Había leído a Böll hacía
años, tan solo su obra más conocida, Opiniones
de un payaso. Era un autor que tenía olvidado hasta que en la revista Turia apareció un dossier (lo llaman
“Cartapacio”) sobre este escritor. Me gustó tanto la lectura de los artículos recogidos
en dicha revista que decidí leer esta obra publicada en 1974 (y tengo la
intención de releer Opiniones de un
payaso).
La obra es breve, 144
páginas, y un epílogo que incorpora diez páginas más. Su título hace referencia
a la protagonista de esta novela y a la pérdida de su reputación sobre todo
como consecuencia de la prensa.
Heinrich Böll nació en
Colonia el día 21 de diciembre de 1917. Corrían malos tiempos en Alemania, que
se encontraba al borde de la derrota en la I Guerra Mundial. Su padre tenía un
taller de ebanistería y Böll creció en un ambiente muy católico, con un claro
componente antiprusiano y antimilitarista que marcará su personalidad y su
literatura. El estallido de la II Guerra Mundial impidió que Böll se
incorporara a la Universidad puesto que tuvo que incorporarse a filas.
Finalizada la guerra Böll, que nunca había simpatizado con el nazismo, era un
superviviente sin estudios, sin profesión, sin bienes de fortuna. Tardó dos
años en recobrar la salud y cuando logró recuperarse, estaba decidida su
vocación literaria. Sus primeros textos son relatos vinculados temáticamente a
las privaciones y la miseria de la recién comenzada postguerra, en una ciudad
cubierta de polvo y casas derruidas como Colonia. Es la llamada “literatura de
los escombros” de la que Böll será uno de sus más destacados representantes.
Su compromiso con la
izquierda, primero con los socialdemócratas y en los años ochenta con los
Verdes, y su crítica al partido demócrata-cristiano le acarrearon una creciente
hostilidad por parte de los medios de prensa del consorcio Springer. Y esta
hostilidad será la base de la novela, El
honor perdido de Katharina Blum.
Böll se enfrentó al
consorcio Springer que inició, a principios de la década de 1970, una campaña
para acabar con el movimiento de extrema izquierda dirigido por Andreas Baader
y Ulrike Meinhof. Acuso a la prensa de prejuzgar a ambos utilizando su
gran influencia sobre la opinión pública y, por ello sufrió una dura campaña de
críticas contra su persona y su ideología. En El honor perdido de Katharina Blum, el autor demuestra el poder que
tiene la palabra para destruir la honorabilidad y la reputación de una persona.
El tema central de la novela lo forma la relación de la joven Katharina, que
hasta ese momento se ha caracterizado por su apoliticismo, laboriosidad y
corrección, con un joven vigilado por la policía.
Si algo le impidió al propio Blorna ser una de esas visitas (…) no fue (…) el respeto a su esposa sino el respeto a Katharina. Sí, respeto; casi veneración. Veneración afectuosa por su maldita inocencia, y más, más que inocencia… No sabía cómo expresarlo. Seguramente, era aquella reserva cordial de Katharina y (…) la manera como Katharina había reorganizado su existencia deteriorada (92-93).
La joven empieza a ser
vigilada también y la prensa amarilla publica varios artículos que supondrán un
duro golpe para su reputación, provocando que Katharina lleve a cabo una acción
que no desvelaré aquí.
La reflexión sobre la
destrucción de la vida privada por la intromisión de la prensa y la indefensión
de la ciudadanía frente a ella, se basaba en la propia experiencia del autor,
que sufrió durante muchos años, pese a ser un escritor de éxito con la
concesión del Nobel en 1972. Böll escribe, pues, sobre lo que conoce y lo hace
con total libertad, dos aspectos que definen su literatura y para los que
combina humildad y valentía. ¿Quién se atreve hoy a escribir una novela que
suponga lo que supuso El honor perdido de
Katharina Blum?
Y ese es un maldito hecho que al DIARIO. Al que solo le gustan sus propios crímenes y que falsea cualquier cosa, le desagrada y no lo refleja. Dicho DIARIO está tan empapado de mentira que incluso un hecho no falseado, viniendo de él parecería falso. En pocas palabras: embrutece hasta la verdad cuando la recoge de forma “verídica” (del Epílogo, p. 149).
Pero además en esta novela
se muestra la intimidación que existía en Alemania por cuestiones políticas a
finales de los años sesenta y principio de los setenta, en plena guerra fría.
Un posicionamiento crítico que requería una gran valentía por parte del
escritor para resistir los duros ataques que sufrió.
Böll es un escritor
inconformista y humanista (con una base católica que también puso en cuestión)
que escribió con sutil ironía y con mucho humor, aspectos que dotaron a su
literatura de una calidad que no podemos dejar en el olvido.
Una gran laguna, Laura. También leeré Opiniones de un payaso porque no lo he leído, por aquí anda, por casa y nunca me he decidido. Conocer la figura de Böll me ha dado ganas, sobre todo porque creo que puedo intuir qué hay detrás de eso término "literatura de los escombros" Humanismo, inconformismo en un tema, y ya paso a este libro que me da que está más en vigencia que nunca. Pero como te digo, empiezo con "Opiniones de un payaso" Un beso :)
ResponderEliminarBöll batalló mucho al finalizar la II Guerra Mundial para que los alemanes/as hicieran una reflexión en profundidaz respecto al nazismo, el holocausto y todo lo que conllevó. No estaba muy contento con el resultado y eso impregna su literatura y su posición política activa.
EliminarEl honor perdido... es una obra, quizás, menor respecto a Opiniones de un payaso, pero muy interesante para comprender el poder de la palabra en manos de los grandes consorcios de comunicación.
Abrazos!!
Llevo tiempo queriendo leer a Böll, tengo “Opiniones de un payaso” esperando en mis estanterías, y por esos designios en torno a ciertos libros, que nadie acierta a descifrar, ahí sigue esperando.
ResponderEliminarYo era pequeñito, pero recuerdo el eco mediático de la RAF y, sobre todo, la estela que dejó tras de sí Ulrike Meinhof, mujer que sedució y fascinó a la juventud izquierdista de Europa y América Latina.
Me interesa mucho el trasfondo de la historia, el denodado intento de los mass media para influir en la opinión pública con el objetivo de aupar o denostar a una persona relevante. A pesar de que Klapper, famoso sociólogo de la comunicación, no atribuía a los medios el poder de cambiar opiniones, solo de reforzarlas. Visto lo que sucede aquí con el voto me otorgo el beneficio de la duda. Me resulta muy atractivo que Böll, un escritor comprometido políticamente, inconformista como bien dices, aborde esta cuestión a través de la literatura, en ensayo ya se ha escrito mucho.
Un abrazo amiga y encantado de estar por tu “casa” de nuevo, después de mi periplo peruano, ¡Ya estamos aquí!
Paco, ¡¡qué alegría que estés de regreso!! Seguro que has vuelto con la "mochila" llena de buenas experiencias, llena de alegrías y llena de emociones.
EliminarEl compromiso en la defensa de Andreas Baader y Ulrike Meinhof sin compartir su ideología me parece admirable. El acoso que sufrió incluso siendo Nobel me parece que indica hasta que punto los grandes grupos de comunicación no perdonan.
No he leído a Klapper pero mi modesta opinión es que los medios pueden ejercer una influencia decisiva si están unidos en un objetivo común y con un inspirador poderosos, ejemplos hay muchos y en Cataluña lo estoy contemplando con estupor en directo. También el acoso que sufren los que se desvían del discurso dominante.
Abrazos!!
Hola Uto. Conocía a Böll solo de nombre, pero no su obra. Y sí que es importante la presión de los medios para concar la historía y hasta para "hacerla". Yo ya no creo que exista tal cosa como un "periodismo independiente", y en tiempos de la guerra fría, seguramente que menos. Y para difamar y destruir una reputación... La gente de a pie no cree que esto sea posible, que tamaña manipulación sea posible en instituciones tan añejas y veneradas. Pero se conoce que (el ejemplo claro es USA, el que yo conozco) determinados diarios pertenecen a determinados grupos de poder. De allí en más... La libertad de prensa se exige de puertas afuera, pero puertas adentro hay una linea de pensamiento, con amigos y enemigos. Si te gusta, te quedas. Por eso es que han nacido y crecido los periodistas con blogs propios. Que también tendrán sus afinidades y presiones, pero me parecen una mejora respecto de los grupos monolíticos.
ResponderEliminarSaludos y gracias por este libro que pinta interesante. Saludos
No veo TV desde hace años, no leo los periódicos excepto alguna vez la sección cultural y la radio que me encantaba, he dejado de escucharla. ¿Cómo me informo? Busco en Internet aquellos periódicos que considero más independientes, en realidad podría decir que no estoy muy bien informada. Sin embargo no me considero desinformada. Parece un galimatías ¿no?
EliminarNo me fío de la información que dan los medios de comunicación, así que opté por ser una desinformada voluntaria.
Esta novela refleja el inmenso poder de la prensa para difamar y para mentir.
Salud y un abrazo!!
Una época difícil, una vida difícil... Y una reseña de diez que me deja con ganas de descubrir de una vez a este autor. Tendré que cotillear en la biblio, a ver qué me encuentro.
ResponderEliminarBesotes!!!
Graciasss!! Eres muy generosa y muy amable.
EliminarEs cierto, una época muy difícil que vino detrás de otra más difícil.
Besos!!
Muy interesante,llevo tiempo queriendo leer a Böll.a ver si compagino todo lo que tengo entre manos, que no es poco.
ResponderEliminarUn beso
El arte de compaginar lecturas no es nada sencillo. Yo también estoy en ese club.
EliminarAbrazos!!
Otro autor desconocido y otra obra que pasa a dilatar la nota de los pendientes, cada uno de los libros que reseñas, constituye un acierto pleno, bien por el tema que trata, bien por su estilo, lo cual tiene imprevistas consecuencias pues ofrece interesantes y enriquecedoras opciones. Un beso.
ResponderEliminarQué amable eres Carlos, muchas muchas gracias :)))
EliminarEspero que te guste este escritor tan combativo.
Besos!!
ResponderEliminarNo conocía a este autor, ni creo haber oído/leído sobre él.
El poder de los 'medios de... ¿comunicación?'... para crear o destruir...
Un tema interesante y que da para mucho, pero mi lista de pdtes es larga y no 'me llama' ahora mismo.
Gracias de todas formas por el 'descubrimiento'.
Buen fin de semana ya a medias, aunque con una hora más de regalo... ;)
Petonets y cálido abrazo!!
Quizás en otro momento encuentre su hueco y se te cuele en esa lista, merece la pena.
EliminarYa ves, la respuesta llega con la semana ya empezada, así que mis mejores deseos para afrontarla y encontrar algo cada día que nos regale una brizna de alegría (felicidad suena demasiado atrevido ¿no?).
Abrazos y dos sonoros besos!!
No he leído nada del autor pero le pondré remedio, sobre porque haces hagas hincapié en que no lo dejamos pasar por alto. He visto algún que otro título suyo pero nunca me había decidido, empezaré por este que parece bastante representativo.
ResponderEliminarGracias por la semblanza, además de introducción me ha servido para hacerme a la idea del tipo de tetxos.
Abrazos
A ver si te gusta. Es un escritor que pasó de una época de gran éxito en los años ochenta a casi el olvido, creo que no lo merece, su literatura sigue siendo interesante por los temas que trata y también por su estilo tan particular.
EliminarAbrazos!!
Veamos...
ResponderEliminarBeso
Escueto :))
EliminarAbrazos!!
Queda claro. El poder de la prensa, para hacer y deshacer reputaciones, es omnímodo. Con mayor, o menor sutileza, siempre se muestra a nuestros ojos. Pero... ¿quién controla la prensa? Sí. Queda claro. Siempre estamos en sus manos.
Me gustan tus reseñas. Lo sabes.
Un abrazo
· LMA · & · CR ·
Habrá que intentar plantarle cara, en este sentido Böll es un referente por su rebeldía, por ir contracorriente y seguir su conciencia.
EliminarGracias!!
Abrazos!!
Vaya! No imaginaba que la temática del libro fuera a ser de tan rabiosa actualidad... Me sorprende y me gusta, así que me lo anoto. Del autor me han recomendado muchísimo Opiniones de un payaso, y pensaba empezar a introducirme en su prosa por ahí. 1beso!
ResponderEliminarOpiniones de un payaso es su obra más conocida y tengo intención de releerla, sin embargo esta Khatarina Blum es una novela muy interesante y recomendable para acercarse al autor.
EliminarBesos!!
Ay, has hecho que me entren ganas de releer a este hombre... Creo que voy a animarme a hacerlo con esta novela...
ResponderEliminarQue tiempos vivio este autor, amiga
Un abrazo y el deseo de una semana feliz
Seguro que encontrarás fragmentos para maridar con alguna de tus fotografías.
EliminarEs verdad, que tiempos tan duros, una postguerra en una Alemania derrotada y convertida en paradigma de la guerra fría no debió ser fácil para escritores de izquierdas como Böll.
Un abrazo y mis mejores deseos para esta semana.
Menuda descripción del autor...sinceramente, aunque reseñaste sobre él, ahora al leerte, sumo ganas a conocer más sobre lo que escribe. El libro me interesa. Así que tomo nota de él y más adelante, de seguro, libro, autor y yo nos encontraremos...
ResponderEliminarGracias por estas deliciosas reseñas...las echaba de menos comentar.
Un abrazo y feliz día
Me alegra mucho que te haya motivado la reseña para encontrarte con este escritor, creo que le sacaras jugo literario.
EliminarGracias a ti por tus palabras.
Abrazos y feliz día!!
Creo recordar que algún libro más de Böll, aparte de "Opiniones de un payaso", he leído, pero el único recuerdo (y por algo será) es ese, el de "Opiniones de un payaso". El que comentas no lo conocía, pero lo que cuentas de él se me hace muy reconocible, reconocible al Böll que tengo en mi mente como lectora.
ResponderEliminarUn abrazo
Es una novela que me ha parecido muy interesante por su actualidad, el poder de los medios de comunicación no ha hecho sino crecer y esta historia lo explica de maravilla.
EliminarAbrazos!!
Leo con beneplácito que al fin has vuelto a las letras de Böll, como me habías avisado hace un par de años atrás con motivo de la reseña de este mismo libro. A mi me ha parecido un libro magnífico para abrir los ojos, sobre todo a cómo la prensa puede manipular los hechos de manera de beneficiar o lapidar a cualquier ciudadano.
ResponderEliminarYo escribí mis líneas impulsado por lo que estaba ocurriendo entre gobierno y prensa de mi país en ese entonces. Las tuyas amplían y complementan aquellas.
Es una alegría doble saber que coincidimos, entonces.
Un gran abrazo!
¿Sabes que no lo recuerdo? Sino lo hubiera mencionado, debió ser aquello que digo, a veces, de que lo dejo en mi nube particular (pero no lo anoto). Cuando vaya por tu casa la buscaré para ver esa coincidencia que por repetida no me es menos agradable.
EliminarSer conscientes de que estamos en sus manos es algo terrorífico, que el propio Böll con su fama lo sufriera, aun me deja más asombrada.
Abrazos!!
Este asunto que tratas en el fondo de esta entrada LAURA, me aterra. No somos conscientes de hasta que punto nos manipulan y mediatizan las informaciones periodísticas y de todo tipo que recibimos sin tener ninguna constancia de su veracidad u objetividad. Opinamos sobre opiniones preconizadas que hacemos nuestras defendiéndolas a capa y espada sin tener en cuenta que poquísimas veces se refieren a verdades objetivas. Me pone los pelos como escarpias el posicionamiento que adopta la gente por ejemplo ante sentencias judiciales de las que solo recibimos un sesgo final sin contenido real de nada y todo el mundo califica alegremente de justa o injusta, no digamos los juicios paralelos previos a sentencia, terrible!!! la prensa es el cuarto poder y yo diría que directa o indirectamente la información en general es, el PODER.
ResponderEliminarUn beso muy grande LAURA... del libro y autor por desconocidos no te digo nada, solo mil gracias!
Todo lo que señalas lo sufrió el propio escritor y queda terroríficamente recogido en esta breve novela, seguro que si la lees verás reflejados tus argumentos con los que estoy totalmente de acuerdo. Como decía a otro comentarista, ese control e influencia no ha hecho sino incrementarse desde la época de la que habla Böll.
EliminarGracias a ti y un fuerte abrazo!!
Un amigo mío siempre me recomienda a este autor, y tengo muchas ganas de leer esta novela. Y también de ver la adaptación cinematográfica. El tema me ha recordado un poco a la obra de teatro de Ronald Hardwood, Tomar partido, cuyo protagonista también es alemán y fue un caso real ;) No sé si la conocerás.
ResponderEliminar¡Un abrazo!
No la conozco, pero voy a ver que encuentro sobre ella. Haz caso a tu amigo, es un autor digno de ser leído.
EliminarAbrazos!!
Muy bueno el escritor que presentas, humor y literatura.
ResponderEliminarMe alegra que te haya interesado.
EliminarUn gran libro y mejor autor, aunque soy una clásica y me quedo con sus Opiniones de un payaso.
ResponderEliminarBesos
Tengo que releerlo, hace tanto que lo hice que ahora no podría decidirme por uno de los dos.
EliminarBesos!!
Nunca te he dicho, que me gusta el dibujo de tu perfil..muy original..un saludo desde Murcia...
ResponderEliminarSin duda, un escritor completo. No sólo le interesa la forma, sino el contenido. Poniendo, además, la carne en el asador.
ResponderEliminarAtravesar una guerra no es fútil. Te permite (con un costo inmenso) ser como eres.
Abrazos.
Si algo destaca de Böll es su compromiso social y no esconderse en temas complicados. Estoy de acuerdo con lo que dices, tanto con que es un escritor bastante completo (y sin alharacas añadiría yo) y que la experiencia lo marcó (ser de izquierdas y combatir con el ejército alemán no tuvo que ser fácil). Debía tener muchassss contradicciones y problemas de conciencia, pese a ello nunca se escondió.
EliminarAbrazos!!
Tema interesante el del poder de la prensa. Siempre me ha chirriado esa idea del periodismo como garante de la libertad y los periodistas como ángeles de la guarda de la democracia. Como si no fueran en el fondo vulgares empresas con inconfesables intereses.
ResponderEliminarHace tiempo que no leo nada de Böll, esta novela es una buena excusa.
Saludos!!
De acuerdo, chafardero, el papel de la prensa está muy condicionado por los dueños de estos medios de comunicación. Para mi, no son de fiar.
EliminarSalud-os!!
A mí me pasa lo contrario: leí este libro hace unos años y tengo pendiente "Opiniones de un payaso".
ResponderEliminarAbrazo!
Habrá que leerlo (yo releerlo) que dicen que es su obra más redonda.
EliminarAbrazo!!
Me encanta este escritor, es brillante, y justo antes del verano releí "Opiniones de un payaso" me siguió gustando como la primera vez, aunque quizá esa obsesión con la religión, ahora que yo ando tan apartada de ella, me abrumaba en algunos momentos.
ResponderEliminar"El honor perdido de Katharina Blum" la leí hace mucho tiempo y me llegó al corazón, creo que la temática sigue estando muy actual, aunque ahora sería mucho más rápido hundir a alguien utilizando las redes sociales, que pueden ser una apisonadora que deje "tu honor" en manos de unas caníbales incultos y desbocados.
Tengo pendiente "Diario de un Irlandés" me la han recomendado, aunque no es para turistas, pues está escrita en los años 50 y además el escritor ya advierte:
“Esta Irlanda existe, pero el autor no se hace responsable si alguien va allí y no la encuentra”.
Como siempre que me paso por aquí, me voy con las ganas de tener otra vida sólo para leer todo lo que me gustaría.
Un beso,
Necesito releer Opiniones de un payaso, que tengo en una edición de letra pequeña de Seix Barral.
EliminarEs verdad lo que dices, en la era virtual lo llaman "tormenta de mierda", habla de ello Byung-Chul Han y da terror.
No he leído ese Diario de un irlandés, pero desde que viajé a Irlanda me interesa mucho este país que es especial, desde luego.
A veces me agobio cuando veo que no leo todo lo que quiero, pero luego recapacito y pienso que hay que leer con tranquilidad y disfrutar cada letra, cada página...
Un beso!!