPetonetsssssssssssss
Por desgracia, Nuria, hay demasiados individuos estúpidos y Cipolla lo describe con un retintín que me encantó cuando lo leí.
ResponderEliminarBesossssss
HE OLVIDADO PONER EN EL POST QUE TENGO UN POST SOBRE EL LIBRO DE DONDE HE SACADO ESTE FRAGMENTO: si clicais en Carlo M. Cipolla, encontraréis el post sobre el interesante libro de divulgación de este economista e historiador, titulado:"Allegro ma non troppo"(1988).
ResponderEliminarCuanta razón la de Cipolla, además confirmable desde primera hora de la mañana en un día cualquiera al salir a la calle
ResponderEliminarMe gusta tu lectura
Un beso
Síiii, Rosalía, ya lo dice el autor, que más bien tendemos a subestimar el nº de estúpidos que hay...
ResponderEliminarEs un librito delicioso de pocas páginas con dos ensayos, el de la estupidez es uno, lo leí en junio y he dejado el enlace del comentario en el nombre del autor por si te interesa.
Un abrazo grande.
Uno, eso esa es la peor posibilidad: estúpidos y con poder...
ResponderEliminarAyy cuando estaba escribiendo el nombre del autor se me ha separado la Ci del resto de la palabra... jummmm.......qué hartón de reir... Mira Rose te da ideas al respecto.
Un abrazo grande.
Rose, dice mi amiga Salomé que no existen las casualidades, que siempre significan algo. Estas coincidencias me parece que indican un universo de ideas en las que coincidimos... Siento haberte chafado un poquito la entrada, pero el ensayo de Cipolla da para mucho, así que espero tu post.
ResponderEliminarYo también tiendo a huir y a entrar en un mutismo total y aislarme como si no fuera conmigo, esperando que no me llegue el efecto de la estupidez...
Jjejeje... a ver qué dice Uno...
Un abrazo grande.
Aglaia, es cierto, la peor unión es estupidez y poder... muy peligrosa. Ojalá pudieramos reirnos sin más porque no pudieran molestarnos ni herirnos.
ResponderEliminarGRACIAS DE NUEVO POR EL PREMIO... LO HE COLGADO EN EL LATERAL...
Un beso muy grande.
Laura, cielo....que no vengo todo lo que puedo porque estoy fatal de tiempo para mi. Como siempre me encanta leerte....y cierto es que hay mucho estúpido, o quizás es que sólo los inteligentes nos damos cuenta de que existen??? ó somos todos estúpidos en muchos momentos de la vida??? Ay Señor, necesito irme a vivir al mar y desde allí comunicarme con vosotros, desde una casita donde escuche el rumor de las olas, mi perrito Boly y eso sí, mi portátil. Un beso además de miles de estrellas de todo lo bueno.
ResponderEliminarSherezade
Isaura, en su significado original, es cierto, son dignos de lástima. Lo malo son los "otros", los que, por ejemplo, "entorpecen y obstaculizan nuestra actividad" y si tienen poder, pese a ser estúpidos, hmmm... mala unión...
ResponderEliminarGracias y un abrazo grande.
Dona, es verdad que nadie está libre de cometer alguna estupidez, pero líbrenos nuestra inteligencia de convertirnos en estupidos a tiempo completo...
ResponderEliminarUn abrazo grande y ptnssssss
Discúlpame Cipolla me da la risa, por el nombrecito...je,jeje... habla de categorías humanas; incautos, malvados...me gusta la descripción que hace de los inteligentes. Por cierto, hoy nos ha llegado el libro que recomendaste de Arancha Ceada. Estoy con lo tuyo churri...
ResponderEliminarOye, ahora que me fijo, me gustan mucho esas imágenes que has colocado a la derecha del blog (Cassandra Barney y Hope Gangloff), me recuerdan un poco a las mujeres de la Decadencia, pero sin ser decadentes (perdona el Off-Topic, pero me he dado cuenta ahora).
ResponderEliminarBona nittttttttttt
Laura,
ResponderEliminarleyéndote me vienen a la cabeza dos ideas:
la primera,es que tod@s sin excepción,como dice Dona Invisible,hemos pecado,o pecamos alguna vez de estupidez.
La segunda,es que nuestra percepción de la estupidez es muy subjetiva y voluble,porque de la misma manera que alguien que te pareció interesante,de pronto se torna estúpido,también limando viejos rencores y rencillas,alguien que te pareció estúpido,de pronto,vuelve a parecerte interesante y a ser objeto de tu atención incluso de tu admiración.
un abrazo
Este libro no lo he leído, pero Allegro ma non troppo me encantó, es genial. (Menos mal que de esto sí me acuerdo, jaja!)
ResponderEliminarYa se decía que el número de necios es infinito...
Besos
Sí, 40añera, por desgracia hay días que desde que ponemos el pie en la calle se conjuran las malas vibraciones para que se nos cruce la estupidez en nuestro camino... Lo mejor, cuando tal cosa ocurre, el mutismo.
ResponderEliminarUn abrazote libre de malas vibraciones.
Sherezade, cariño, tranquila... hay momentos en que el tiempo se encoje, a todas nos pasa.
ResponderEliminarNadie está libre de la estupidez, eso está claro, la inteligencia reside, creo, en ser conscientes de que las cometemos y no convertir la estupidez en una manera de ser y de vivir.... en ello estamos... hmmm... pues eso de la casita en la playa es un plan estupendo...
Yo te envio mis chispitas de cariño.
Es un libro estupendo y con gran sentido del humor.......la verdad que a mi me ha pasado lo mismo con el dichoso apellido xd...
ResponderEliminarA ver si os gustan los relatos de Arancha.
Un abrazo grandote.
Cómo me gusta que los hayas visto, Dona, me gustan mucho las dos, me parecen muy imaginativas y a mi me transmiten optimismo en la manera de representar a las mujeres con dos estilos diferentes.
ResponderEliminarGracias por estar atenta, compañera.
Un abrazo y molts ptnssssss!!
troyana, comparto las dos ideas, la primera creo que es un signo de que no somos tan estúpidas como para creer que siempre somos inteligentes (jejeje).
ResponderEliminarLa segunda, creo que nadie la había compartido. Si recuerdas había hablado de una amiga con la que tengo algún desencuentro originado por su novio, con el que no tengo buena sintonía en el trabajo... ¿recuerdas que lo comenté en un post? A veces le doy vueltas pensando si es que he estado ciega con mi amiga, cómo es que no veía "estupideces" que ahora veo... No es que estuviera ciega, me parece, sino que antes no les daba importancia y, ahora, con el desencuentro se me hacen menos aceptables... a ver si se vuelven las tornas....
Un abrazo grandeeee
Elvira, yo creo a pies juntillas a Einstein y a Forges...
ResponderEliminarCipolla tiene un gran sentido del humor en esta pequeña obra...
Un abrazo grande y, aunque nos afecte la desmemoria, que la inteligencia nos libre de la necedad...
Da risa de lo trágico que es... ay,si Laura Uve, demasiada estupidez circula por el planeta y esa estupidez dramáticamente genera secuelas muy negativas para la humanidad:ignorancia, violencia, egoísmo, intolerancia y así un sinnúmero de bobadas. La frase de Einstein es simplemente ¡genial!
ResponderEliminarDebo decir que todos/as caemos en la estupidez de tanto en tanto, pero lo atroz es cuando se es estúpido crónico y sin conciencia de la propia estupidez y lo más horrible cuando los que detentan el poder tienen doctorado en estupidez
Mis besos para ti!
Qué grande era Cipolla. Las inteligencias sutiles siempre tienen un gran sentido del humor, como era su caso.
ResponderEliminarLa clasificación en inteligentes, malvados, bondadosos y estúpidos siempre nos ha parecido tan divertida como... ¡en el fondo cierta!
Saludos, compañera.
JAJAJA, GRANDE CIPOLLA... no conocía esta ley fundamental pero estoy harto de ver ejemplos a mi alrededor.
ResponderEliminarUff, ¿y como saber si uno esta entre los estúpidos o los inteligentes? Laura, dime si hay algún capítulo que lo aclare.
Un abrazo
Sí, la verdad es que pensándolo bien, siempre he sobrestimado las competencias de los que me rodean y así me cunde el pelo. ¡Me he llevado cada chasco!
ResponderEliminarMuy buena cita.
Un beso, Laura.
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarCierto Eva, tragi-cómico, si no fuera tan serio lo que desencadena, nos haría reir, pero se nos congela la risa por los efectos negativos que mencionas y que se agravan en tiempos de crisis.
ResponderEliminarDe acuerdo en que de la estupidez nadie estamos libres, pero hacerlo profesión es grave, grave... si encima disponen de poder... simplemente letal.
Einstein... genial, claro.
Mi cariño para ti Eva.
Pdt: he eliminado el comentario anterior porque salía el tuyo también Eva, que siempre copio para tenerlo cerca.
Cierto Garito, conforme hago años valoro más el sentido del humor inteligente... Esa clasificación es divina, ire poniendo cositas...
ResponderEliminarUn abrazo grande.
JL, a ver si consigues el librito, es breve (adecuado para la paternidad responsable), si no es así el ensayo de la estupidez lo puedes encontrar en google...
ResponderEliminarNo tenemos la clave nunca, porque hasta los que son más inteligentes, hacen estupideces, lo inteligente es darse cuenta y procurar no repetirlo ¿no te parece?.
Un gran abrazo.
Pues sí querida Alice, cuantos chascos nos llevamos en la vida, sobre todo entre los que presuponemos que son inteligentes... hmmm... paciencia y lucidez para librarnos de la estupidez...
ResponderEliminarUn beso.
¡Has colgado nuestro premio! La V se lo merece.
ResponderEliminarMil besos wapa.
Síiiiiiiiiiiiiiiiiii.........., claro Rosalía.........¡¡GRACIAS DE NUEVO!!
ResponderEliminarMuacsssssss
Estoy totalmente de acuerdo con esa primera ley fundamental. Se subestima el número de estúpidos, y considero que por desgracia así será siendo.
ResponderEliminarTe diré que el comentario que has dejado en mi blog me hizo gracias, pues yo pensaba firmar la entrada diciendo: "arrepentirse en de necios, rectificar es de sabios", y vienes tu y comienzas así tu comentario. Si no lo hice es porque me pareció "pretencioso"
Mil gracias por estar ahí
Un beso
Mercedes
Bienvenida otra vez Mercedes. Qué curioso, sí... pensamos lo mismito... yo también creo que un blog sin comentarios pierde la gracia, a mi lo que me gusta es interactuar. Cierto que ocupa tiempo, pero confía en las personas que te siguen, en el sentido de que si no comentas es porque no puedes, no es necesario contestar ni comentar todo.
ResponderEliminarNo caigamos en la estupidez de crearnos obligaciones con lo que es un placer, que dure como tal.
Un abrazo muy grande, te encontraba a faltar.