De esta autora había leído este año Todos deberíamos ser feministas, un texto breve (cuarenta páginas) que recogía una conferencia que Adichie había dado en 2012. Este librito se ha convertido en un éxito total en las redes sociales, pese a ello me decidí a leerlo. Un libro muy elemental y obvio que bien poco me aportó aunque tuve que dar la razón a su autora cuando afirmó:
A menudo cometo la equivocación de pensar que algo que a mí me resulta obvio es igual de obvio para todo el mundo.
Cuando leí este alegato en favor del feminismo ya tenía comprado Americanah, pero su grosor (603 páginas) no me animaba a su lectura. Quién sabe por qué lo saqué de la estantería, toda valiente, el nueve de diciembre, pero la elección ha resultado ser acertada porque el inicio de las vacaciones me ha proporcionado el tiempo que necesitaba para no eternizarme en su lectura.
Esta novela tiene todos los ingredientes para absorbernos en su lectura: una buena historia que, a través de diversos personajes, relata el viaje hacia Estados Unidos (en el caso de Ifemelu que es la protagonista), Gran Bretaña u otros países de hombres y mujeres nigerianas que buscan nuevas posibilidades de estudio o de trabajo.
Primera sorpresa…
No son africanos/as pobres, tienen un nivel de estudios alto y recursos económicos suficientes para poder vivir en Nigeria.
Segunda sorpresa…
Uno de los temas centrales de la novela es la raza y las interesantes reflexiones de Ifemelu, una negra no afroamericana, que toma conciencia de su negritud en EUA. Por otro lado, la crítica (plena de humor) a los afroamericanos que cuando se trata de África, se creen toda clase de chorradas (173).
Tercera sorpresa…
Todas las minorías raciales de estados Unidos –negros, hispanos, asiático y judíos- soportan putadas de los blancos, putadas de distintas clases, pero putadas al fin y al cabo (267).
El sentido del humor no oculta el racismo norteamericano latente siempre.
Y hay mucho más, historias de amor, especialmente la que une a Ifemelu y Obinze. Hay libros. Hay moda, sobre todo relacionada con los peinados. Hay blogs. Hay solidaridades familiares y amistades.
En definitiva, estamos ante una buena novela.
Ya leí 'La flor púrpura' de esta autora y me gustó. Tengo éste y otros libros de Adichie para leer. Pero suelo espaciar mis lecturas de un mismo autor. No obstante, tus líneas refuerzan el interés por leerlos.
ResponderEliminarGracias por la reseña.
Un gran abrazo.
Quiero leer "La flor púrpura" pero como bien dices voy a espaciar un poco la lectura entre una y otra.
EliminarGracias a ti por tu comentario.
Abrazos!!
Me gustó más La flor púrpura, aunque este también me gusta y, como dices, me parece una buena novela.
ResponderEliminarBesos.
Definitivamente tengo que leer "La flor púrpura"...
EliminarBesos.
Muy buena la cita del principio... No conocía a esta persona y la verdad es que una novela de 600 o 700 paginas me resulta ya algo casi inalcanzable... En fin, no se... No se...
ResponderEliminarUn abrazo, amiga
Jajaja, seguro que inalcanzable no es, pero comprendo tu reticencia, yo también la tengo (y me acabo de leer otra de más de setecientas páginas).
EliminarUn abrazo.
Pues no me hubiera acercado a esta novela, sinceramente. Pero ahora sí que lo haré.
ResponderEliminarBesotes!!!
Espero que te guste, Margari.
EliminarBesos!!
Comencé la lectura de esta novela no hace mucho, pero la dejé de lado. Tu entrada me anima a reanudarla.
ResponderEliminarAbrazos
¿No te motivó la historia? A ver si un segundo intento tiene más éxito.
EliminarAbrazos.
Encuentro muy interesante el fenómeno de Nigeria, el país natal de Chimamanda, como cuna de grandes narradores; Cyprian Ekwensi, Amos Tutuola, Chinua Acheve, Wole Soyinka (el primer Nobel de literatura africano), Ben Okri, el joven y prometedor Chigozi Obioma (lo publicó Siruela en 2016, con “Los Pescadores”), los poetas Christopher Okigbo , Gabriel Okara y John Pepper Clark. Y, por supuesto, la autora Flora Nwapa, la primera mujer nigeriana publicada, consiguiendo abrir la puerta a otras tantas escritoras de su país, como la fascinante y comprometida Buchi Emecheta (publicada en España), y algunas más, entre las que se encuentra la propia Chimamanda.
ResponderEliminarExcepto los poetas, cuyas publicaciones aquí podrían encontrarse en algunas antologías marginales, y lo mismo en cuanto Flora Nwapa si no me equivoco, todos los mencionados tienen títulos propios traducidos al castellano.
Esperemos que Chimamanda no sucumba a la adulación con esa sobre exposición mediática que lleva a sus espaldas, de momento su obra es muy meritoria y parece controlar bien la situación.
Me gusta eso que señalas de las reflexiones del libro sobre la cuestión racial sin renunciar al sentido del humor, me parece un binomio atractivo.
Gracias, Laura, y buen finde!
¡¡Qué conocimiento tan exhaustivo tienes de la literatura nigeriana!! Yo solo he leído a Acheve que me gustó. Tendré que seguirles la pista a todos estos autores y autoras que señalas.
EliminarVeo el mismo peligro que tú respecto a Chimamanda, se ha puesto de moda (sobre todo sus pequeños ensayos sobre feminismo que yo encuentro muy básicos).
El sentido del humor reina en esta novela, aunque el dramatismo existe también, pero se agradece el humor.
Gracias ati por tus conocimientos y aportaciones. Buena semana.
Un abrazo.
Uyys Laura, ya me gustaría ser un experto en literatura nigeriana, o de cualquier otro lugar, con un conocimiento profundo.
EliminarSolo ocurre que a veces tengo un interés desmedido por un país, y trato de acercarme a sus letras, al menos a una representación relevante de su literatura, y me hago una lista propia. Es cierto que he leído a algunos autores de los que cito, pero ni de lejos a todos… aunque ahí los tengo en el horizonte.
Tú eres una lectora mucho más fecunda que yo, sin duda ;)
Cuídate.
Pues me aprovecharé de ese interés por la literatura nigeriana y consultaré tu lista, seguro que merece la pena.
EliminarGracias por tus palabras y un fuerte abrazo.
ResponderEliminarLa tengo en espera, junto con 'La Flor Purpura'.
Y después de leer tu reseña me han entrado más ganas todavía de leerla.
Convivo diariamente con nigerian@s.
Besos y cálido abrazo!!
:)
Esa experiencia y conocimiento de la población nigeriana harán que te resulte todavía más interesante.
EliminarBesos y abrazos!!
Interesante propuesta que no conocía y que seguramente es de las que acaba rompiendo esos tópicos (esas sorpresas que tú comentabas) y si encima están tratadas con un cierto humor, aún me parece mejor propuesta.
ResponderEliminarAbrazos
Es una novela interesante por muchos motivos, tratar el tema de la raza con humor sin ocultar su trascendencia es uno de sus grandes méritos.
EliminarAbrazos!!
Por desgracia creo que todas las sociedades son racistas, otra cosa es el grado de disimulo que haya. Hasta que no nos quitemos el miedo al diferente así nos va a lucir el pelo.
ResponderEliminarPor tu reseña, merece la pena darle una oportunidad a esta novela.
Estoy de acuerdo en lo que dices, nos han educado para desconfiar del que es diferente, para sentirlo como una amenaza, cuesta mucho desterrar esos prejuicios, hay que proponérselo...
EliminarMerece la pena, sí.
Y como si alguien quisiera resistirse y obstinarse en no creer en las putadas Trump grita a los cuatro vientos y voz en pecho eso de los países letrinas, o huecos de mierda!!! a ver si a alguno de tantos lametraseros todavía no le queda claro. Jajajajajajajajaja
ResponderEliminarBesos Luna!!!
Aquí hay un dicho: dime de qué presumes y te diré de lo que careces. Pues eso... es un pendejo........ peligroso.
EliminarBesos, Aristos.
Te leo mientras escucho a Otis. Cosa que recomiendo a todo a aquel que pase por aquí. Me has seducido una vez más. Mucha chicha se ve que hay por sus páginas. Hasta el punto de que de este no te digo simplemente q lo anoto. Este voy a por él ya.Gracias y un abrazo
ResponderEliminarMe parece una buenísima recomendación porque para eso está ahí, para colaborar en la seducción de las propuestas literarias que voy trayendo por este espacio.
EliminarUn abrazo.
Hace un par de años que propuse en los clubes de lectura de Burgos el leer esta obra, pero no tuve fortuna. Lo volveré a proponer, avalada la petición por tu comentario.
ResponderEliminarAbrazos.
Ignacio
¿Y eso?
EliminarPues creo que para un club de lectura esta novela daría mucho de si.
Abrazos.
Qué bueno encontrar un punto de vista diferente. Sin ser un gran lector, por mi provecta edad, tengo la impresión de que todo lo he oido antes. En Roterdam vi una exposición de jovenes artistas africanos que fué un descubrimiento para mi de nuevos caminos, de ideas frescas. Africa es el continente del siglo. Me apunto a Chomamanda.
ResponderEliminarGracias una vez mas y un abrazo fuerte.
Concuerdo con que a veces todo parece repetirse, sin embargo según cómo esté expresado o como renueva lo universal, ya despierta el interés de la lectora o el lector. Esta autora aporta ideas, humor y una narrativa interesante.
EliminarAbrazos.
Yo la leí este verano y me gustó mucho. Y también tengo "la flor púrpura" en espera. Un abrazo grande!!
ResponderEliminarQuiero leer también "La flor purpura"...
EliminarMuchos abrazos.
Con esta autora me está pasando que es de las que voy acumulando libros suyos sin haberla leído. A eso se le llama fe ciega ¿no?
ResponderEliminarUn abrazo
Confianza máxima, seguro que tienes un buen pálpito :))
EliminarUn abrazo!!
Hola Laura, gracias por tu visita.
ResponderEliminarSiempre leo tus reseñas, sin embargo no siempre dejo comentarios -mea culpa- jajaja. entiendo que sería ideal leído el libro, puedo opinar acerca de algún fragmento que dejas si me resulta atractivo, pero con ciertas limitaciones.
De todas formas es interesante conocer diferentes autores, y me seguiré asomando a tu ventana en la medida de mis posibilidades.
Te dejo mi fraternal abrazo y todo lo mejor para éste flamante 2018.
No te preocupes, cuando vienes eres bienvenida siempre. Yo voy justa de tiempo y no siempre dedico el tiempo que dedicaba al blog, son etapas.
EliminarMis mejores deseos también para el 2018.
Chimamanda es imprescindible...en Suecía, el día de la mujer, regalaron gratuitamente en el instituto el libro de "Todos deberíamos ser feministas"...coincido contigo en que no aporta mucho más de lo que ya sabemos, pero a veces lo obvio se vuelve invisible, y contar su experiencia de cómo llego a saber que era feminista, me gustó.
ResponderEliminarHe leído más a Chimamanda...hay otro pequeño librito sobre una carta que se le envía a su amiga para la crianza de su hija...muy interesante...
Descubrí a Chimamanda hablando precisamente de los estereotipos...fue una charla TED y me impresionó su manera de cautivar al público y cómo hablaba con mucha sencillez de temas evidentes como el racismo. Americanah ha estado en mis manos incontables veces, la última hace dos días...y nunca termino de atreverme, ya que...como bien dices, el volumen del libro es grande y no soy tan devoradora de libros como tú.
En fin...puede que la próxima vez rescate al libro de su estantería en la librería y me decida...ya veremos...lo que cuentas me gusta, y va muy en el tono a lo que suele ser ella.
Un abrazo y felices lecturas. (Me encanta la portada de arriba y el lateral...como siempre).
Sí, estoy de acuerdo en que hay que repetir lo evidente, lo obvio, pero a mi se me queda corto, por eso decidí no leer el de la educación de la hija. Sin embargo la novela me ha gustado, es fresca, tiene desparpajo y la historia está bien contada.
EliminarAbrazos y felices lecturas (graciasss)
Hace dos días falleció Hugh Masekela que huyó de Sudafrica con su mujer la grandísima "Mamá Africa" Miriam Makeba y cogió folgos como decimos en gallego, cogió fuerzas al calor de los movimientos pro derechos de la gente de color y el Black Power en su época de apogeo. Hubo un rico contacto cultural que ha dado sus frutos en diferentes campos culturales desde la música a la literatura. Primero los sudafricanos, luego los nigerianos, los maravillosos músicos de Mali y Camerún etc...150 años antes se creó Liberia con al contribución de muchos esclavos repatriados sin embargo ya sabemos como acabó aquella experiencia liberadora.
ResponderEliminarUn abrazo
¿Cómo acabó o cómo empezó? Yo tengo entendido que Liberia empezó como proyecto a comienzos del siglo XIX cuando los Estados Unidos de América proyectaron varios planes para establecer una colonia en África para los esclavos afroamericanos liberados.
EliminarDesde 1847 hasta 1980 el estado de Liberia fue gobernado por la pequeña minoría de colonos afroamericanos y sus descendientes, conocidos como américo-liberianos, marginando del poder político a la gran mayoría indígena (95%) de la población liberiana.
Sobre música conozco poco, así que apunto las referencias que has dado y busco... Gracias.
Un abrazo.