Sandra (Marion Cotillard) dispone de un fin de
semana para convencer a sus compañeros/as de trabajo para que voten por el
mantenimiento de su puesto de trabajo a cambio de que ellos renuncien a cobrar
la paga extra.
Asistimos a partir de ese momento a una auténtico
martirio, un tobogán de emociones que
siente una mujer, con apariencia frágil, que ha sufrido una depresión de la que
no se ha acabado de recuperar. Cuando intenta reincorporarse a su puesto se
encuentra con que el empresario de la pequeña empresa en la que trabaja ha
planteado a sus compañeros/as el dilema de admitirla a cambio de renunciar a
una paga extra que todos necesitan. Tras el fin de semana, dos días y una
noche, se producirá la votación.
Sus apoyos, su pareja y una compañera de trabajo, la
animan a luchar y Sandra recorre los diversos escenarios posibles de la crisis
actual: urbanizaciones en el extrarradio que han quedado a medio construir,
barrios deteriorados donde se hacinan los inmigrantes, barrios obreros acosados por la miseria…
Encontramos
individualismo, consumismo, egoísmo y codicia. Y es que hoy se nos trata de
convencer de que la culpa de todo la tienen los de abajo, las víctimas, los que
pierden el trabajo, la vivienda, los que no pueden, ya no consumir, sino cubrir
las necesidades más vitales. Este mundo es de los fuertes, los débiles deben
sucumbir, neodarwinismo puro y duro.
Y
mientras veía la película con el corazón en un puño, las reflexiones del
filósofo coreano, asentado en Alemania, Byung-Chul Han, me venían a la mente
porque reflejaban lo que estaba viendo en la pantalla y lo que ocurre a nuestro alrededor, si queremos
verlo. El poder estabilizador de la sociedad neoliberal no es represor sino
seductor, se invisiviliza y desaparece como oponente, por eso resulta tan
difícil resistirse y rebelarse. Sandra y sus compañeros/as se explotan a sí
mismos, luchan contra sí mismos, si fracasan como Sandra, se cuestionan a sí
mismos, no a la sociedad. Todos ellos se sienten libres y están convencidos que
tienen capacidad de decisión y que esta es producto de su libertad. Ese sentido
de la libertad hace imposible la protesta.
El
poder estabilizador tiene una forma amable, se invisiviliza, y con ello se hace
inatacable, porque la persona sometida no es consciente de su sometimiento. La
opresión y la explotación son libres, no son impuestas, por tanto, Sandra acaba
auto agrediéndose y siendo víctima de la depresión, el suicidio y el burnout (el agotamiento profesional).
La
protagonista de la película, y sus compañeros/as, se ven arrollados por la
competición de todos contra todos, se sienten solos, aislados, separados. La
respuesta es aumentar la productividad, ser trabajadores modélicos, tener
varios trabajos para sobrevivir y otras estrategias solitarias ya que la
solidaridad y el sentido de comunidad se destruyen y se volatilizan.
La
conclusión es humilde y trágica. Hoy no es posible cambio alguno, la utopía
está muerta y es más imposible que nunca, solo la honestidad de la lucha
solitaria nos salva del sometimiento y la dominación. Es solo mera resistencia
estéril pero sin ella solo somos siervos, bueyes con un yugo que aspiramos a
cambiar por otro pensando que somos libres al decidir el yugo que más nos
conviene.
No sabía nada de esta película, Laura, lo que lamentablemente no es extraño porque pocas veces llegan por aquí a las salas comerciales, pero quizá pueda dar con ella en alguno de los cine clubes que por suerte no faltan. Como amante del cine, me ha gustado mucho tu recomendación de hoy, gracias.
ResponderEliminarBesos.
No creas que aquí se está distribuyendo bien. Son películas que aportan, de manera sencilla, mucho más que las superproducciones con las que nos asedian ;)
EliminarBesos!!
Bluff! cómo está Marion Cotillard en esta peli. Fantástica!
ResponderEliminarYo, como tú. Viví al ritmo que va ella, con el ánimo en modo montaña rusa tooda la peli... arriba, abajo, arriba y en picado. La vida a veces es como esta peli, la duda constante entre seguir o abandonar, sentirte un asco porque sientes que te pisan y al minuto siguiente sentir que eres tú quien sin desearlo debes pisar y no sabes si es mejor la sensación de víctima o verdugo, sin ser en realidad ninguna de las dos, solo que las circunstancias reparten esos papeles..Tremenda la imagen que proyecta esta peli de nuestra sociedad, tremenda la presión en la que viven millones de personas que mendigan por su trabajo, por subsistir... Tremendo en lo que se nos está convirtiendo este mundo nuestro.
Si al menos nos pudiéramos cargar a los los ogros/encargados amarga la vidas! ;- )
Muy buena tu reseña, LAURA, profesional, como siempre ! jaja muchas gracias y muchos besos.
Lo de profesional lo considero como una broma ehh No lo soy en nada de lo que aquí escribo y menos en cine.
EliminarAcabo de escuchar que en España alrededor del 35% de los trabajadores cobran menos de seiscientos y pico euros (soy un desastre para quedarme con las cifras). Millones de sandras y sandros pululando y buscándose la vida y asediados por la culpa de no tener éxito. Que asquito.
Me quedo con esa escena en la que se está comiendo un helado con su pareja, mira los árboles del parque y declara que quiere ser un..............................................pájaro.
¿Y quién no? Quizás es esa la utopía más realizable para los que menos tienen en esta sociedad.
Besos y gracias a ti por tus palabras!!
Este tipo de cine, -pensaba que francés, resulta que es belga- se distribuye como el culo y especialmente temáticas de este estilo.
ResponderEliminarHe leído tu reseña y las criticas que se le hacen en la red y ya la tengo apuntada. Ya sabes que durante más de ventimuchos años he sido sindicalista de calle, y la sinopsis de la película me ha recordado varias situaciones similares, situaciones que nunca terminaron bien, causa por la que mi tensión arterial la tengo un tanto fuera de límites.
Un abrazo.
Otra de las "verdades" es que los sindicatos no aparecen en toda la película. Qué pena, especialmente para los/las sindicalistas que habéis dedicado muchos años a la lucha.
EliminarEspero que te guste si logras verla.
Un abrazo!!
Y sin embargo, del reconocimiento de una propia situación imposible de sostener, nacen los cimientos para construir de nuevo, no sé sí de la mano de las viejas organizaciones, que va a ser que no me lo creo, o de pequeños movimientos autónomos, en los barrios o entre aquellos que tienen un interés común. Sé que, como en el año mil, algo distinto va a surgir sin pedir permiso. Un beso.
ResponderEliminarOjalá no te equivoques y tu optimismo se confirme. Por mi parte soy pesimista, especialmente aquí en Cataluña.
EliminarUn beso.
He visto de los hermanos Dardanne las dos películas con las que consiguieron la Palma de Oro en Cannes. El niño del 2005 y Rosetta del 99. Siempre han usado un tono ennegrecido pero realista para describir la explotación y el sometimiento de los sectores sociales que viven en la precariedad.
ResponderEliminarNo puedo hablar mucho de algo que no he visto pero por lo que comentas hay detrás de la película un lúcido estudio sobre lo que Owen Jones llama la demonización de la clase trabajadora y tal como dice este autor, al que tú conoces, vivimos en una sociedad donde el discurso individualista se sobrepone a la emancipación de clase bajo la falsa premisa de que existe una libertad real en las personas y que tienen capacidad de decidir. Es decir que los que se quedan abajo es porque no son lo suficientemente inteligentes como para subir en la escala social. La gran mentira capitalista interiorizada en una sociedad segmentada donde cada uno cree en la falacia de su propia individualidad.
Es lamentable que las conclusiones de estos dos grandes directores sean tan poco afortunadas. No existen utopías porque no hay voluntad real de cambio. La lucha solitaria y la resignación ante lo inevitable son dos armas de destrucción que convienen al sistema para tener a la gente perpetuamente atrapada en la red del sometimiento.
Besos
La autora de la conclusión lamentable soy yo, las lecturas de la película seguro que son variadas y no solo la que yo he desarrollado aquí.
EliminarLa voluntad de cambio puede existir, y existe, pero bien poco queda en el ámbito social al sumar por un lado la habilidad del poder para convencernos de que actuamos en libertad e igualdad de posibilidades con cualquier persona que tiene éxito (lo dice muy bien Owen Jones y mejor aún Byung-Chul Han). Y por otro lado la integración de las organizaciones sociales en el Estado junto con la desaparición de la perspectiva global y la fragmentación de lo global en movimientos identitarios y parciales desde los años setenta tras el fogonazo aparentemente revolucionario de mayo del 68. Es un proceso de largo recorrido acelerado por la actual crisis. Es tan difícil la lucha colectiva y solidaria, excepto en momentos de subida de la ola, como el movimiento 15M y otros anteriores, que la coherencia individual es el último reducto que queda para que no te engulla el sistema. Eso y arrebatar espacios de libertad momentaneos al poder.
No mezcles resignación, concepto de resonancias católicas a la espera del paraíso, o del cielo, con la honestidad y la coherencia personal cuando la ola se diluye en la orilla. Lo primero es de bueyes, lo segundo es la rebeldía.
Eso pienso yo personalmente, si es lamentable o no es otro cantar.
Besos.
Te voy a hacer una pregunta muy ingenua ¿si la maldad que lo pudre todo es contagiosa por qué no ocurre lo mismo con el bien?
EliminarTodo pareciera por lo que dices, que está condenado a sobrevivir únicamente en la conciencia individual y no es transmisible a los demás.
Besos
U-topia,
ResponderEliminarveo que les estás cogiendo el gusto a reseñar películas;)
No la he visto pero la tengo apuntada desde que leí la reseña que le dedicó Jordicine.
La tuya me ha parecido muy interesante al contextualizarla dentro del sistema neoliberal que sufrimos.
La situación que vive la protagonista la vivió por cierto una amiga mía en su puesto de trabajo y no consiguió convencer a sus colegas más cercanas de que redujeran algo (no mucho sus horas)a cambio de salvar su puesto. Al final,la empresa encontró una solución alternativa para mi amiga,pero las cartas de sus compañeros quedaron ya boca arriba.Es lamentable pero este sistema capitalista deshumaniza sutil pero implacablemente.
La película la veré sí o sí.
Bsts
Ya sabes que no paso de peliculera, así que siempre observo más desde fuera que desde dentro del film (pero es por pura ignorancia cinéfila).
EliminarSe parece, por lo que cuentas, como una gota de agua a esta película.
Yo estaré atenta a tu reseña cuando la veas.
Besos!!
Creo que fue en el blog de Ismael donde conocí esta peli. Pero no ha llegado por aquí y me he quedado con ganas de verla. Más ahora tras leerte. Por desgracias se están viviendo muchas situaciones parecidas. El verano pasado en un restaurante donde trabaja un amigo mío los empleados decidieron bajarse el sueldo para que el dueño no echara a nadie. Sí, a veces el compañerismo existe.
ResponderEliminarBesotes!!!
Claro que existe, depende de la calidad de las personas y de su conciencia de clase (es raro que olviden algunos/as que mañana les puede ocurrir a ellos mismos). Siempre me pregunto si el empresario no utiliza como excusa el cierre para pagar menos.
EliminarBesos!
He leido antes lo de Lorenzo Olivan....interesanre....luego el comentario sobre una pelicula que, como sabes, no puedo ver....esperarè al dvd....
ResponderEliminarNo es la primera vez que los hermanos abordan el darwinismo social, aunque x lo que veo, no tan frontalmente como aqui.
Los dardos envenenados que nos clavamos a nosotros mismos o al pròjimo....esea amable invisibilidad del mal que nos rodea...muy cierto...aunque creo que tiene un punto de no retorno en el que el ciudadano tras afilar sus garras contra el vecino....termina x tomar conciencia de su situaciòn...o eso deseo creer....
Como no he visto la peli....con el partido que sacan estos dos de los actores y del retrato de lo cotidiano....pues poco mas puedo decir. Anotada queda. Un abrazo.
En estos momentos tengo que reconocer que soy pesimistas, quizás puse demasiadas ilusiones en el Movimiento 15M y me involucré mucho, como hacía tiempo. Ahora asisto asombrada a lo que está ocurriendo y por donde se ha canalizado tanta indignación.
EliminarTambién sé que los ciclos de protesta son cortes sincrónicos, momentos en que la concentración de la acción colectiva impacta en la estructura política del grupo dominante (de la clase corporativa). Si es un ciclo es porque el alcance del mismo se repite, irregular, pero pendularmente. Su trayectoria se expande y se contrae, alternando momentos de flujo creciente (de cresta de la ola) y de reflujo. Casi es más importante saber descender que la ascensión posterior. Y ahí es donde la honestidad y coherencia personal por un lado, y preservar los espacios arrebatados al poder en el momento de ascensión, nos garantizan dar continuidad al ciclo de subida para poder llegar más alto. Sin embargo, el descenso en que estamos me desanima mucho porque me ilusioné más de la cuenta como ya he dicho.
Y no me enrollo más. Espero que puedas ver la peli, seguro que le sacarás mucho jugo como acostumbras.
Abrazos!!
La tengo a punto. Me ha encantado leer la reseña, la impresión que te ha causado, desesperanzadora aunque verdadera, no hay marcha atrás a no ser que sea a partir de la toma de conciencia coectiva y muchos años. La veo este finde. Un beso laura :)
ResponderEliminarDesde el realismo estamos mejor pertrechados para seguir el camino... de la Utopía ¿no?
EliminarA ver si te gusta. Un beso!!
Casi una situación de supervivencia...por tu reseña dan ganas de verla.
ResponderEliminarLas crisis y el flagelo del desempleo...los abusos de poder enfrentan a los seres humanos, menosprecian sus habilidades y los denigran, los esclavizan...en ocasiones tomando decisiones drásticas. En fin, es inevitable no conmoverse.
La estabilidad emocional se quiebra cuando no hay estabilidad económica.
Besos Laura, buen fin de semana.
Muy bien resumido Adriana, ese es nuestro panorama, la película lo recoge con gran fidelidad.
EliminarUn abrazo y buen fin de semana!!
ResponderEliminarReal como la vida misma...
Pero a veces, aunque sean las menos, hay reacciones solidarias y positivas... en la empresa en la que trabaja un amigo, en una situación parecida, redujeron su sueldo y repartierieron entre todos las horas de trabajo para evitar no uno sino tres despidos.
Tiene buena pinta, me suele gustar este tipo de películas... tomo nota por si algún día me animo a ir al cine o para bajarla desde internet cuando se pueda.
Besos, abrazo y buen fin de semana!!
;)
PD: Me gusta ese 'barquito de papel a la luz de la luna'... :))
Estas haciendo pruebas para cambiar de imagen ¿no? Este es muy sugerente y bello.
EliminarNo dudo de que haya reacciones solidarias y positivas, pero el ataque que estamos sufriendo por parte del neoliberalismo es de grandes dimensiones.
¿Te imaginas lo que tiene que hacer un barquito de papel para navegar y recorrer una gran distancia? Pues eso.
Besos y buen fin de semana!!
EliminarNo te quito razón... es tal cual... pero será que a mí no me pilla tan de sorpresa... desde hace tiempo lo veo así... inclusive cuando lo del '15 M' y otros movimientos que ha habido, hay y habrá...
Pero una cosa no quita la otra... luces y sombras, yin y yang... ciclos con sus crisis, subidas y bajadas... ¿el eterno retorno?
Más que pruebas... estados de ánimo y ganas de cambiar de vestido según me dé...
Y juguetear un poco también... ;)
El que vas a ver ahora me encanta (igual que los anteriores).
A ver qué te parece...
Molt petonets 'Lady Laura'!!
:)
No sé cuando aprenderé a tomarlo así como tú dices.
EliminarTodas las imágenes me gustan, pero quizás la anterior de la mujer vestida de rojo es la que me gusta más. Está bien jugar, claro que sí.
Besos y buena semana!!
Desde luego, verdadero tobogán emocional al que te enfrentas al ver esta peli, siempre con el corazón en un puño. Esta sí que es una verdadera película de terror y no las de zombis. La conclusión para mí es que vivimos en un sistema intrinsicamente preverso. Como único destello positivo, que el calvario al que se enfenta la protagonista sirve para sacarla del pozo en el que se encontraba.
ResponderEliminarLa dignidad de su lucha es otro destello positivo.
EliminarTerror auténtico, qué razón tienes.
A mí eso del darwinismo social y el neoliberalismo me parece bastante despreciable. No entiendo como la gente en general, en Occidente, apuesta aún por este tipo de ideología que tiene que ver con el puro y duro capitalismo. Esto crea pobreza y unas desigualdades terribles que no sé hasta cuándo y cuánto más se podrán soportar. El individualismo hasta un cierto punto. Me hace gracia el concepto de libertad de estas ideologías que se tienen por las mejores. Es una farsa. La libertad del individualismo es la coerción del otro. Uno no puede hacer lo que le de la gana por el simple hecho de ganar por ganar, debería cumplir unas leyes (regularizaciones que no se hacen para beneficio de las multinacionales y los grupos financieros) que a los neoliberales les espanta. La libertad del neoliberalismo dice que no se debe controlar nada, que los mercados deben hacer su trabajo, aunque creen pobreza… ¿y dónde estará después la libertad de los pobres o los que tienen poco? Poca libertad tendrán si son unos necesitados. Primero dame seguridad (económica) y después lo otro. Está claro que la libertad es importante, pero la necesidad lo es aún más.
ResponderEliminarPD y no, no soy de PODEMOS ;-D, aunque simpatice con muchas de las cosas que dicen, soy, simplemente, alguien de izquierdas (socialdemócrata podría decirse), pero de los de verdad, no de esos que dicen serlo y después se venden al mejor postor económico.
Los Dardenne hacen pelis interesantes que retratan bastante acertadamente situaciones sociales desde una perspectiva bastante realista. Creo que en ese sentido prefiero al mejor Ken Loach que a los mejor Dardenne, pero eso no quita, ni mucho menos, su mérito. Un abrazo, Laura. Buena entrada.
El neoliberalismo es persuasivo, al ser casi invisible nos hace creer que todo depende de nosotras mismas y que tenemos libertad de elección. Es astuto como no lo era la clase burguesa del XIX y gran parte del XX que era burda, represiva e impositiva. Aprendieron y ahora se han reconvertido en una clase corporativa más eficaz en la manipulación, la explotación y el dominio social.
Eliminar¿Hemos aprendido nosotras/os a ser más astutas e inteligentes?
He admirado y admiro mucho a Ken Loach, sin embargo esta película en su sencillez refleja de forma desoladora nuestra sociedad como Loach o mejor (pero no soy una entendida en cine como tú y puedo estar equivocada).
Gracias y abrazo!!
Parece muy interesante... además de actual...
ResponderEliminarEs persuasión que citas del neoliberalismo creo que tiene que ver con lo que Galbraith denomina como "poder condicionado" en su libro "La Anatomía del Poder"... ese poder, a través de la "educación" (materia de aparente discordia entre los diferentes apéndices del poder) condiciona nuestro pensamiento, nuestras acciones y nuestras reacciones, frente a lo que él nos impone de "esa forma seductora" que tú muy bien citas...
En toda esta temática subyace lo referente a las células sociales y a su desenvolvimiento e interrelación... no sé si cabría, pienso que sí, ver la película a la luz de los seis niveles (microsistema, mesosistema, exosistema, macrosistesma (cronosistema, globosistema)) establecidos en el modelo ecológico de Bronfembrenner... creo que la psiques individual y la colectiva se mueven dentro de esos parámetros y se entiende mejor desde las referencias de los mismos...
Tu reseña me parece magnífica... estoy plenamente de acuerdo con tus conclusiones sobre la vida (resaltando la laboral, que es el tema objeto de la película)... somos víctimas de las circunstancias que la cultura y la subcultura han ido creando...
Y aunque "saltar a conclusiones rara vez conduce a felices aterrizajes"... supongo que la solución para liberarse del yugo será la misma que apuntó Lope en su Fuenteovejuna... pero Galbraith también citaba al poder condigno y al poder compensatorio en la disección que hacía del PODER... y estos últimos complican mucho las decisiones, las acciones y las reacciones... por las conclusiones que induce el anterior...
Bueno, no sé si me he ido del tema...
Abrazo
La respuesta a los interrogantes es: Sí... no conozco un método mejor... creo que la unión hace la fuerza y la organización el resto... la cuestión tal vez sea qué dimensión le damos cada uno a la unión y a la organización... la dimensión que yo le doy a ambas daría para un largo texto...
EliminarAbrazo.
He leído poco a Galbraith, tomo nota de ampliar mi lectura de sus obras sobre el poder que es un tema que me interesa mucho, y nada a Bronfembrenner (lo apunto para ver si también me puede interesar), así que muchas gracias por tu aportación.
Eliminar¿Piensas que es factible en el siglo XXI, cuando el capitalismo se ha transformado de manera espectacular y el poder ha mejorado su forma de machacarnos a través de nuestra propia iniciativa, usar el método Fuenteovejuna?
Como no espabilemos y busquemos otros métodos a la altura de nuestros oponentes, se nos comen con patatas (que encima ponemos nosotros gratis).
No te has ido del tema, me alegra verte de nuevo por aquí, Abrazos!!
impersonem, he repetido mi comentario porque había una falta de ortografía y no podía corregirla de otra manera.
EliminarLa unión es clave y estoy contigo, la organización y las respuestas es lo que tenemos que renovar y cambiar, están obsoletas las que vamos dando y así nos va.
Abrazo!!
Por aquí, la película recorre los circuitos 'under' y son muy pocos los que han participado de las avant premier. Se dice que llegaría a las salas en febrero de 2015. La verdad es que son muy pocos los films que resultan algo más que pasar el tiempo; esos que te dejan pensando o te hacen tomar partido. Éste parece ser uno de ellos.
ResponderEliminarComparto contigo la mirada sobre el neoliberalismo; se han despojado de la brutalidad, eligiendo un tono invisible e impersonal de pasarnos sus decisiones: es el famoso 'sistema' o 'las megacorporaciones', responsables de las toma de decisiones. De esa manera nadie se hace cargo, no hay cara visible y te dejan a ti la pregunta de si tú mismo no eres el culpable de que las cosas hayan llegado hasta este punto. Lo que se dice unos mierda. Ni hablemos de despido o paro, basta con intentar reclamar los servicios: te atiende un contestador después de marcar veinte números para llegar adonde quieres iniciar el reclamo... Nunca hay nadie humano detrás de tus necesidades.
Intentaré conseguir el film. Me ha gustado sobremanera que dedicaras a una peli alguna de tus sabias reseñas en tu espacio, que compartimos todos los que te leemos, Laura.
Un beso enorme.
Es un film de una sencillez asombrosa que te va dejando arrugada en el asiento cuando ves la dimensión de lo que está ocurriendo. Casi lo mismo que leer a Byung-Chul Han.
EliminarY comparto lo que dices sobre la reclamación de servicios con ordenadores.
Gracias querido Marcelo, me arriesgo a meter la patita que de cine poco se más allá que ser espectadora.
Un abrazo grande!!
Laura, me ha encantado lo que cuentas y cómo lo cuentas. Sé que esta película aún está en los cines...y la tengo presente. Creo que me resultará complicada verla, porque esos momentos se sufren incluso con organizaciones que no imaginas, tales como una ong.
ResponderEliminar¿Se juega con el corazón de las personas? ¿Cómo no vas a querer ayudar a alguien...pero seguramente que contabas con ese dinero para poder pagar seguros, facturas...? Vivimos en un mundo manipulado por quienes pueden decidir qué hacer con tu trabajo, qué hacer con tu dinero...En fin...Tomo en cuenta la película, aunque creo que saldré muy enfadada...y triste.
Un beso grande
Así es María, intentan vendernos la moto de la solidaridad y el sharing para, como dice Byung-Chul Han, desarrollar la comercialización total de la vida, incluso rentabiliza la hospitalidad. La ideología de la community realizado en colaboración lleva a la capitalización total de la comunidad, ya que en la economía basada en la colaboración predomina también la dura lógica del capitalismo.
EliminarEs terrorífico este panorama pero debemos ser conscientes para poder afrontarlo. ¿Cómo? Ese es el reto.
Un beso y procura no enfadarte mucho (que conste que yo lo hago también, así que soy la que menos puedo hablar).
A pesar del pesimismo que destilan tus palabras, tengo ganas de ver esta película. ¿Hay algún hueco para la esperanza?
ResponderEliminarAbrazo!
Siempre hay hueco para la esperanza, los ciclos de protesta son como las mareas tienen sus momentos de flujo y reflujo. Lo importante, desde mi punto de vista, es renovar las formas de disentir y no seguir pensando en que son válidas las del siglo pasado y crear espacios de libertad aunque sean pequeños. Pero mi opinión es muy peculiar, mucha gente ahora mismo confía en otras opciones que han generado ilusión.
EliminarAbrazo!
Creo que desde hoy me voy a quedar a dormir en ésta casa. la foto del cabecero que me encanta y el lateral por el que se deslizan las mejores imagenes y en cualquier lugar se escucha una música magnifica. Un beso.
ResponderEliminarMi casa está siempre abierta para ti con Versos.
EliminarBuscaré la película, buen tema para este presente donde la realidad misma está saturada de argumentos, dramas y situaciones como la que describes en esta reseña y claro peores aún y mucho pero mucho peores. Lo importante para mi de todo esto es que al tiempo que se da esta situación se avizora una nueva condición humana presta a resarcir su autoestima, alegría y fe en su victoria y que no se rinde ni se entrega demostrando que la forja del futuro está al calor de la lucha constante y al retumbar del combate diario, cada uno ocupando el frente de su trinchera sin pausa y sin tregua. Como sabes vivo en un continente que palpita condiciones nunca antes vistas y donde se grita con ganas el hacer las cosas de una manera distinta y los resultados son evidentes. Te dejo un enlace que reflexiona sobre conversaciones ya sucedidas en esta página http://elgritodelalechuza.blogspot.com.es/2010/05/el-final-del-estado-del-bienestar.html
ResponderEliminarBesotes querida Luna.
Ojalá pudiera mantener ese optimismo que tú expandes cuando llegas a este espacio. No lo tengo, pero eso no significa que me rinda, mañana estaré en las manifestaciones por la dignidad convocadas en todo el país.
EliminarBesos!!
Vi la película y me gustó, porque refleja en gran parte qué tipo de sociedad somos. Confieso que me pareció tremendo comprobar algo que ya es sabido, y que no es s otra cosa me que el egoísmo que abunda entre las personas. Aunque, también fue bello comprobar que hay gente buena, justa y solidaria que no solo está en las películas. Son, desde luego menos ruidosas y bastante menos populares, pero existen. Otra cosa diferente es que encuentren y organicen en un acuerdo común. En ello seguimos.
ResponderEliminarTambién estuve hoy en las calles #29NDignidad.
Un abrazo.