Una novela sobre la Iª Guerra Mundial
Fue
publicada en vísperas de la conmemoración del centenario de la Gran Guerra en
1913 y traducida al español en pleno centenario. No quiero afirmar que se
hiciera intencionalmente pero sí oportunamente.
La
novela trata de la inmediata postguerra, se divide en tres capítulos (noviembre
de 1918, noviembre de 1919, marzo de 1920) y un epílogo. La narración arranca
en los últimos días de la guerra cuando un oficial, d’Aulnay-Pradelle, ordena
una absurda ofensiva en la que mueren algunos soldados innecesariamente y
quedan heridos otros como es el caso de Albert Maillard y, especialmente,
Édouard Péricourt. Estos tres personajes quedaran unidos por las
circunstancias, especialmente los dos soldados, ya que Albert cree que le debe
la vida a Édouard.
La
novela trata, por tanto, de la postguerra más que de la guerra.
Albert Maillard y Édouard
Péricourt
Estos
dos personajes son los protagonistas de la novela. Dos jóvenes envejecidos con
rapidez por influencia de la guerra que compartían la dura vida de las
trincheras sin apenas conocerse; dos jóvenes de origen social diferente (Albert
de origen humilde y Édouard de familia rica) pero igualados por la guerra; dos soldados
desmovilizados que sufren la miseria de la postguerra y sobreviven como pueden.
En el fondo, Albert se apuntó a una guerra stendhaliana y se encontró con una prosaica y salvaje matanza que causó mil muertos diarios durante cincuenta meses (25).
Albert
y Édouard protagonizan la novela, pero es la época la que da vigor a la
historia. Una época, la de la belle
époque, que lo fue para quienes supieron aprovechar las ventajas del fin de
la guerra y especular, utilizar las influencias y las amistades en beneficio
propio como es el caso de d’Aulnay-Pradelle. En cambio, quienes habían
sobrevivido tras afrontar la guerra y las heridas físicas y psicológicas,
sufrieron el olvido, la miseria y las dificultades de adaptación a los tiempos
de la paz.
Albert lamentaba que el gobierno, que para frenar la inflación había instituido un “vestuario oficial” a ciento diez francos, no hubiera creado también una “ampolla nacional” de morfina a cinco. O el “pan nacional”, el “carbón nacional”, el “calzado nacional”, el “alquiler nacional” e incluso el “empleo nacional”. Se preguntaba si no era con ese tipo de ideas como uno se convertía en bolchevique (150).
La
novela narra, a través del intento de tomar la revancha de ambos protagonistas,
la personalidad de ambos jóvenes-viejos, sus entornos sociales, sus problemas y
sus momentos de felicidad, los avatares políticos y familiares en que se ven
envueltos aunque indirectamente y los traumas y secuelas de la guerra.
La novela cuenta con numerosas
virtudes
Bien
escrita, Pierre Lemaitre consigue vincular con soltura varias historias que se
entremezclan sin llegar a perder la pareja, Albert y Édouard, el protagonismo
de la historia.
Bien
contextualizada, el autor es capaz de pintar un fresco de la población
francesa, especialmente parisina, en la dura postguerra que siguió a la carnicería
que significó la guerra entre 1914 y 1918.
Bien
caracterizada la psicología de los personajes que van acompañando y desfilando
al lado de Albert y Édouard (de hecho el autor ejerció varios años como
psicólogo).
Y sin embargo, mis
sensaciones son contradictorias
Percibiendo
las bondades de la novela, no puedo dejar de apuntar que en gran parte de la
novela, falta emoción, empatía hacia sus personajes, calidez al presentarnos a
esos dos exsoldados maltratados durante la guerra y olvidados en la postguerra.
Esa emoción existe en la última parte de la novela, las últimas cien o ciento
cincuenta páginas.
Édouard
acaba siendo un personaje estrafalario y dramático, anulado por su pérdida del
habla, que pierde su personalidad hasta el punto de no querer vivir. La
tragedia que arrastra Édouard, nos la cuenta su padre, que nos irá dando pistas
sobre las razones por las que no desea volver a casa pese a la riqueza familiar.
Sin embargo, se quedan en el camino algunos aspectos que deberían haber tenido
su protagonismo como su supuesta homosexualidad.
Una frase:
Hasta las mayores alegrías dejan un poso de tristeza. En toda experiencia hay siempre un sentimiento de carencia (236).
El balance es positivo sin
entusiasmo.
Parece mentira, pero no he leído a Lemaitre. Tal vez por esa alergia que me provocan los escaparates. Como suele suceder, en el momentos menos pensado cae en mis manos.
ResponderEliminarAbrazos.
Me parece un buen escritor después de leer esta obra pese a que no es redonda. me parece un escritor a seguir y ver cómo evoluciona.
EliminarAbrazos!!
Mi parecer va en la misma línea que ha hecho lavelablanca, los grandes lanzamientos comerciales en envoltorio literario, salvo rarísimas excepciones, me producen cierta resistencia, será porque se inmiscuyen en la vida lectora de uno de forma machacona y un tanto descarada.
ResponderEliminarPrefiero que se vaya apagando ese ruido atronador... y luego ya veremos.
En tu conclusión final hay para mí un valor fundamental, el entusiasmo, una lectura que no me lo provoque se convierte en un mero acto rutinario... y de esos ya voy sobrado.
Por lo demás, una reseña reveladora y magníficamente planteada, como es habitual en ti.
Abrazos Laura!!
Estoy de acuerdo con tu criterio, no sé si es un gran lanzamiento comercial eh, lo que sí es cierto es que aprovechó, quizás, la coyuntura de las celebraciones, ocurrirá lo mismo este año con la revolución rusa. En la marabunta siempre puede haber algo interesante.
EliminarSoy difícil de entusiasmar, así que no sé si en ese sentido mi entusiasmo sea un buen criterio ;) Desde luego una lectura rutinaria, la fulmino. Alguna prueba ha habido en este espacio.
Gracias por tus palabras amables, Paco.
Un fuerte abrazo!!
De Lemaitre he leído la serie policíaca con el inspector Verhoeven y este que comentas, la serie negra formada por los libros: "Irene", "Alex", "Rosy&John" y "Camille" me encantaron el "nos vemos allá arriba" coincido contigo.
ResponderEliminar¡¡Abrazos!!
Igual me animo con la serie negra, aunque últimamente leo poca novela negra y tengo muchooo acumulado.
EliminarAbrazos!!
De este autor sólo he leído Irene, que fue de menos a más. Me costó entrar en la novela. Pero luego terminó gustándome bastante. Y éste lo tenía apuntado, y no lo descarto, pero voy a bajar mis expectativas, que va a ser mejor.
ResponderEliminarBesotes!!!
Parece que el autor ha tenido más difusión en el género negro, así que tendré que leer algo porque es un género que me encanta.
EliminarBesos!!
Estoy conociendo a Lemaitre por sus novelas negras, y como su narración me gusta, quisiera conocerlo en sus otros géneros. De todas formas antes de ésta leeré "Tres días y una vida" que la tengo a mano pues me la ha dejado una amiga.
ResponderEliminarUn abrazo
Muchos comentarios, por lo que voy leyendo, coinciden en que es más conocido por el género de novela negra y la opinión parece positiva.
EliminarUn abrazo!!
Hola Laura
ResponderEliminarMe ha dejado dudando tu reseña, porque pensaba que Lemaitre era escritor de novela negra, Emilio Manuel me ha resuelto la duda. Que tampoco es algo especial, pero me ha dejado dudando. EL propio Simenon, ávido -y muy prolífico- escritor de novelas policíaca, tiene una buena producción de novela de todo tipo, alguna -obviando las de Maigret al que le guste- de prestigio entre muchos lectores (EL tren, o el hombre que miraba pasar los trenes ,entre otras) O tengo una amigo que defiende que los mejores libros de Mankell son las que no son novela negra... Cada uno tiene sus gustos...
En cuanto a esta, si a tú no le das un aprobado total, dudo de su adquisición, y ya conoces mis problemas de espacio librero .):)El tema del libro me recuerda de alguna manera, aunque no tiene nada que ver a una película francesa titulada "largo domingo de noviazgo", no se parece en nada, es de la primera guerra mundial, pero aún así me recuerda, ajjaja no me hagas caso, cosas mías jaja-
un abrazo
cuídate
Veamos, yo soy una defensora de la novela negra, ya lo sabes. me parece que solo hay buena y mala literatura, el género es un añadido. Curiosamente he leído poco a Simenon, me gusta más la negra norteamericana, he leído también europea y poca española, manías mías. A Mankell lo he leído mucho, lo conocí por sus novelas negras y he leído también sus otras obras, unas me gustaron más que otras.
EliminarEl aprobado lo tiene Lemaitre, y sobrado, lo que no le doy es el notable de momento, pero me gusta cómo escribe y la historia es original.
Como no he visto la peli, me quedo in albis.
Abrazos!!
No sé yo si me apetece o no, tu reseña me ha dejado con la duda... Bueno, tengo unos cuantos en espera, así que...
ResponderEliminarEsa es nuestra deseada condena, la cantidad de libros que siempre tenemos en espera (y pese a ello, compramos más).
EliminarLo interesante es que la trama no se centre solo en el conflicto bélico, sino que siga a los personajes después, manejando lo que sin duda es el desarrollo del trauma posbélico. Ahí veo un gran trabajo de reconstrucción psicológica y me gusta. Pero si lo hace en un tono frío y distante, con poca empatía, la descarto casi por completo.
ResponderEliminarSupongo que en el año que comenzamos empezará a aparecer una literatura inspirada en la revolución rusa, ya que las editoriales suelen aprovechar las efemérides. Pero con obras como Doctor Zhivago o La madre, entre otras, a ver quién es el valiente que se atreve a escribir sobre el tema a día de hoy.
Un abrazo.
No es la típica novela que pretende provocar una corriente de simpatía inmediata hacia las víctimas ya que estas son, muchas veces, mezquinas y egoístas también. Desde ese punto de vista cuesta empatizar con ellas. Los personajes están muy bien construidos desde el punto de vista psicológico.
EliminarConcuerdo contigo que nos espera una avalancha de obras sobre la revolución rusa. Y estoy de acuerdo en que es difícil superar obras como las que mencionas (tenía pensado releer Doctor Zhivago.
Un abrazo!!
A mí sí me gustó y me transmitió este libro, que es el único que he leído hasta ahora del autor, pero quiero leer más. Me sorprendió su forma de escribir desde el principio. Recuerdo lo maravillada que estaba con las primeras páginas y, aunque el libro tiene sus altibajos, el balance final fue positivo.
ResponderEliminarBesos.
Yo también saco un balance positivo, la novela tiene aspectos positivos y me apetece seguir leyendo obras del autor, pero no me parece una novela redonda. Me resulta muy original que hable de la guerra desde la postguerra y desde dos personajes tan peculiares.
EliminarBesos!!
No he leído nada de él, pero no por nada en especial, nunca he tenido oportunidad o no la he aprovechado ; ) La manera en la que se publicitan los libros y su número de ventas, para mi no supone nada, ni a favor, ni en contra, si acaso solo una forma de saber que existen. Me ocurre lo mismo con la música, siempre es una buena noticia conocer la obra de quien sea, por eso meencantan tus reseñas, además de objetivas, argumentadas y detalladas nos das a conocer en general maravillas que seguramente de otra forma no me sería posible conocer, por eso te lo agradezco tanto siempre, es de corazón, haces una labor informativa extraordinaria LAURA.
ResponderEliminarSin embargo esta obra para mi cuenta con un handicap que sé que por el contrario para ti es un aliciente, el tema ... guerra. Tristemente creo que he llegado al punto de saturación absoluto sobre este asunto, supongo que por el ambiente general que nos rodea. Como si en plena depresión uno no dejara de leer sobre tristezas del alma. Irremediablemente el final de ese camino sería el suicidio ; )
No obstante me parece muy interesante el marco histórico donde se desarrolla, aunque la dualidad soldado/hombre/ personajes rico-pobre me parece muy manida, sea como sea, lo dicho, como siempre mil gracias y un placer !
Muchos besos y feliz domingo LAURA
Gracias por lo que me dices María, eres un sol.
EliminarPero no sé de dónde sacas que me gusten las novelas de guerra y, en concreto, mi interés por la Iª Guerra Mundial en ficción es muy relativo, otra cosa es desde el punto de vista histórico. Lo que me interesa mucho es lo que ocurrió en la década de 1930 (auge del fascismo y la extrema derecha y cómo eso derivó en el Holocausto y en la muerte masiva de civiles en Europa oriental. Quiero comprender cómo se genera la maldad que hace posible lo ocurrido en esa época (y durante la IIª GM) y que se ha vuelto a producir en la antigua Yugoslavia y en Ruanda. Podemos estar en puertas de algo similar y quiero entender, la guerra en sí misma no me interesa especialmente.
Procuro escapar de los libros publicitados, pero alguno de ellos, leídos en mi entorno por buenas lectoras, acaban produciéndome curiosidad y los leo (con resultados desiguales, más bien regulares), pero no es el caso de este. No sé si tuvo mucho éxito o no, lo compré porque me llamó la atención cómo trataba el tema.
Besos y feliz semana!!
Me expliqué mal, porque entendí y pretendía decirte, tal cual me cuentas que siempre te he notado muchísimo interés en la segunda guerra mundial... por el pueblo judío en particular.
EliminarLlevo una temporada muy liada y muy alejada de los blogs...a penas si entro, a ver si me pongo al día con tus entradas y las de todos.
Un beso y muy feliz finde LAURA!
Y sí, la historia se repite .. aterra ver la deriva que lleva la humanidad !
EliminarMi interés son las víctimas, personas por su condición de judías, gitanas, homosexuales, eslavas, políticas, etc. Aclarado el tema :))
EliminarUn abrazo!!
ResponderEliminarAún no he leído nada de este autor.
Pero tengo en lista de espera "Tres días y una vida".
Este que nos reseñas no creo que lo lea, no me atrae mucho...
Sí me pica la curiosidad esa serie que tiene de novela negra o policíaca (no sé bien...).
Veremos...
Espero que estés disfrutando de un buen finde!!
Ayer comí 'calçots'... ¡qué ricos estaban! ;)
Besos y petonets aliñados con un cálido abrazo!!!!
:)
Bueno, la cosa es ver si merece la pena el autor, con este o con otro libro si ya tienes uno. A mi me parece un autor interesante pese a que esta novela no me ha parecido de excelente.
EliminarJajaja, son ricos pero yo suelo comer una vez al año y tengo de sobras (y a veces ni una vez al año), lo que me gusta mucho es el xató que tiene una salsa parecida, no igual ehhh (creo recordar que en frivolidades culinarias hablé de este plato).
Buenísima semana y muchos besos y abrazos!!
Indudablemente, siempre rematas muy bien tus reseñas. La frase final retrata a la perfección tantos y tantos momentos de nuestras existencias.
La novela tiene buen aspectos, en tanto situarse en plena guerra mundial y conocer sus entresijos.
un abrazo
· LMA · & · CR ·
Es una frase con mucho contenido o fundamento o como queramos llamarlo, ya nos entendemos :)
EliminarAbrazos!!
Hola Laura,
ResponderEliminarA Pierre Lemaitre lo conocía por la novela negra, de hecho me gustó bastante (no entusiasmó) Vestido de Novia y ahora tengo empezado Irene pero aún no me ha atrapado (lo dejo y lo cojo) y leyendo la opinión de Margari voy a tener que perseverar con él. La obra que presentas no la conocía y también me parece interesante aunque de momento no la priorizo, tengo tanto por leer.
Un beso
Parece que hay unanimidad, entre quienes comentáis y conocéis al autor, sobre su opción por la novela negra.
EliminarUn beso.
Entre todas las guerras estúpidas, quizas la primera munidial brille con luz propia por el absoluto desparpajo con el que la oficialidad mandaba a los soldados al matadero. Carne de cañón para mayor gloria de la patria. Y el que sobrevivía, a joderse.
ResponderEliminarCien por cien de acuerdo con lo que dices, chafardero, una auténtica matanza entre europeos que pasó a segundo plano por el horror de la segunda, cuyo trasfondo nacionalista era el mismo.
EliminarLo que mas me ha gustado es esa frase final... Tan cierta y tan impactante
ResponderEliminarUn abrazo, amiga
Es una frase redonda como ya he dicho más arriba.
EliminarAbrazos!!
Fue la primera novela que leí de él y en su momento me gustó mucho pero reconozco que las siguientes obras que he leído me han gustado más: "Iréne", "Tres días y una vida", "Vestido de novia"...
ResponderEliminarAbrazo!
Recuerdo haberte leído la reseña y haberte comentado que yo tenía esta y que tenía intención de leerla. Tengo claro que he de leer las novelas negras de Lemaitre,
EliminarAbrazo!
No deja de ser lamentable el silencio que ha reinado con respecto a los sucesos y consecuencias de la Primera Guerra Mundial, la llamada Gran Guerra, simplemente por la existencia de otra atrocidad aun mayor con el advenimiento de la Segunda. Hay obras literarias fundamentales como Adiós a las armas o Sin novedad en el frente, films de gran calidad como El Gran Desfile, Senderos de gloria o Johnny cogió su fusil pero creo que solo ahora con el centenario de aquella conflagración espantosa salen a la luz obras antiguas y recientes sobre aquel período. Yo me sigo quedando con esa obra breve pero sustanciosa de Jean Echenoz, 14.
ResponderEliminarUn abrazo
Estoy de acuerdo con lo que dices sobre que esta guerra quedó en segundo plano ante la magnitud de la segunda. También coincido en que hay novelas y películas muy buenas sobre el tema y también me gustó la brevísima 14. Pero me parece que hay hueco para nuevas obras de diversos géneros sobre el tema.
EliminarUn abrazo!!
En mi opinión, las emociones, los ideales, la épica que, a menudo, encontramos en los relatos de las guerras, disfrazan el horror de la carnicería y las miserias que las siguen. Quizá no sea muy literaria pero me parece necesaria la crudeza para alertar y poner las cosas en su sitio.
ResponderEliminarEntiendo que tu hablas de otra emoción, pero me ha recordado lo que me enfada el sentimentalismo costumbrista de muchos relatos de nuestra guerra.
Un abrazo
Odio el patrioterismo, que debe ser espantoso en tiempos de guerra. Esta novela es muy dura con la postguerra, no tiene contemplaciones hacia los grandes negocios que se hicieron incluso con los cadáveres de los muertos en combate.
EliminarUn abrazo!!
El impacto moral de la Gran Guerra fue terrible, sobre todo en los que sufrieron sus trincheras, los gases y por vez primera el uso industrial de la tecnología y ciencia al servicio de la masacre.
ResponderEliminarParadójicamente, o no, Europa vivió esquizofrénicamente sus felices años 20 junto a miles de jóvenes destruidos psíquicamente. Creyó que las guerras eran cosa del pasado, y no, empezaron entonces a lomos de los peores demonios.
Has hecho un resumen espléndido de lo que significó la Gran Guerra, para Europa supuso un desastre. Añadiré un nuevo dato: fue el fin de las ilusiones internacionalistas, las "uniones sagradas" demostraron hasta que punto el nacionalismo había penetrado en los partidos socialistas y en la II Internacional. A partir de ahí pocas ilusiones conservaron los socialistas de ver el mundo de otra manera una vez se mataron entre ellos en el campo de batalla, cierto que se produjo en medio de la guerra la revolución rusa pero las esperanzas en algo diferente acabaron en la peor distopia. [Y dejo fuera laguerra civil española por no alargar este comentario en exceso].
EliminarCoincido nuevamente con Paco: rehuyo de todo tufillo a negocio editorial; máxime si golpetea sonoramente desde los anaqueles de novedades de las librerías, aunque salvo 'Camille' tengo las demás obras de Lemaitre esperando.
ResponderEliminarMucho se ha escrito para la conmemoración del centenario de la IGM o Gran Guerra, ésta debe haber sido uno de las obras más conspicuas.
Esa guerra fue tan cruenta o más que la posterior pues si bien no se habían desarrollado los armamentos desplegados en la IIGM, tampoco había recursos médicos para atender a los heridos. De hecho, la primer causa de muerte en la Gran Guerra fue tétanos. La vacuna apareció casi al finalizar la misma.
Me alegra saber que Lemaitre escribe bien y te gusta su estilo; el poco entusiasmo que dejó en ti sólo lo sigue dejando en espera.
Un gran abrazo, U-to!
Interesante esa perspectiva que añades sobre los sufrimientos de los herido en el campo de batalla, algo muy reiterado en las novelas y películas de la I Guerra Mundial y que tiene un gran efecto en Edouard con una herida terrible que no desvelo por si lees la novela.
EliminarPues fíjate, de este intercambio de comentarios me han entrado ganas de leer las novelas negras de Lemaitre... a ver si finalmente las leo, de momento no tengo nada más de él en mis estanterias.
Un gran abrazo!!
Boa tarde, desconhecia totalmente o romance e o autor, pelo que por aqui li, despertou-me todo o interesse.
ResponderEliminarAG
Me alegra mucho su visita y si he podido descubrirle a un autor, mucho más.
EliminarHola, yo leí esta novela hace poco y comparto plenamente tus palabras finales: balance positivo pero sin entusiasmo. Me pareció una buena novela porque Pierre Lemaitre es un gran escritor, pero esperaba algo más de ella, seguramente porque venía de leer la saga de Camille Verhoeven.
ResponderEliminarBuena reseña!
Un saludo!
Me alegra encontrar a otro lector que comparte mi opinión, tengo que leer esa saga de Camille.
EliminarGracias, bienvenido a este espacio de libros.
Un saludo.