El descanso se ha alargado más de lo que pensaba y vuelvo con cierto desánimo provocado por un verano complicado. Las circunstancias que me han envuelto han provocado que no sintiera ganas de este espacio que tanto me gusta.
Pese a todo, he leído.
Siempre he sabido que la lectura me salva, este verano lo he comprobado.
He tenido pocas ganas de escribir las reseñas de los libros, pero algo he escrito de cada uno, espero transmitiros ganar de leer.
¿El título era una premonición?
Este segundo libro de la “Trilogía del muchacho” me ha interesado más que el primero (que me gustó bastante). Una parte importante del libro es el camino del Muchacho y Jens, el cartero, para entregar la correspondencia en la zona oeste de Islandia. Es casi primavera pero el frío, la nieve, las ventiscas y la dureza del final del invierno lo invaden todo. El camino es tan duro que se va creando un vínculo afectivo entre el Muchacho y Jens que no era previsible por el carácter del cartero.
Me he anotado algunos párrafos que he apuntado en la libreta resaltando la palabra clave y, casi, se ha formado un poema:
Literatura, mar, libros, palabras, frío, reino de los cielos (de nuevo libros), silencio, mujeres, ser humano.
Algunos de estos párrafos: (…) la literatura no nos hace humildes sino sinceros, esa es su naturaleza y ahí radica su importancia (16).
El océano respiraba con pesadez en alguna parte, ahí fuera, en la nevada que cubría el mundo y lo engullía todo. (…) por encima del temporal se oía con claridad la respiración del mar, la inhalación profunda de una bestia sin alma, cofre lleno de tesoros y tumba de miles de hombres (25).
Hay libros que son entretenidos pero que no remueven nada en las personas. Luego existen otros que te hacen dudar, que te dan esperanza, que amplían tu mundo y te enseñan lo que es el vértigo. Ciertos libros son esenciales, otros son un divertimento (26).
Los dos hombres están callados, el muchacho por timidez, Jens porque prefiere el silencio sobre todas las cosas, el silencio es un refugio, le da paz (193).
Yo vengo aquí y siempre me dan ganas de leer.
ResponderEliminarEspero que lo complicado se vaya alejando de tu vida tan pronto como sea posible.
Un abrazo fuerte.
Y como me alegra que tus visitas a esta casa provocan más ganas de leer :))
EliminarConfío en que se estabilicen las cosas y encuentre la mejor solución, veremos...
Gracias por tus buenos deseos y otro fuerte abrazo.
Varias veces he tenido este libro entre mis manos...pero al tratarse de una especie de trilogía lo he dejado marchar. No obstante, las palabras que rescatas me conmueven, y puede que le de una oportunidad.
ResponderEliminarBienvenida...gracias por volver...tus reseñas se echaban de menos. Pero a veces, es necesario tomarse un tiempo...lejos de aquí.
Espero que todo mejor, y asentándose.
Un abrazo grande
Yo creo que los puedes leer por separado y cada libro (al menos los dos primeros) se pueden sin haber leído el otro, aunque el protagonista crece con cada libro.
EliminarGracias por tus palabras, María.
Las cosas tienen su tiempo...
Una abrazo grande.
Comparto el comentario de El collar de Hampstead. Tu blog despierta el interés por la lectura, sobre todo porque traes libros esenciales, de esos de obligada lectura, muchos de los cuales descubro aquí por vez primera. Como la triogía de Jòn Kalman Stefánsson de la que nos hablas. Libros, mar, silencio... Suficiente para leerlo.
ResponderEliminarUn abrazo.
Gracias, gracias... me encanta provocar deseos de leer en quienes entráis en este espacio.
EliminarAbrazos!!
Hola, amiga Laura. Celebro tu reaparición, para mi es una alegría.
ResponderEliminarEs curioso, también me acabo de incorporar y lo hago plasmando unas sensaciones iniciales muy similares a las tuyas, aunque imagino que con circunstancias muy distintas.
Ya tenía apuntado a este escritor por tu otro comentario, me dejaste con muy buen sabor de boca.
Islandia es un magnífico paraje para dejar a la mente divagar...
Cuídate y un fuerte abrazo, se te echaba de menos :)
Me alegro de reencontrarte y muchas gracias por tus palabras.
EliminarLos países nórdicos me encantan, sobre su literatura tú sabes mucho y siempre leo tus recomendaciones al respecto.
Un fuerte abrazo!!
ResponderEliminarMe voy a repetir, pero coincido con los demás: Se te echaba de menos...
Laura y sus...
e
c
t
u
r
a
s... ;)
Sobre el libro que hoy reseñas esas palabras que resaltas son atrayentes pero mi lista es infinita... ahora estoy casi con tres a la vez... y volviendo a la rutina invernal con más de todo... :S
Pero sobretodo, como ya te dije, espero que todo vaya encauzándose poco a poco y vuelvas a encontrar el equilibrio y la energía vital.
Que pronto estés mejor... todo lo mejor posible.
Si me necesitas y/o puedo ayudarte en algo, házmelo saber...
Besos y cálido abrazo!!!!
Querida X, mi querida L E C T O R A...
EliminarGracias por estar ahí, por tu calidez y generosidad.
Leer tres novelas a la vez me parece una proeza.
Besos muchos.
Hola Laura, siento lo de ese verano complicado, muchos ánimos y poquito a poco a ver si recuperas las ganas y todo se normaliza. Se te echaba de menos.
ResponderEliminarSobre tu propuesta parece interesante aunque de momento no aumento mi lista de pendientes que no quiero agobiarme.
Besos
Gracias Conxita,
EliminarComo se desea la normalidad cuando las cosas se tuercen...
Besos!!
Me alegra verte de vuelta! Y espero que esas complicaciones se vayan con el verano. Sobre el libro, me tientas y mucho. Me gusta lo que cuentas y me gusta esos párrafos que has elegido.
ResponderEliminarBesotes!!!
Muchas gracias por tus palabras. Es una tentación cuyas expectativas no decepcionan.
EliminarBesos!!
Vengo de dar una vuelta por la Rioja que me ha sentado estupendamente. Te lo digo como idea anti bajón. Si ya no te quedan días libres siempre te puedes tomar un buen vino que no es lo mismo pero algo hará.
ResponderEliminarMe ha gustado mucho tu poema-collage.
Un abrazote.
Jajaja, estuve antes del verano por una zona cercana a Logroño y me gustó mucho, y como no, su vino es excelente, un buen antipenas.
EliminarUn fuerte abrazo,
Esperemos que las cosas se encaminen por donde quieras que vayan y mientras tanto seguimos leyendo porque como todos los que tenemos este amable e inofensivo placer sabemos la capacidad que tiene para curarnos, o aliviarnos al menos, de nuestros males.
ResponderEliminarUn abrazo
Nunca agradeceré suficientemente a la lectura todo lo que me ha ofrecido en la vida.
EliminarUn abrazo.
¡Cómo entiendo el silencio! En bastantes ocasiones pago mi cuota de ruido para poder llegar al silencio (que no a la paz).
ResponderEliminarLaura, qué puedo decirte, puedes aparecer por aquí cuando lo creas.
Abrazos (casi de otoño).
Ignacio
P. D.: me alegro de leerte.
Gracias Ignacio,
EliminarCoincido contigo en la querencia del silencio y de la lectura.
Abrazos!!
A ver si el otoño te es más propicio, aunque siempre nos quedarán los libros.
ResponderEliminarOjalá sea así. Y siempre con libros.
EliminarPrecioso todo, amiga... Me han encantado esos fragmentos que has seleccionado...
ResponderEliminarAnimo... Ten mucho animo...
Gracias, Ildefonso. Procuro que así sea para poder elegir lo que sea mejor...
EliminarMe alegra tener noticias tuyas, U-to. Imagino los motivos de tu verano complicado; mi primavera lo sigue siendo tal vez por las mismas razones.
ResponderEliminarNo tuve mucho tiempo para escribirte, pero me he tomado todo el tiempo de leerte. Ya bajé este título, debido a estas mismas líneas.
Leí el anterior de esta trilogía -no sabía que habría de componer una trilogía- y me había gustado, como a ti.
Espero que tu futuro orille mejores costas que las actuales. No puedo estar allí, pero intento estar presente de alguna manera.
Recibe un fuerte abrazo y un beso grande.
Tengo que buscar el tercer tomo de la trilogía que todavía no lo he comprado, pero que pienso leer. Me alegra mucho que compartamos esas afinidades lectoras que nos unen pese a mediar todo un océano, dos hemisferios e incontables kilómetros.
EliminarGrandes abrazos, querido Marcelo.